Cáncer podría cobrarse 18,5 millones de vidas en 2045
Factores como el tabaquismo, la contaminación y el envejecimiento elevan el riesgo de padecer la enfermedad, cuyo impacto podría duplicarse en las próximas dos décadas
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Jueves 06 febrero, 2025 08:44 a. m.
Con casi 10 millones de muertes en el 2022, el cáncer se mantiene como la principal causa de fallecimientos a nivel mundial y se estima que los diagnósticos aumentarán en 60% en las próximas dos décadas, lo que podría duplicar el impacto de la enfermedad en la sociedad y los sistemas de salud, de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud.
Los tipos de cáncer con mayor mortalidad son el de pulmón (18.7%), colorrectal (9.3%), hígado (7.8%) y mama (6.8%).
Y es que, a pesar del avance en tratamientos, el diagnóstico tardío sigue siendo uno de los principales factores que elevan la tasa de mortalidad. “Los avances en la detección temprana de la enfermedad, las innovaciones en el tratamiento, la colaboración entre los sectores público y privado y una mayor atención a la equidad sanitaria han mejorado significativamente los resultados de la atención oncológica”, afirmó el Dr. Andrés Rojas, director médico de AstraZeneca para Centroamérica y Caribe.
Factores como el tabaquismo, el consumo de alcohol, una alimentación poco saludable, la contaminación y el envejecimiento son algunos de los principales detonantes de la enfermedad.
De hecho, entre el 30% y el 50% de los casos de cáncer pueden prevenirse con cambios en el estilo de vida y estrategias de salud pública efectivas, así lo indica la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Además, es importante que las personas estén atentas a las señales de alerta que podrían ser indicativo de la presencia la enfermedad, como masas inusuales, dificultad para respirar o tos frecuente, cambio en los hábitos intestinales, pérdida de peso involuntaria, fatiga, aparición de machas o cambios en esta misma, cambios inusuales en las mamas, complicaciones urinarias, pérdida de apetito, sangrados inesperados, dolores persistentes, sudoración excesiva, ardor en el estómago o una herida / úlcera que no sana.
“Es imperativo que como sociedad colaboremos entre organizaciones y regiones con iniciativas de educación y prevención, así mismo como en innovaciones e investigaciones que permitan ofrecer nuevas terapias a los pacientes”, finalizó el Dr. Rojas.