Perfil Empresarial:Innovación
Canadiense de 28 años construye el barco eléctrico más grande de Costa Rica
Velero se movería gracias a energía del sol y del viento
Jeffry Garza jeffrygarza.asesor@larepublica.net | Jueves 06 septiembre, 2018
Danielle Doggett, emprendedora canadiense de 28 años, construye en Punta Morales de Chomes, lo que sería el velero más grande jamás hecho en Costa Rica, con el plus de que sería totalmente eléctrico y libre de emisiones.
Este innovador medio de transporte de carga, de 45 metros de largo y 33,5 de alto, se gesta bajo el nombre de CEIBA, el árbol sagrado de los mayas y también común en los potreros de Guanacaste.
La empresa que lo construye es Sailcargo, propiedad de Doggett.
La meta de la emprendedora es crear un medio de transporte carbono positivo potenciado por la energía del sol y del viento, así como financieramente sostenible, con la reducción considerable del consumo de hidrocarburos.
“Estamos muy avanzados, nos falta financiamiento, pero todos los otros cimientos están en su lugar”, explicó Doggett.
El proyecto ha obtenido financiamiento a través de la venta de acciones. En total se necesitan cerca de $3,6 millones para hacerlo realidad.
Prototipo del velero. Cortesía Sailcargo/La República
Sailcargo opera en un astillero de Punta Morales y ha cumplido con el 22% de su meta de financiamiento, tras dos años de arrancar su promoción.
En seis meses esperan tener el 38% de los $3,6 millones necesarios para arrancar con la obra. Por el momento cortan la madera necesaria para construir las bases de la embarcación.
La emprendedora eligió a Costa Rica como sede de su proyecto por la fama del país como líder mundial de energía verde.
Doggett además ha involucrado a la comunidad de Chomes en el proceso de construcción de su barco: peones de la zona han cortado la madera para las bases y mujeres emprendedoras tejen las velas que darán dirección al velero.
Una vez terminada la obra, espera cargar desde Puntarenas mercancía de productores locales hasta Canadá, haciendo un viaje redondo pasando por puertos de Estados Unidos y México. En una segunda etapa incluso podría llegar hasta Alaska.
Estos viajes redondos se harían dos veces por año. Doggett espera cargar su barco con productos característicos de Costa Rica como café, cacao y vainilla.
También aspira utilizar un 3% de las ganancias de la actividad comercial en iniciativas para el medio ambiente.
Ya se corta la madera para sentar las bases del velero. Cortesía Sailcargo/La República
Esta joven capitana tiene 15 años de experiencia en veleros tradicionales y cuenta con habilidades muy específicas en gestión de proyectos para iniciativas de transporte de carga a través de buques de vela. Creció justo al norte de Kingston, Ontario, y desde ahí comenzó su carrera de navegante con el velero St. Lawrence II, a una edad muy corta.
A los 16 años ya era parte de tripulaciones de barcos más grandes como el Swan Fan Makkum y otras embarcaciones de gran envergadura.
Tiempo después fundó su primera compañía, Topsail Rigging, donde se dedicó a diseñar y construir el tramado de las líneas que son necesarias para la maniobra de las velas en este tipo de buques.
En los años previos a Sailcargo, centró su atención en adquirir conocimientos sobre las distintas etapas de la construcción de proyectos a gran escala, lo que la llevó a ser parte del equipo de Sailmaster B.V. en los Países Bajos y a capacitarse para su reto actual.
Proyecto CEIBA
El velero alimentado por electricidad tiene las siguientes especificaciones:
Largo 45 metros
Alto 33,5 metros
Capacidad de carga 250 toneladas métricas (nueve contenedores TEU)
Velas 14
Inversión $3,5 millones
Fuente: Sailcargo
Video cortesía de Sailcargo Inc.