Apalancamiento financiero
Apalancamiento financiero
Carmen Monge Suñol
Analista Económica INS Valores
El apalancamiento financiero consiste en utilizar endeudamiento para financiar una inversión, lo que genera una relación entre capital propio y crédito invertido en una operación financiera. La deuda implica un costo financiero (intereses), pero si la inversión genera un ingreso mayor a los intereses, el excedente pasa a aumentar el beneficio. Asimismo, al reducir el capital inicial que es necesario aportar, se puede aumentar la rentabilidad obtenida.
Este tipo de endeudamiento generalmente se utiliza para adquirir activos para los cuales se tenga una expectativa de aumento de precio. Si esta ganancia de capital se materializa, el rendimiento obtenido del apalancamiento es máximo. Sin embargo, un incremento del apalancamiento también aumenta el riesgo, pues provoca una mayor exposición en caso de incapacidad de pago del emisor.
Los precios de los activos adquiridos con el endeudamiento podrían sufrir caídas sustanciales que reducirían las ganancias obtenidas o incluso provocarían una pérdida. El apalancamiento generalmente produce altos beneficios cuando las tasas de interés caen. Por otro lado, cuando las condiciones económicas y la política monetaria provocan alzas en tasas de interés y se corta la liquidez, el apalancamiento puede incrementar sustancialmente las pérdidas.
Es importante que los inversionistas no apuesten el 100% en apalancamiento en el manejo de un portafolio, así como que analicen adecuadamente los valores adquiridos con endeudamiento y las condiciones esperadas de tasas de interés. Otro aspecto de relevancia es el riesgo de concentración cuando muchos participantes de un mercado se apalancan con un mismo tipo de activos con una alta relación.
Una parte de los problemas financieros que sacuden a la economía norteamericana en estos días se deriva del exceso del uso del apalancamiento. Bancos, fondos de cobertura, empresas y consumidores recurrieron en las últimas décadas a depender cada vez más del crédito para financiar sus operaciones y generar mayores ganancias. Por ejemplo, las casas de bolsa en Estados Unidos en los años 70 tenían razones de apalancamiento de cuatro a uno y generaban la mayoría de sus ganancias por comisiones bursátiles. La desregulación llevó a una caída drástica en las comisiones generadas, lo que a su vez propició que aumentara el tamaño de sus carteras propias para generar rentabilidad. El proceso de desapalancamiento explica buena parte de las caídas de precio de los activos y de las pérdidas sufridas.
Carmen Monge Suñol
Analista Económica INS Valores
El apalancamiento financiero consiste en utilizar endeudamiento para financiar una inversión, lo que genera una relación entre capital propio y crédito invertido en una operación financiera. La deuda implica un costo financiero (intereses), pero si la inversión genera un ingreso mayor a los intereses, el excedente pasa a aumentar el beneficio. Asimismo, al reducir el capital inicial que es necesario aportar, se puede aumentar la rentabilidad obtenida.
Este tipo de endeudamiento generalmente se utiliza para adquirir activos para los cuales se tenga una expectativa de aumento de precio. Si esta ganancia de capital se materializa, el rendimiento obtenido del apalancamiento es máximo. Sin embargo, un incremento del apalancamiento también aumenta el riesgo, pues provoca una mayor exposición en caso de incapacidad de pago del emisor.
Los precios de los activos adquiridos con el endeudamiento podrían sufrir caídas sustanciales que reducirían las ganancias obtenidas o incluso provocarían una pérdida. El apalancamiento generalmente produce altos beneficios cuando las tasas de interés caen. Por otro lado, cuando las condiciones económicas y la política monetaria provocan alzas en tasas de interés y se corta la liquidez, el apalancamiento puede incrementar sustancialmente las pérdidas.
Es importante que los inversionistas no apuesten el 100% en apalancamiento en el manejo de un portafolio, así como que analicen adecuadamente los valores adquiridos con endeudamiento y las condiciones esperadas de tasas de interés. Otro aspecto de relevancia es el riesgo de concentración cuando muchos participantes de un mercado se apalancan con un mismo tipo de activos con una alta relación.
Una parte de los problemas financieros que sacuden a la economía norteamericana en estos días se deriva del exceso del uso del apalancamiento. Bancos, fondos de cobertura, empresas y consumidores recurrieron en las últimas décadas a depender cada vez más del crédito para financiar sus operaciones y generar mayores ganancias. Por ejemplo, las casas de bolsa en Estados Unidos en los años 70 tenían razones de apalancamiento de cuatro a uno y generaban la mayoría de sus ganancias por comisiones bursátiles. La desregulación llevó a una caída drástica en las comisiones generadas, lo que a su vez propició que aumentara el tamaño de sus carteras propias para generar rentabilidad. El proceso de desapalancamiento explica buena parte de las caídas de precio de los activos y de las pérdidas sufridas.