Alza en intereses e inflación golpea consumo de hogares
Tatiana Gutiérrez Wa-Chong tgutierrez@larepublica.net | Lunes 17 julio, 2017
El consumo de los hogares repuntó levemente durante el primer trimestre del año llegando al 1,9%; sin embargo, los costarricenses son aún precavidos con sus compras y con su endeudamiento.
Hay tres factores que están incidiendo en las decisiones que toman los hogares y son el alza en las tasas de interés, la posibilidad de que se incremente la inflación y las expectativas de devaluación.
Este indicador viene desacelerándose desde el primer trimestre de 2016, cuando el crecimiento interanual fue del 5,5%.
La cifra, que es la segunda más baja reportada desde 2009, preocupa a economistas y también a comerciantes, los cuales confirmaron que sus ventas no aumentaron, pero que los consumidores dan más prioridad a artículos que les permitan cubrir sus necesidades básicas.
El alza en las tasas de interés incide directamente en la intención de endeudarse las personas y este efecto también se nota en el crédito, donde lo destinado al consumo viene en franca desaceleración. De hecho, en febrero de 2016 el crecimiento interanual del indicador fue del 14% mientras que un año después —último dato disponible— fue del 12,8%.
“La gente está siendo más precavida porque las tasas de interés en colones están subiendo; al igual que las expectativas de devaluación, aunque esta última podría variar la tendencia luego de que el Banco Central anunciara una serie de medidas para controlar el dólar”, aseguró Luis Diego Herrera, economista del Grupo Financiero Acobo.
La tasa básica pasiva mantiene una tendencia al alza, ya que el jueves subió un 6%, reportando el sétimo incremento consecutivo desde mayo anterior, cuando rondaba el 4,55%.
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El indicador monetario sube por presiones internas generadas por los cambios en la tasa de política monetaria y externas, como el alza en las tasas anunciada por la Reserva Federal de Estados Unidos que se inició a finales del año anterior.
“Los bancos están siendo más estrictos y midiendo riesgos a la hora de prestar dinero, sobre todo porque las tasas de interés están subiendo y existe un temor de que las personas no puedan pagar sus cuotas si se reduce su capacidad de pago con más inflación”, destacó Gerardo Corrales, economista.
El otro factor que incide en las decisiones de consumo de los hogares, es la inflación, que es mayor a lo que estábamos acostumbrados el pasado año y medio, cuando incluso se reportaron cifras negativas.
“Una mayor inflación se traduce en un deterioro en el ingreso de los hogares, lo que hace que la gente cada día adquiera menos bienes y servicios con los mismos ingresos”, aseguró Melvin Garita, economista independiente.
Y por último, incide el tipo de cambio que durante mayo reportó una subida, pero que las autoridades del Banco Central frenaron al tomar una serie de medidas y al mismo tiempo anunció que intervendría nuevamente, de ser necesario.
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Los costarricenses perciben un ambiente de incertidumbre por una caída en el ingreso real, de acuerdo con el Índice de Confianza del Consumidor que realiza la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica.
“Cerca del 55,7% de los entrevistados considera que las tasas de interés subirán, cifra que el trimestre anterior era del 49,4%, mientras que las personas que piensan que su ingreso familiar será mayor cayó de un 35,7% en el trimestre anterior al 26,5%”, explicó Johnny Madrigal, analista de la Universidad de Costa Rica.
Las intenciones de consumo de esas personas se miden también por las expectativas que tienen de comprar bienes duraderos como una casa o un carro. En ambos casos, las cifras son negativas.
Un 50,7% opinó que son malos tiempos para comprar casa y el 19,7% dijo que sí es el momento. Ahora bien, con respecto a la compra de carro, la situación es similar, un 62,3% sostiene que son malos tiempos y el 10,6% considera que sí es el momento.
La disminución en el consumo de los hogares tiene un efecto directo sobre la economía porque le resta dinamismo a la producción nacional que durante el primer trimestre del año creció apenas un 3,4%, mostrando menos crecimiento que en los trimestres previos.
“Todos los sectores económicos tienden a verse afectados en mayor o menor magnitud: servicios básicos, actividades inmobiliarias, alojamiento, comida y construcción han reflejado tasas de crecimiento negativas o nulas”, aseguró Ricardo Vega, gerente Junior de Análisis Económico de Scotiabank.
Supermercados ven estables sus ventas
La baja en el consumo no provocó menos ventas en las principales cadenas de supermercados del país, los representantes aseguran que se reportó una estabilidad durante el primer trimestre.
Anabelle Durán
Gerente de Mercadeo
Auto Mercado
Nuestra cadena refleja consumos muy estables en el primer trimestre del año, potenciados por las aperturas del último trimestre de 2016 de los locales en Santo Domingo de Heredia y Río Oro de Santa Ana, que nos han generado un mayor tráfico de clientes y consumo a los crecimientos orgánicos del resto de la cadena.
Vemos a nivel general que existe en el país una mayor cautela en el consumo, pero esto aún no se refleja en nuestros puntos de servicio.
Guillermo Alonso
Gerente general
Vindi
No hemos percibido una baja en el consumo en los primeros tres meses del año. La gente sigue comprando productos frescos, especialmente, panadería, frutas y verduras por la frescura y calidad que nos caracteriza. Sí percibimos que el consumidor se mueve con una mayor mesura, pero nosotros ofrecemos cercanía, servicio, horario extendido y un surtido más completo que se adecua a las necesidades de consumo.
Yolanda Fernández
Gerente de Relaciones Corporativas
Walmart
El consumo durante el primer trimestre se mantuvo estable. Sin embargo, sí vemos que hay una diversificación en las compras para cubrir sus necesidades básicas y no comprar artículos innecesarios. La gente se pone más cautelosa cuando se dan subidas en el tipo de cambio como el ocurrido en mayo y ante las especulaciones de que van a subir las tasas de interés.