138 años de impulso al sector productivo
138 años de impulso al sector productivo
Un día como hoy, en 1877, se formalizó la escritura que creaba la sociedad anónima Banco de la Unión, ahora Banco de Costa Rica, cuyos socios fundadores fueron hacendados, comerciantes y agricultores.
En 1884, estuvo al frente de la modernización bancaria que generó el Contrato Soto-Ortuño, el cual lo convirtió, por muchos años, en el primer y único emisor de moneda, que trajo consigo diferentes discusiones, como la acontecida en 1885, que analizaba el retiro de circulación de billetes sobrantes y la disponibilidad de pesos en plata para la acuñación de moneda nacional. El diferendo consistía en que al retirar los billetes y brindarle al Gobierno el respaldo metálico que tenía el banco, podía afectar el apoyo a la agricultura y otras actividades empresariales del país.
Conociendo sus socios la necesidad e importancia de ambos sectores, decidieron incrementar el capital, y no retirar de circulación los billetes en exceso, ayudando de esta manera a las dos partes.
Acciones como la narrada son la constante y no la excepción, en la historia del Banco de Costa Rica que continúa su expansión crediticia en el siglo XX, fortaleciendo sus lazos con los sectores productivos del país.
En los años recientes de lenta recuperación económica, el Banco de Costa Rica ha logrado un equilibrio entre negocios y riesgo, para administrar las demandas de crédito y contribuir con la continuidad del ciclo productivo empresarial.
Nuestro renovado compromiso de impulsar el desarrollo y la sostenibilidad de Costa Rica, se traduce en adaptar el negocio a las nuevas demandas del mercado, congruentes con la visión país que queremos, en donde los pequeños y medianos empresarios se convierten en protagonistas, sin dejar de un lado otros sectores y clientes que durante décadas han confiado sus negocios a esta institución.
El interés del BCR de fortalecer las iniciativas productivas provenientes de individuos y grupos no tradicionales responde a que son generadores de empleo e inciden en la calidad de vida de nuestra sociedad que, en la última década, ha sufrido una desmejora.
Para continuar promoviendo el crecimiento económico, la visión del nuevo liderazgo del BCR apunta a un proceso de innovación financiera que facilite el dinamismo de las actividades, el ahorro y el acceso al crédito, con nuevas modalidades de productos, de esquemas de negocios y opciones en servicios electrónicos, todo en beneficio de la ciudadanía.
La historia del Banco de Costa Rica evidencia con hechos y acciones, que esta institución financiera ha tenido y seguirá teniendo un rol relevante en el impulso el desarrollo, con un desempeño eficiente y visión solidaria, digna de celebrar.
Paola Mora
Presidenta
Banco de Costa Rica