Sistema permite mayor precisión contra tumores

Mejora aplicación de quimioterapia

Nueva técnica se utiliza en el Hospital México

El procedimiento es conocido como perfusión aislada, y se realiza en la sala de operaciones por un equipo de médicos oncólogos y cardiovasculares. Con este se logró mejorar la aplicación de quimioterapia para la atención de tumores.

La técnica es compleja y requiere una gran precisión quirúrgica, pues la idea es aislar las arterias y venas para cerrar la circulación colateral mediante un torniquete de alta presión.
Esto con el objeto de que la quimioterapia que se coloca no se traslade a la circulación del cuerpo.
Es decir, la idea es que la sustancia solo circule por el miembro afectado, si el tumor cancerígeno se encuentra en una mano, pues la quimioterapia sería aplicada solo en esa área y no se extenderá por el cuerpo.
Para lograrlo los médicos utilizan una máquina o bomba de circulación extracorpórea, de manera que el medicamento ingresa por la arteria y se devuelve por la vena.
Una vez que la medicina entra a esta máquina, la calienta a una temperatura de entre 39°C y 41ºC, proceso que puede tardar unos 30 minutos, lograr la canalización tanto de la vena como de la arteria es la parte más difícil de este procedimiento.
Los oncólogos en equipo con cirujanos cardiovasculares y de tórax del Hospital México implementan una nueva forma de aplicar la quimioterapia en pacientes con melanoma.
“Esta técnica es utilizada en países desarrollados, y Costa Rica inicia su aplicación en este centro médico”, indicó Denis Landaverde, oncólogo.
En el país solo se aplicó a una mujer que fue diagnosticada con cáncer de piel centrado en su pierna izquierda, la única solución era la amputación; sin embargo con esta aplicación le dieron tratamiento, sin necesidad de retirarle el miembro.
El cáncer de piel es el más diagnosticado en el país y su detección temprana ha permitido disminuir los índices de mortalidad por este tipo en específico.
Este nuevo tratamiento, se aplica por primera vez de forma interdisciplinaria y como una nueva opción para los pacientes con estos tumores.
Este procedimiento evitará llevar al paciente al tratamiento convencional, que es la amputación del miembro afectado con el posterior deterioro en su calidad de vida.
“El tratamiento no es una cura para este tipo de males, no obstante, es un tratamiento paliativo que disminuye el impacto en la calidad de vida”, explicó Édgar Méndez, cirujano de tórax y cardiovascular.

Angie Calvo
acalvo@larepublica.net