Bancos sueltan más dinero a vivienda
Oscar Rodriguez orodriguez@larepublica.net | Martes 27 diciembre, 2011
Crecerá crédito más de un 15% en 2012
Bancos sueltan más dinero a vivienda
Bajas tasas de interés seguirán en primer semestre
Los bancos y mutuales aumentarán la colocación de crédito para vivienda en un 15%, durante 2012, comparado con este año.
Las bajas tasas de interés moverán, por lo menos hasta el primer semestre, a la industria.
Actualmente en el país hay 360 mil familias que no tienen casa propia.
Los empréstitos hipotecarios se han encargado de impulsar el crecimiento del crédito en el país, golpeado tras la crisis global.
De cada diez préstamos que se formalizan, tres son para vivienda, muestra el Banco Central.
La expectativa del sector es cerrar el próximo año con un saldo acumulado, de colocación de créditos, de $6.700 millones, frente a los $5.800 millones de este año.
Para fomentar la formalización crediticia, las entidades financieras preparan el lanzamiento de nuevos productos.
Principalmente porque hay una necesidad en el mercado de nuevos planes que se adapten a las condiciones de los clientes.
Algunas entidades han optado por ampliar el plazo de los créditos hasta 30 años o de brindar hasta el 100% del empréstito.
La principal dificultad para la mayoría de las familias es hacer frente a la prima del crédito, que oscila entre un 20% y un 15% del valor del inmueble.
Otros entes financieros preparan nuevos productos precisamente para enfrentar esta dificultad.
El Banco Nacional incorporará un plan de ahorro y crédito para fomentar la dificultad de muchas familias de no contar con el dinero para la prima.
Además, las mutuales serían las primeras en aplicar el denominado bono diferido que es un subsidio para las familias de clase media.
Con este instrumento el cliente recibe una ayuda para pagar parte de la cuota mensual del crédito al banco.
La subvención es progresiva y el monto depende de los ingresos de la familia.
Por ejemplo, para un crédito de $70 mil la cuota mensual a pagar rondaría el primer año los $700, de los cuales una parte la cancela el Estado.
La ampliación de la oferta crediticia haría que también crezcan los proyectos habitacionales.
En el último año, el número de viviendas construidas, alcanzó más de 18 mil.
De estas la mayoría fueron casas, pero la tendencia de construir condominios y apartamentos continúa, ya que representó el 12%.
Incluso en cantones como San José, Escazú, Santa Ana, Curridabat, Tibás y Montes de Oca más del 50% de las nuevas construcciones fue de este tipo.
La expectativa de los empresarios y banqueros es que el auge de esta industria continúe.
Máxime, porque se prevé que las tasas de interés se mantengan bajas, por lo menos durante los primeros seis meses del próximo año.
Actualmente el mercado ofrece intereses entre un 10% y un 15%.
“La competencia ha presionado las tasas de interés activas hacia la baja, especialmente en crédito para vivienda, reduciendo el margen de intermediación”, explicó Maurilio Aguilar, director de Gestión Corporativa del Banco Popular.
Sin embargo, el panorama podría complicarse, durante el segundo semestre de 2012, a raíz del déficit fiscal y la necesidad del Gobierno de captar dinero para financiarse.
“Para el segundo semestre todo parece indicar que podrían aumentar las tasas un poco, pero no es aún claro pues depende de muchas fuerzas económicas internas y externas”, dijo Federico Chavarría, subgerente de Negocios de Banco Promerica.
La necesidad de acceso a la vivienda afecta a 360 mil familias, de las cuales 260 mil son de escasos recursos.
El resto lo constituyen hogares con ingresos mensuales entre $1.400 y más de $4 mil, según el Situación de la Vivienda y Desarrollo Urbano.
“Hay un nicho del mercado sin satisfacer. La necesidad existe. Los desarrolladores deberían empezar a trabajar”, explica Eloísa Ulibarri, directora ejecutiva de la Fundación Promotora de Vivienda.
Usualmente es la banca pública la que se ha enfocado en este mercado.
Pero las entidades privadas comienzan a entrar. El BAC San José lanzó un plan de vivienda para clase media destinado a las empresas que pagan la planilla de sus trabajadores en el banco.
El proyecto piloto comenzó con 25 compañías. El objetivo es atender la necesidad de vivienda de 24 mil trabajadores que por sus ingresos no pueden obtener un bono total de vivienda social y que tampoco han calificado para un préstamo.
El Banco Promerica también anunció nuevas líneas de crédito para vivienda de clase media. La entidad cuenta para ello con $23 millones que recibió del Banco Interamericano de Desarrollo.
“El mercado de vivienda se ha ido dinamizando y hoy se tiene mayor oferta de viviendas a familias de clase media. Sin embargo, aún no es suficiente para cubrir la demanda de viviendas de esos precios”, asegura Irene Campos, ministra de Vivienda.
El buen ritmo del negocio atrajo dos de las principales empresas constructoras afincadas en el país. Cementos de México (Cemex) y Holcim comenzaron este año la construcción de viviendas.
Las compañías son aliadas con el BAC San José para el desarrollo de viviendas para clase media.
Ambas tienen este tipo de trabajos entre sus planes de fomento al desarrollo habitacional de casas con un precio de $30 mil.
Cemex tiene el proyecto La Campiña, en Cartago. Holcim lo hace en La Guácima de Alajuela.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net
Bancos sueltan más dinero a vivienda
Bajas tasas de interés seguirán en primer semestre
Los bancos y mutuales aumentarán la colocación de crédito para vivienda en un 15%, durante 2012, comparado con este año.
Las bajas tasas de interés moverán, por lo menos hasta el primer semestre, a la industria.
Actualmente en el país hay 360 mil familias que no tienen casa propia.
Los empréstitos hipotecarios se han encargado de impulsar el crecimiento del crédito en el país, golpeado tras la crisis global.
De cada diez préstamos que se formalizan, tres son para vivienda, muestra el Banco Central.
La expectativa del sector es cerrar el próximo año con un saldo acumulado, de colocación de créditos, de $6.700 millones, frente a los $5.800 millones de este año.
Para fomentar la formalización crediticia, las entidades financieras preparan el lanzamiento de nuevos productos.
Principalmente porque hay una necesidad en el mercado de nuevos planes que se adapten a las condiciones de los clientes.
Algunas entidades han optado por ampliar el plazo de los créditos hasta 30 años o de brindar hasta el 100% del empréstito.
La principal dificultad para la mayoría de las familias es hacer frente a la prima del crédito, que oscila entre un 20% y un 15% del valor del inmueble.
Otros entes financieros preparan nuevos productos precisamente para enfrentar esta dificultad.
El Banco Nacional incorporará un plan de ahorro y crédito para fomentar la dificultad de muchas familias de no contar con el dinero para la prima.
Además, las mutuales serían las primeras en aplicar el denominado bono diferido que es un subsidio para las familias de clase media.
Con este instrumento el cliente recibe una ayuda para pagar parte de la cuota mensual del crédito al banco.
La subvención es progresiva y el monto depende de los ingresos de la familia.
Por ejemplo, para un crédito de $70 mil la cuota mensual a pagar rondaría el primer año los $700, de los cuales una parte la cancela el Estado.
La ampliación de la oferta crediticia haría que también crezcan los proyectos habitacionales.
En el último año, el número de viviendas construidas, alcanzó más de 18 mil.
De estas la mayoría fueron casas, pero la tendencia de construir condominios y apartamentos continúa, ya que representó el 12%.
Incluso en cantones como San José, Escazú, Santa Ana, Curridabat, Tibás y Montes de Oca más del 50% de las nuevas construcciones fue de este tipo.
La expectativa de los empresarios y banqueros es que el auge de esta industria continúe.
Máxime, porque se prevé que las tasas de interés se mantengan bajas, por lo menos durante los primeros seis meses del próximo año.
Actualmente el mercado ofrece intereses entre un 10% y un 15%.
“La competencia ha presionado las tasas de interés activas hacia la baja, especialmente en crédito para vivienda, reduciendo el margen de intermediación”, explicó Maurilio Aguilar, director de Gestión Corporativa del Banco Popular.
Sin embargo, el panorama podría complicarse, durante el segundo semestre de 2012, a raíz del déficit fiscal y la necesidad del Gobierno de captar dinero para financiarse.
“Para el segundo semestre todo parece indicar que podrían aumentar las tasas un poco, pero no es aún claro pues depende de muchas fuerzas económicas internas y externas”, dijo Federico Chavarría, subgerente de Negocios de Banco Promerica.
La necesidad de acceso a la vivienda afecta a 360 mil familias, de las cuales 260 mil son de escasos recursos.
El resto lo constituyen hogares con ingresos mensuales entre $1.400 y más de $4 mil, según el Situación de la Vivienda y Desarrollo Urbano.
“Hay un nicho del mercado sin satisfacer. La necesidad existe. Los desarrolladores deberían empezar a trabajar”, explica Eloísa Ulibarri, directora ejecutiva de la Fundación Promotora de Vivienda.
Usualmente es la banca pública la que se ha enfocado en este mercado.
Pero las entidades privadas comienzan a entrar. El BAC San José lanzó un plan de vivienda para clase media destinado a las empresas que pagan la planilla de sus trabajadores en el banco.
El proyecto piloto comenzó con 25 compañías. El objetivo es atender la necesidad de vivienda de 24 mil trabajadores que por sus ingresos no pueden obtener un bono total de vivienda social y que tampoco han calificado para un préstamo.
El Banco Promerica también anunció nuevas líneas de crédito para vivienda de clase media. La entidad cuenta para ello con $23 millones que recibió del Banco Interamericano de Desarrollo.
“El mercado de vivienda se ha ido dinamizando y hoy se tiene mayor oferta de viviendas a familias de clase media. Sin embargo, aún no es suficiente para cubrir la demanda de viviendas de esos precios”, asegura Irene Campos, ministra de Vivienda.
El buen ritmo del negocio atrajo dos de las principales empresas constructoras afincadas en el país. Cementos de México (Cemex) y Holcim comenzaron este año la construcción de viviendas.
Las compañías son aliadas con el BAC San José para el desarrollo de viviendas para clase media.
Ambas tienen este tipo de trabajos entre sus planes de fomento al desarrollo habitacional de casas con un precio de $30 mil.
Cemex tiene el proyecto La Campiña, en Cartago. Holcim lo hace en La Guácima de Alajuela.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net