A pique toque femenino
Natasha Cambronero redaccion@larepublica.net | Lunes 26 noviembre, 2012
Pocas mujeres forman parte de gabinete de Chinchilla
A pique toque femenino
Al principio del mandato ellas eran el 43%, ahora solo un 22% encabeza los ministerios
FOTOMONTAJE GIDGET MONGE / LA REPÚBLICA
Laura Chinchilla en 2010 quiso hacer historia no solo convirtiéndose en la primera mujer presidenta de Costa Rica, sino también conformando el primer gabinete equiparado en género.Desde un principio la tarea se tornó imposible aunque novedosa. Al final, el 43% de los 21 ministros que arrancaron con ella el mandato era de féminas. Un 7% menos de lo prometido.
Aunado a ello, la participación de las mujeres comenzó a mermar conforme pasaron los meses al frente del país, a tal punto, que en la actualidad solo un 22% del equipo de trabajo de Chinchilla es femenino.
De las seis ministras que se marcharon, solo una fue sustituida por otra mujer. Esa tendencia también se mantuvo cuando quien desertó fue un hombre, en ninguno de los casos, llegó una fémina a sustituirlo.
En la actualidad solo son tres las jerarcas que al igual que Chinchilla llevan dos años y seis meses manejando las tiendas del país y participando semanalmente en el Consejo de Gobierno.
Ese es el caso de Anabel González, de Comercio Exterior; Gloria Abraham, de Agricultura, y Mayi Antillón, de Economía.
A ellas en el camino se les unieron dos más, Daisy Corrales —relevó a María Luisa Avila, en Salud— y Maureen Clark, quien en octubre pasado recibió el título de ministra sin cartera de la Condición de la Mujer, ya que ella dirige también el Inamu.
La primera en dejar el barco fue Guiselle Goyenaga, quien tras una serie de cuestionamientos a su gestión renunció al naciente Ministerio del Deporte.
Tres días después fue Clotilde Fonseca, quien renunció a la cartera de Ciencia y Tecnología tras encontrar obstáculos en su gestión.
Avila fue la tercera, su renuncia se suscitó a mediados de 2011 tras roces con la presidenta Chinchilla.
A principios de 2012 le tocó el turno a Laura Alfaro, quien dejó Planificación para retomar su cargo como catedrática en la Universidad de Harvard.
Recientemente fueron Irene Campos, de Vivienda, y Sandra Piszk, de Trabajo quienes emigraron. Campos lo hizo para ocupar un cargo más alto en una organización internacional; y Piszk para acompañar a su esposo a Roma, Italia, donde fue nombrado cónsul.
Natasha Cambronero
ncambronero@larepublica.net