Alianza de sectores y conocimientos deriva en mayor infraestructura
Alianza de sectores y conocimientos deriva en mayor infraestructura
Lourdes Fernández Q.
En diferentes partes del mundo, a partir de los años noventa, se ha venido incrementando la participación multisectorial como arma para mejorar la infraestructura pública y los servicios públicos en general.
Dicha tendencia ha sido impulsada por las innovaciones tecnológicas, las restricciones presupuestarias, la expansión de mercados internacionales (globalización), crecientes experiencias en PPP (participación público privada), pero sobre todo por la consideración y aplicación de la premisa “la unión hace la fuerza”, a lo que yo agrego: y fomenta el logro de metas de mayor envergadura.
Tal y como hemos venido comentando, las experiencias exitosas y nuevas propuestas desde el sector bancario han promovido un cambio de paradigma puesto que la idea común ha sido siempre que las diferentes instituciones públicas tradicionalmente han procurado sus activos fijos pagando por ellos por adelantado, mientras que mediante figuras como la titularización, se crea un negocio único e independiente, financiado y en algunas ocasiones operado temporalmente por un tercero ajeno a la institución beneficiaria, en donde su repago se da en el mediano o largo plazo.
Nos referimos a un sistema similar al conocido BOT (construir, operar y transferir o COT), con la diferencia de que la propiedad pública o estatal no sale nunca de su dominio. Esta es utilizada únicamente en forma temporal para el levantamiento de la infraestructura y repago del financiamiento, en tanto que la nueva infraestructura queda en manos del Estado y sus instituciones.
El éxito del modelo radica en la participación experta y oportuna de diferentes sectores. Se conjuntará una autoridad en el tipo de infraestructura que se trate, un experto en la forma de financiar dicha construcción, otro en la gestión de proyectos de esa envergadura y otros que en cada caso que requieran.
Así las cosas, el hecho de que los participantes incursionen en áreas que desconocen o bien utilicen el proyecto mismo para aprender de aspectos que no son su core bussines, ha logrado que se materialicen importantes proyectos, en mejor forma y menor tiempo y costo.
Aunque este panorama es positivo, es importante conocer mejor estos mecanismos de gestión y financiamiento, cuya garantía única es el flujo futuro (Project finance).
Lourdes Fernández Q.
En diferentes partes del mundo, a partir de los años noventa, se ha venido incrementando la participación multisectorial como arma para mejorar la infraestructura pública y los servicios públicos en general.
Dicha tendencia ha sido impulsada por las innovaciones tecnológicas, las restricciones presupuestarias, la expansión de mercados internacionales (globalización), crecientes experiencias en PPP (participación público privada), pero sobre todo por la consideración y aplicación de la premisa “la unión hace la fuerza”, a lo que yo agrego: y fomenta el logro de metas de mayor envergadura.
Tal y como hemos venido comentando, las experiencias exitosas y nuevas propuestas desde el sector bancario han promovido un cambio de paradigma puesto que la idea común ha sido siempre que las diferentes instituciones públicas tradicionalmente han procurado sus activos fijos pagando por ellos por adelantado, mientras que mediante figuras como la titularización, se crea un negocio único e independiente, financiado y en algunas ocasiones operado temporalmente por un tercero ajeno a la institución beneficiaria, en donde su repago se da en el mediano o largo plazo.
Nos referimos a un sistema similar al conocido BOT (construir, operar y transferir o COT), con la diferencia de que la propiedad pública o estatal no sale nunca de su dominio. Esta es utilizada únicamente en forma temporal para el levantamiento de la infraestructura y repago del financiamiento, en tanto que la nueva infraestructura queda en manos del Estado y sus instituciones.
El éxito del modelo radica en la participación experta y oportuna de diferentes sectores. Se conjuntará una autoridad en el tipo de infraestructura que se trate, un experto en la forma de financiar dicha construcción, otro en la gestión de proyectos de esa envergadura y otros que en cada caso que requieran.
Así las cosas, el hecho de que los participantes incursionen en áreas que desconocen o bien utilicen el proyecto mismo para aprender de aspectos que no son su core bussines, ha logrado que se materialicen importantes proyectos, en mejor forma y menor tiempo y costo.
Aunque este panorama es positivo, es importante conocer mejor estos mecanismos de gestión y financiamiento, cuya garantía única es el flujo futuro (Project finance).