Bola de nieve: Deuda
Oscar Rodriguez orodriguez@larepublica.net | Lunes 26 noviembre, 2012
Superará el 50% de la producción nacional en 2014
Bola de nieve: Deuda
Pagarán contribuyentes excesos estatales
La deuda pública es una bola de nieve que amenaza a la economía del país y que significará, en dos años, más de la mitad de la producción nacional.
Usted, como contribuyente o comprador de bonos del Estado, es quien pagaría el festín de endeudamiento estatal que está desbocado por el gasto público, en especial por salarios de burócratas
Una zocada de faja más rigurosa en contención del gasto estatal y más recaudación ayudarán, pero no serán suficientes.
En los próximos años será necesario discutir de nuevo la creación de nuevos impuestos.
En lo que al endeudamiento estatal se refiere, llegará a un acumulado de más de $22 mil millones en 2014.
Una factura tan alta tendrá consecuencias. La primera es que la calificación país pasaría de un nivel medio a bajo.
La deuda al significar, en ese momento, más del 50% de la producción, llegará al nivel que el Fondo Monetario determinó como riesgoso para el país.
El resultado sería que pedir dinero prestado a los inversionistas extranjeros saldrá más caro, porque se deberá prometer rendimientos mayores a cambio de que adquieran los bonos ticos.
Asimismo, el Gobierno realizaría altas captaciones en el mercado interno para financiar su falta de dinero y competirá, como lo ha hecho este año, por los recursos disponibles para el sector privado, afectando las tasas en colones.
Por otra parte, usted como contribuyente pagará los excesos estatales.
El crecimiento de la planilla estatal es una de las razones del alza exponencial del endeudamiento público.
Los sueldos de los burócratas tuvieron, en los últimos cinco años, ajustes extraordinarios y alzas por encima del costo de la vida, pese a que el Gobierno no tenía dinero. Pedir prestado es la vía usada para pagarles.
Otro disparador del endeudamiento son los créditos internacionales para obras públicas. La ironía es que pese a estar los recursos, los proyectos no llegan.
Entonces usted no recibe la infraestructura nueva a tiempo, pero deberá cancelar el dinero.
La salida al actual problema del endeudamiento público no será fácil y el panorama del país es cada vez más complicado.
No podemos postergar más el tema del crecimiento del endeudamiento. Quien llegue al Gobierno en dos años tendrá que dar una solución sostenible a futuro, dijo Luis Fernando Rodríguez, del Programa Estudios Fiscales.
De hecho, si no se hace nada cuando finalice el próximo periodo presidencial del sucesor de Laura Chinchilla, en 2018, el endeudamiento habrá superado el 60% de la producción.
No hay una única solución, es una combinación de acciones.
La reforma salarial es el primer punto en la lista ya que es el disparador del endeudamiento público.
Presentar una iniciativa de cambios para homologar el régimen de contratación en el Estado, es un avance, pero no resuelve nada.
El proyecto debe discutirse, entre todos los actores involucrados, y aprobarse.
La revisión de los gastos estatales no termina ahí. Hay que evaluar institución por institución. La fusión de entes públicos es otro paso para reducir el gasto administrativo.
El aumento de la recaudación fiscal ayudará. El fisco cuenta con nuevas herramientas para esta labor.
Sin embargo, en los años buenos de cobro de impuestos, la recaudación apenas ha subido en unos $100 millones. Insuficiente si el endeudamiento de un año es de $2,5 mil millones.
Por esta razón, será inevitable volver a la discusión de crear nuevos tributos.
El impuesto al valor agregado, para consumo y servicios, le generaría ingresos extras más rápido del Gobierno.
Además es el que menos opositores tuvo durante la fallida reforma fiscal.
Asimismo será necesario evaluar los gravámenes con destino específico, salvo en educación y justicia porque son constitucionales.
Por último, las exenciones fiscales, que representan casi un 6% de la producción nacional, deberían revisarse, propuso el último informe Estado de la Nación.
Oscar Rodríguez
orodriguez@larepublica.net