Con Sumo
Carmen Juncos cjuncos@larepublica.net | Lunes 10 octubre, 2011
Una agenda muy especial
Entre las cosas que compremos en estos días, cuando ya muchos empiezan a preparar regalitos navideños, hay algo que, en mi opinión, debería formar parte de ese consumo: una agenda de especial significado. Al adquirirla estaremos contribuyendo a asegurar algún alivio y las mejores condiciones posibles a los 800 niños, en fase terminal, que en el país atiende la Unidad de Cuidados Paliativos, para lo cual necesita contar con ¢30 millones mensuales.
Estas agendas, que por solo ¢3 mil puede adquirir, y otras actividades que organiza la fundación que sostiene a la Unidad, se constituyen en soporte económico para ayudar en los momentos más difíciles de la vida de un ser humano y de su familia, cuando su existencia está por acabar.
Algunas escuelas podrían motivar a sus estudiantes para que aprendan de solidaridad desde niños, adquiriendo una de estas agendas. Pienso que las empresas que acostumbran regalarlas a sus colaboradores tienen aquí una doble oportunidad. Pero también, cualquier padre o madre de familia que quiera enseñar a sus hijos a valorar de modo diferente la vida podría hacerlo hablándoles del significado de adquirir una de estas agendas.
Quien quiera sumarse a esta causa, puede llamar al 2222-5169, o comunicarse por el correo paliativ@amnet.co.cr para más información sobre los sitios desde donde se distribuirá la agenda. Una compra solidaria. Un pequeñísimo granito de arena que contribuya a dar forma a las montañas del amor al prójimo.
Carmen Juncos
cjuncos@larepublica.net
Entre las cosas que compremos en estos días, cuando ya muchos empiezan a preparar regalitos navideños, hay algo que, en mi opinión, debería formar parte de ese consumo: una agenda de especial significado. Al adquirirla estaremos contribuyendo a asegurar algún alivio y las mejores condiciones posibles a los 800 niños, en fase terminal, que en el país atiende la Unidad de Cuidados Paliativos, para lo cual necesita contar con ¢30 millones mensuales.
Estas agendas, que por solo ¢3 mil puede adquirir, y otras actividades que organiza la fundación que sostiene a la Unidad, se constituyen en soporte económico para ayudar en los momentos más difíciles de la vida de un ser humano y de su familia, cuando su existencia está por acabar.
Algunas escuelas podrían motivar a sus estudiantes para que aprendan de solidaridad desde niños, adquiriendo una de estas agendas. Pienso que las empresas que acostumbran regalarlas a sus colaboradores tienen aquí una doble oportunidad. Pero también, cualquier padre o madre de familia que quiera enseñar a sus hijos a valorar de modo diferente la vida podría hacerlo hablándoles del significado de adquirir una de estas agendas.
Quien quiera sumarse a esta causa, puede llamar al 2222-5169, o comunicarse por el correo paliativ@amnet.co.cr para más información sobre los sitios desde donde se distribuirá la agenda. Una compra solidaria. Un pequeñísimo granito de arena que contribuya a dar forma a las montañas del amor al prójimo.
Carmen Juncos
cjuncos@larepublica.net