Bloqueos mentales
| Martes 18 agosto, 2015
Bloqueos mentales
Hay un cliché que se utiliza en las películas que involucra una persecución en la que al final del callejón el personaje se encuentra con una pared. Esta es una trama predecible, así como lo es pensar que los callejones y las paredes existen en nuestras mentes y crean barreras a la hora de buscar respuestas.
Barrera 1: “Solo hay una respuesta correcta”
El filósofo francés Chartier dijo: “Nada es más peligroso que una idea, cuando esa idea es la única que tienes”, y, a la vez, Paul Torance predicaba algo similar: “El primer 75% de las ideas sobre cualquier tema son las menos creativas”.
Las personas con desempeño extraordinario siempre buscan la primera, segunda, tercera, cuarta y quinta respuestas correctas.
Barrera 2: “¡Sea práctico! ¡Sea lógico!”
Despójese de la lógica —al menos al principio. Si está pensando en generar nuevas ideas,
hay dos etapas en el proceso: la primera, la etapa de germinación, y luego la de acción o práctica.
El pensamiento libre o simple es el más útil en la primera etapa y el pensamiento estructurado o complejo lo es más en la segunda.
Cuando uno piensa en sueños, metáforas, ambigüedad, juegos, fantasías y corazonadas, se genera un pensamiento libre, innovador. Este pensamiento es necesario en las primeras etapas y lleva a la creatividad y la innovación.
Barrera 3: “Sigue las reglas”
¿Qué viene a su mente cuando piensa en estos tres individuos: Beethoven, Copérnico y Napoleón?
La razón por la cual usted siquiera reconoce cada uno de esos nombres es porque ellos alcanzaron un desempeño extraordinario
de la misma manera: rompiendo las reglas del pensamiento tradicional.
Beethoven rompió las normasde la composición de sinfonías, Copérnico desafió la creencia tradicional de que la Tierra era el centro del universo y Napoleón revolucionó las reglas de la guerra.
Cada uno de ellos escribió nuevos preceptos para alcanzar el mejor desempeño.
Barrera 4: “Errar es malo”
Thomas Watson, fundador de IBM, dijo: “La forma de ser exitoso es duplicar tu número de intentos fallidos”.
El rey de jonrones de su época, Babe Ruth, superó a todos sus contemporáneos no solo en jonrones sino también en ponches
recibidos. Ruth fue ponchado 1.440 veces, número mayor a sus jonrones.
La mayoría de las personas exitosas han fracasado más que el promedio, pero han aprendido de sus errores y han construido su éxito sobre ellos. De hecho, la forma como se sobrepusieron y aprendieron de sus fracasos fue la clave de su éxito.
Beethoven rompió las normas de la composición de sinfonías, Copérnico desafió la creencia tradicional de que la Tierra era el centro del universo y Napoleón revolucionó las reglas de la guerra.
Cada uno de ellos escribió nuevos preceptos para alcanzar el mejor desempeño.
Las personas buscan cada día soluciones más sencillas. A veces, las respuestas son muy simples. ¿Quiere tener más energía y pensamientos creativos? Duerma mejor. ¿Quiere mejorar en su juego de golf? Practique. Las respuestas pueden parecer obvias. ¿Quiere más luz? Encienda el foco. La verdad es que las personas conocen las claves para alcanzar el éxito personal y profesional, pero, tal vez por falta de disciplina, deciden mantenerse en la oscuridad.