Barcelona se reedifica

Walter Herrera wherrera@larepublica.net | Miércoles 07 junio, 2017

El técnico español tendrá la difícil tarea de restablecer el buen trato del balón al Barca y devolverles el protagonismo a sus jugadores jóvenes. LFP/La República

Una de las peores temporadas llegó a su fin para el Barcelona que tendrá cambios importantes en su edificación. Conquistó la Copa del Rey recientemente, su único título de la temporada y dejó ir lo demás a sus rivales.

Después de la salida de Luis Enrique del banco culé, dará inicio un nuevo proyecto dirigido por Ernesto Valverde.

La pretemporada del Barca comenzará en julio y en un mes ya deberá luchar por un título. En agosto disputará la Supercopa de España contra el campeón de España y Europa, el Real Madrid.

Antes de esto también estará en Estados Unidos para participar en el International Champions Cup donde jugará frente a la Juventus, Manchester United y el Madrid de igual manera.

Así que muy poco tiempo tendrá el técnico para infiltrar su idea de juego. Idea que para muchos es una incógnita.

Famoso por combinar firmeza y mano izquierda, el técnico, de 53 años, llega procedente del Athletic de Bilbao, al que dirigió en los últimos cuatro años.

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Su primera misión será reconstruir un equipo cuyas estrellas como Andrés Iniesta, Gerard Piqué, Luis Suárez o Leo Messi, el gran referente, tienen o se acercan a la treintena.

Recuperar el equilibrio y el dominio del centro del campo será, probablemente, una de las prioridades del nuevo técnico, tras tres años en los que Luis Enrique buscó un Barca más directo procurando surtir de balones a su tridente Neymar-Luis Suárez-Messi.

El Barça fue así menos previsible, pero también fue acusado de abandonar la esencia del juego de toque azulgrana, instituida por Johan Cruyff y llevada al máximo por Josep Guardiola.

Luis Enrique también pareció olvidarse de la cantera azulgrana, privilegiando fichajes que, en general, no dieron el resultado esperado, por lo que Valverde parece el hombre adecuado para volver a mirar hacia la Masía.

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Valverde, que cuenta con el mayor número de partidos al frente del Athletic (306 encuentros en seis temporadas, de 2003 a 2005 y de 2013 a 2017), hizo un gran trabajo en ese sentido en el equipo vasco, que solo contrata jugadores criados o formados en el País Vasco.

Con elementos muy diferentes a los que está acostumbrado a tener, Valverde tendrá que replantear un esquema táctico que se adhiera a la filosofía catalana.

Con los Leones, el timonel se mantuvo utilizando el 4-4-2 y 4-2-3-1. Sería lógico que con su nueva materia prima a disposición, codifique este sistema que fue de su agrado durante tanto tiempo, ahora deberá explorar más allá.

Otra característica de sus equipos es utilizar una presión alta. Si típicamente ya es así en todos sus equipos podemos imaginar que, llegando a un club tan potente como el Barcelona, lo hará todavía con mayor convencimiento.

Hay dos aspectos en la presión que la hacen especial. La primera es que si el rival la supera con un inicio limpio de juego, su consigna es replegar inmediatamente a la mayoría de futbolistas detrás del balón.

La segunda, y quizás más peculiar, es que dirige el “salto” a presión del portero contrincante con mayor rapidez que los demás conjuntos.

En defensa sus equipos normalmente adelantan su última fila casi hasta el medio campo, con lo que reducen espacios y no se aplastan en su propia área.

También habrá que ver si algún jugador como Neymar, por ejemplo, le hace un pedido especial, ya que Valverde nunca utilizó a jugadores a perfil cambiado.