Adaptarse a los cambios del mercado laboral
| Jueves 28 agosto, 2014
Ante este mercado de trabajo cambiante, las personas deberán aprender a ser flexibles y adaptables a variados ambientes y requerimientos laborales
Adaptarse a los cambios del mercado laboral
El mercado laboral de hoy es cambiante.
La globalización permitió a las empresas multinacionales mover sus bases de operaciones de un país a otro, según conveniencia, para un mayor rendimiento, como es lógico.
Además, surgió la crisis económica.
En países como el nuestro, apostando fuerte a la inversión extranjera y poco a la producción interna, eran esperables situaciones como las que destaca una nota de este medio ayer: “Desempleo golpea a profesionales calificados”.
Esto porque la mayoría de esos profesionales —y el resto de la población— no fueron preparados para enfrentar con algún éxito el cambiante mercado laboral que tendríamos. No hubo políticas adecuadas en ese sentido.
Hoy los profesionales no siempre logran adaptarse a trabajos que requieren un despliegue de conocimientos y destrezas diferentes a aquellas que adquirieron durante su formación e incluso en posteriores experiencias.
El incentivar ciertas carreras técnicas ahora puede ayudar a conseguir empleo a un sector de la población que opte por ellas. Pero la mayor parte de esa formación es probable que requiera permanente actualización acorde con los avances tecnológicos para no desactualizarse y perder capacidad.
Por otro lado, siempre existe la posibilidad de que el ingreso de multinacionales al país signifique una ampliación del mercado laboral hacia su especialidad, pero también que en algún momento las empresas se vayan del territorio nacional e ingresen otras con diferentes requerimientos.
La falta de empleo estable ha impulsado a muchos a fundar una pequeña empresa. De hecho, siempre ha sido una característica de la economía nacional el que sean las pymes las que más empleo generan.
Sin embargo, hoy son muy pocas las que logran sobrevivir.
Ante este mercado de trabajo cambiante, las personas deberán aprender a ser flexibles y adaptables a variados ambientes y requerimientos laborales.
No obstante, el proceso puede ser lento, porque, como dijimos antes, no se preparó oportunamente a la población para las nuevas condiciones productivas alimentadas por nueva ciencia y tecnología y tampoco para lo que sería la demanda de las multinacionales.
En el marco de los cambios van surgiendo además novedosas carreras, y es esperable que, con el tiempo, estas generen nuevas vocaciones.
Esto sería un importante paso hacia delante si se toma en cuenta que el rendimiento de la fuerza laboral es mayor cuando está dedicada a algo de su preferencia.