Logo La República

Lunes, 25 de noviembre de 2024



NACIONALES


Codigo Verde

Sofia Ramirez sramirez@larepublica.net | Viernes 01 octubre, 2010




Codigo Verde

Cineasta ambientalista visitó Costa Rica

El pintor gallego Miguel Anxo Prado, creador de “De Profundis”, un largometraje de dibujos animados, participó esta semana en el primer Festival Criterio Ambiental


¿Cómo surge la idea de crear “De Profundis”?
Los motivos fueron dos, el primero es que luego de muchos años de estar trabajando en animaciones, sentía cierta frustración como autor por hacer siempre trabajos colectivos, porque al final cuando ves el resultado en la pantalla, ves algo de ti, porque son tus dibujos; pero no es propiamente tuyo, y por esto mismo nació mi interés de crear un largometraje. Técnicamente era muy difícil hacerlo solo, pero luego encontré una tecnología que me permitía hacer mis dibujos sobre papel y tela y digitalizarlos con la computadora; justo en este momento hubo un desastre ambiental en Galicia, que fue el hundimiento de un barco petrolero y por ende el derrame de todo este líquido en la costa española. Esto generó un fuerte impacto en mí por los graves daños causados al océano, y surgió la idea de crear una obra no propiamente de denuncia sino de amor al mar.

¿Cómo podría describir “De Profundis?

“De Profundis es una gran metáfora de 75 minutos, un poema visual y musical, es una historia de amor, que se convierte en muchas historias de amor, entre un pintor y una mujer que toca el violonchelo, es también la historia de amor los personajes hacia el mar y también es reflejo de mi propio amor como autor hacia el mar.

¿Qué fue lo más difícil de hacer este largometraje?

Hacerlo, porque escribir la historia no es complicado; ya he escrito muchas obras, pero para hacer toda la animación tuve que elaborar más de 10 mil dibujos, completamente pintados en acrílico a mano por mí; tuve cinco asistentes, pero participaban en las etapas posteriores de montaje. Fueron seis años de trabajo, dos de preparación y cuatro de trabajo continuo, sin descanso, metido totalmente en la producción.

¿Cuál es el mensaje entre líneas que busca transmitir?

Hay varios, uno es que el mar es algo bello y maravilloso, que está con nosotros y en el que depositamos nuestros sueños y pesadillas; la película se dirige a ese mar ambivalente, que es fuente de vida y uno de nuestros referentes culturales más potentes, busca transmitir un mensaje ambiental que logre generar sensibilización en la población, que la población tenga una mentalidad ecológica, pero al mismo tiempo no hay mejor forma de sensibilizarse ante las cosas que amarlas.

¿Qué papel juega la música en esta película?

Es muy importante, porque es una historia sin diálogos, por eso hay música desde el primer cuadro hasta el último, porque a diferencia de otras películas, en “De Profundis” la música y el dibujo nacieron al mismo tiempo, uno al lado del otro, siempre entrelazados, y ha sabido suplir con creces lo que se hubiera dicho con palabras.

¿Cómo cambió a Miguel Anxo Prado, “De Profundis”?

Me cambió muchísimo, porque después de más de 30 años de profesión, nunca me sentí tan seguro de mis capacidades, pensé si fui capaz de hacer esto, y sobreviví a todo ese proceso, soy capaz de cualquier cosa, me ayudó, porque el trabajo de un artista es muy solitario, entonces piensas mucho sobre lo que estás haciendo y necesitas depurar incluso las propias razones de tu trabajo creativo, te das cuenta de lo privilegiado que eres haciendo este trabajo.

Sofía Ramírez
sramirez@larepublica.net

Olympus presentó sus “eco-productos”


La compañía Olympus participó en la IV edición del Encuentro Empresarial de la Industria Gráfica en el país, evento que aprovechó para presentar su línea de “eco-productos”.
La empresa ha establecido su propio estándar de ecoproducto, basándose en cuatro elementos básicos, protección ambiental, conservación de la energía, de los recursos y comunicación, según los criterios de la norma ISO 14021. Todos los artículos están libres de sustancias peligrosas y promueven el reciclaje, además de generar una reducción en el consumo de energía eléctrica mientras están en uso.
Actualmente son 78 los productos que ya han recibido esa calificación, entre ellos su línea de cámaras digitales.
Una de estas es la cámara Stylus Tough, pues en su proceso de fabricación se realizaron acciones tales como la reducción de energía, la reutilización en empaques reciclables, reducción de emisiones de CO2, eficiencia en transporte y conservación de recursos. Las Stylus Tough van desde los ¢110 mil hasta los ¢320 mil.
La marca abrió esta semana la Olympus Store en Multiplaza Escazú, en la cual los clientes podrán no solo conseguir los productos y sus accesorios, sino también validar sus garantías, sin importar el lugar en donde los hayan comprado.

Sofía Ramírez
sramirez@larepublica.net






© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.