Carlos Alvarado pone en riesgo diálogo con diputados y agenda con el FMI por Ottón Solís

El nombramiento de Ottón Solís como representante de Costa Rica en la OCDE, no solo tiene el potencial de dinamitar los puentes del diálogo entre la oposición en el Congreso y el gobierno de Carlos Alvarado, sino también que pone en peligro la agenda de trabajo en torno al Fondo Monetario Internacional (FMI).

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Liberación, Unidad, Restauración, Nueva República, el PIN y el Partido Republicano -que suman más de 40 votos en el plenario -, ya lo dejaron claro en un comunicado la semana pasada, al manifestar que al mantener el nombramiento “se pone en riesgo el diálogo y los acuerdos para el resto del gobierno”.

Sin embargo, lo cierto del caso es que el verdadero pulso entre los diputados y el mandatario empezaría hoy, al conocerse la aprobación en segundo debate del crédito con el FMI por más de $1.750 millones.

“El gobierno sería el principal responsable de lo que suceda (…) Se requieren 38 votos para su aprobación en segundo debate y este tipo de cosas incitan a la oposición (…) Nueva República sostiene que si el gobierno insiste en esta cabezonada, dinamitará el diálogo y los acuerdos nacionales que son tan necesarios para sacar al país de la crisis en la que el PAC nos tiene sumidos. El Ejecutivo tiene que hablar con el lenguaje de la transparencia y el interés supremo de los costarricenses. Sus lacayos no son lo más importante; Costa Rica sí lo es”, dijo Jonathan Prendas, jefe de Nueva República.

Al cierre de la edición el gobierno de Alvarado mantenía el nombramiento sin importar las advertencias de la oposición y los reclamos de diversas cámaras empresariales, como AmCham, UCCAEP, Fedecámaras y Cámara de Exportadores.

Para los legisladores opositores la designación de Ottón no procede porque él fue un férreo opositor del ingreso de Costa Rica a la OCDE.

En ese sentido, los legisladores temen que él no represente bien al país, minimizando las buenas prácticas y recomendaciones que el organismo pueda emanar para Costa Rica.

La propuesta de empleo público, la validación de la renta global, nuevos impuestos a las casas de lujo y una reforma a la ley aduanal, son algunos de los proyectos que hacen fila en el Congreso.

“Hacer de esta representación un asunto político y no técnico, desecha el esfuerzo que se ha hecho durante estos últimos años para lograr la incorporación de Costa Rica ante la OCDE. Este nombramiento es reflejo de el poco interés que tiene el gobierno PAC de sacar a Costa Rica adelante”, dijo María Inés Solís, diputada de la Unidad.