Bocadillos saludables engrosan ventas de Mafam
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Viernes 08 febrero, 2008
Primero fueron los productos Cocotico, luego bizcochos y palitos de queso light, ahora se disponen a conquistar el mercado con la línea de Baguette-Litos
Bocadillos saludables engrosan ventas de Mafam
• Empresa busca consolidar presencia en mercados de Centroamérica, Estados Unidos y Puerto Rico
• Alianzas con otras pymes han impulsado crecimiento de la compañía
Eugenia Soto
esoto@larepublica.net
Sacando provecho de la sinergia con otras pequeñas y medianas empresas, y echando mano de la innovación y constancia, Industrias Mafam S.A. ha logrado colocar sus productos en los mercados nacional e internacional.
La necesidad de manejar con más soltura su tiempo ante la llegada de sus hijos, impulsó a Ingrid e Ilse Hoffmaister a fundar la empresa, que actualmente cuenta con 50 empleados y un crecimiento de ventas del 42% durante 2007 en comparación con el año anterior.
Con maquinaria comprada a la familia Pozuelo, las hermanas Hoffmaister comenzaron a maquilar productos de Cocotico; hasta que esta producción fue sustituida por los bizcochos y palitos de queso propios de Mafam.
Los 15 años de operaciones que suma la compañía trajeron consigo la tecnificación de la producción, la profesionalización del equipo gerencial y el mejoramiento de la inocuidad y calidad.
Mafam ha sabido sacarles partido a los programas de capacitación y acompañamiento que el Gobierno brinda a las pequeñas y medianas empresas del sector productivo nacional.
Ilse Hoffmaister aprovechó la capacitación del programa Creando Exportadores, del Ministerio de Comercio Exterior, para iniciar el proceso de ingresar a mercados extranjeros.
“En 2004 asistimos a una feria en Puerto Rico. La empresa Coca Cola Vending Machines se interesó en nuestros productos porque solo manejaba snacks tradicionales y quería añadir una opción saludable a su oferta en escuelas, colegios y universidades”, comentó Hoffmaister.
La empresa eligió Puerto Rico para hacer su debut exportador pues la población latina de la isla les ofrecía gustos similares a los costarricenses, además de un mayor poder adquisitivo.
Poco después ingresó a todos los mercados de la región centroamericana y a Estados Unidos, específicamente a las ciudades de Miami y Nueva York.
La incursión a otros mercados ayudó también al posicionamiento en Costa Rica, pues antes de empezar a exportar sus productos Mafam pasó por un proceso de mejoramiento para poder competir en el exterior con éxito.
“Para nosotros Costa Rica ya es un mercado internacional, porque están representadas marcas diversas, nacionales y extranjeras. En nuestro campo la apertura ya está aquí”, aseguró la presidenta de la empresa.
En Costa Rica, Mafam compite directamente con Bioland y Golden Harvest, que comercializa los productos marca Cosecha Dorada, puesto que estas tres empresas fabrican snacks saludables.
“Sin embargo competimos con todas las marcas, igual que lo hacemos en el exterior”, dijo Harold Ortiz, gerente comercial de Mafam.
Con el objetivo de ganar la batalla en las góndolas de supermercados y los más de 2 mil puntos donde se comercializan sus productos, la empresa busca seguirles la pauta a los gustos y necesidades de sus consumidores.
Bisco Light es la estrella entre el listado de productos de Mafam, que incluye además galletas sin azúcar especiales para diabéticos, bajas en sodio para personas con presión alta, sin grasas trans y enriquecidas con omega 3, entre otros.
“Todos nuestros productos tienen que tener un buen sabor, porque antes se asociaba el concepto de productos saludables con el de insípidos; nutritivos y que satisfagan los gustos de los consumidores locales y globales”, comentó Ortiz.
La más reciente adición a esta lista es la línea de Baguette-Litos, que es el primer resultado que la empresa ha obtenido con la colaboración del Programa de Fortalecimiento Innovación y Desarrollo Tecnológico para Pequeñas y Medianas Empresas.
“Este programa del Ministerio de Ciencia y Tecnología y el Conicit nos permitió desarrollar esta nueva línea de productos en un periodo de tiempo mucho menor y además destinaremos parte de los fondos obtenidos en duplicar la capacidad de producción de nuestra planta”, aseguró Hoffmaister.
Además de aprovechar estos programas; Mafam ha sabido sacarles el jugo a las alianzas formadas con otras empresas pequeñas y medianas.
Específicamente, esta ha sido una estrategia clave en la distribución de los productos. Tras experiencias poco satisfactorias con empresas grandes de distribución, y un amargo intento de contar con su propia flotilla y rutas; Mafam optó por aliarse con otra pyme: Mondaisa.
“Con las empresas grandes tuvimos problemas porque no nos daban la atención que requeríamos. Después intentamos construir nuestra propia red de distribución pero resultó demasiado costoso. Cuando Mondaisa nos propuso la alianza resultó perfecto”, aseguró Ortiz. Además de Mondaisa, Mafam mantiene alianzas con Salsas Alfaro y otras empresas familiares.
Esta misma estrategia le ha servido para exportar a los demás países de Centroamérica, pues cinco de los cuatro distribuidores con que trabajan en el istmo son pymes.
“Nos dan el servicio y la atención al producto que necesitamos. Ser cabeza de ratón y no cola de león nos ha dado resultado,” mantuvo Ortiz.
Entre los planes futuros de esta ambiciosa pyme están obtener la certificación ISO22000 en calidad e inocuidad, desarrollar su programa de capacitaciones para el personal, sistematizar las iniciativas de Responsabilidad Social Empresarial y ampliar la capacidad productiva de su planta.
Bocadillos saludables engrosan ventas de Mafam
• Empresa busca consolidar presencia en mercados de Centroamérica, Estados Unidos y Puerto Rico
• Alianzas con otras pymes han impulsado crecimiento de la compañía
Eugenia Soto
esoto@larepublica.net
Sacando provecho de la sinergia con otras pequeñas y medianas empresas, y echando mano de la innovación y constancia, Industrias Mafam S.A. ha logrado colocar sus productos en los mercados nacional e internacional.
La necesidad de manejar con más soltura su tiempo ante la llegada de sus hijos, impulsó a Ingrid e Ilse Hoffmaister a fundar la empresa, que actualmente cuenta con 50 empleados y un crecimiento de ventas del 42% durante 2007 en comparación con el año anterior.
Con maquinaria comprada a la familia Pozuelo, las hermanas Hoffmaister comenzaron a maquilar productos de Cocotico; hasta que esta producción fue sustituida por los bizcochos y palitos de queso propios de Mafam.
Los 15 años de operaciones que suma la compañía trajeron consigo la tecnificación de la producción, la profesionalización del equipo gerencial y el mejoramiento de la inocuidad y calidad.
Mafam ha sabido sacarles partido a los programas de capacitación y acompañamiento que el Gobierno brinda a las pequeñas y medianas empresas del sector productivo nacional.
Ilse Hoffmaister aprovechó la capacitación del programa Creando Exportadores, del Ministerio de Comercio Exterior, para iniciar el proceso de ingresar a mercados extranjeros.
“En 2004 asistimos a una feria en Puerto Rico. La empresa Coca Cola Vending Machines se interesó en nuestros productos porque solo manejaba snacks tradicionales y quería añadir una opción saludable a su oferta en escuelas, colegios y universidades”, comentó Hoffmaister.
La empresa eligió Puerto Rico para hacer su debut exportador pues la población latina de la isla les ofrecía gustos similares a los costarricenses, además de un mayor poder adquisitivo.
Poco después ingresó a todos los mercados de la región centroamericana y a Estados Unidos, específicamente a las ciudades de Miami y Nueva York.
La incursión a otros mercados ayudó también al posicionamiento en Costa Rica, pues antes de empezar a exportar sus productos Mafam pasó por un proceso de mejoramiento para poder competir en el exterior con éxito.
“Para nosotros Costa Rica ya es un mercado internacional, porque están representadas marcas diversas, nacionales y extranjeras. En nuestro campo la apertura ya está aquí”, aseguró la presidenta de la empresa.
En Costa Rica, Mafam compite directamente con Bioland y Golden Harvest, que comercializa los productos marca Cosecha Dorada, puesto que estas tres empresas fabrican snacks saludables.
“Sin embargo competimos con todas las marcas, igual que lo hacemos en el exterior”, dijo Harold Ortiz, gerente comercial de Mafam.
Con el objetivo de ganar la batalla en las góndolas de supermercados y los más de 2 mil puntos donde se comercializan sus productos, la empresa busca seguirles la pauta a los gustos y necesidades de sus consumidores.
Bisco Light es la estrella entre el listado de productos de Mafam, que incluye además galletas sin azúcar especiales para diabéticos, bajas en sodio para personas con presión alta, sin grasas trans y enriquecidas con omega 3, entre otros.
“Todos nuestros productos tienen que tener un buen sabor, porque antes se asociaba el concepto de productos saludables con el de insípidos; nutritivos y que satisfagan los gustos de los consumidores locales y globales”, comentó Ortiz.
La más reciente adición a esta lista es la línea de Baguette-Litos, que es el primer resultado que la empresa ha obtenido con la colaboración del Programa de Fortalecimiento Innovación y Desarrollo Tecnológico para Pequeñas y Medianas Empresas.
“Este programa del Ministerio de Ciencia y Tecnología y el Conicit nos permitió desarrollar esta nueva línea de productos en un periodo de tiempo mucho menor y además destinaremos parte de los fondos obtenidos en duplicar la capacidad de producción de nuestra planta”, aseguró Hoffmaister.
Además de aprovechar estos programas; Mafam ha sabido sacarles el jugo a las alianzas formadas con otras empresas pequeñas y medianas.
Específicamente, esta ha sido una estrategia clave en la distribución de los productos. Tras experiencias poco satisfactorias con empresas grandes de distribución, y un amargo intento de contar con su propia flotilla y rutas; Mafam optó por aliarse con otra pyme: Mondaisa.
“Con las empresas grandes tuvimos problemas porque no nos daban la atención que requeríamos. Después intentamos construir nuestra propia red de distribución pero resultó demasiado costoso. Cuando Mondaisa nos propuso la alianza resultó perfecto”, aseguró Ortiz. Además de Mondaisa, Mafam mantiene alianzas con Salsas Alfaro y otras empresas familiares.
Esta misma estrategia le ha servido para exportar a los demás países de Centroamérica, pues cinco de los cuatro distribuidores con que trabajan en el istmo son pymes.
“Nos dan el servicio y la atención al producto que necesitamos. Ser cabeza de ratón y no cola de león nos ha dado resultado,” mantuvo Ortiz.
Entre los planes futuros de esta ambiciosa pyme están obtener la certificación ISO22000 en calidad e inocuidad, desarrollar su programa de capacitaciones para el personal, sistematizar las iniciativas de Responsabilidad Social Empresarial y ampliar la capacidad productiva de su planta.