Costa Rica pierde al no usar biocombustibles, advierte principal fabricante de etanol de EE. UU.

Leipzig, Alemania. El consumo mundial de etanol ha crecido de 16 mil millones de galones en 2010 a más de 27 mil millones en 2022 y Centroamérica consume en promedio 244 galones de petróleo y sus derivados por persona, por año.

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El Gobierno de Costa Rica apunta a implementar una mezcla de combustible con un 8% de etanol para 2026, para lo cual buscará convencer a la población de que se trata de un beneficio para el medioambiente y que no causará daños a los vehículos.

LA REPÚBLICA conversó desde Leipzig, Alemania, con Joshua Shields, vicepresidente de relaciones gubernamentales y comunicaciones de Poet, el mayor fabricante de etanol de Estados Unidos.

Poet Biorefining tiene una capacidad de producción de etanol mayor a 2.700 millones de galones por año.

En el marco del Foro Internacional de Transporte, Shields asegura que esta tecnología tiene un sinfín de beneficios inmediatos para el ambiente.

“La tecnología existe, está comprobada. Creo que en términos de costos tecnológicos está disponible para cualquier país, definitivamente está disponible para Costa Rica. En términos de producción, nuestras instalaciones recolectan maíz en un radio de 30 millas desde la planta de producción, áreas verdes intensivas, agricultores dispuestos a conducir 30 millas para entregar el producto. Fomentar el uso de etanol es realmente importante, muchos países tienen el estándar E10 y si se aumenta a E15 se impulsará la producción de bioetanol junto con lo necesario en la agricultura”, dijo Shields.

Además, explica que esta mezcla no requiere de cambios en infraestructura ni tecnología, y que tampoco supondrá un costo adicional al usuario, incluso el precio de algunos combustibles podría bajar.

El sector del transporte representa el 41,5 % de los gases de efecto invernadero que se generan en Costa Rica, según el Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero, elaborado en 2022 por el Instituto Meteorológico Nacional (IMN).

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“El bioetanol tiene un papel fundamental aquí y ahora. Aumentar la adopción del etanol ayuda a alcanzar la neutralidad de carbono para 2050 o incluso antes, así como los objetivos del Acuerdo de París. Está disponible en el sector del transporte, es rentable y se puede implementar de inmediato. Además, es compatible con la infraestructura existente y la gente ha comenzado a utilizarlo desde 2005, lo que ha permitido reducir la huella de carbono en millones de toneladas de CO2 mediante la adición de una mezcla de etanol del 10%. Su efectividad está comprobada y llegó para quedarse. Es beneficioso para la economía agrícola y ha demostrado resultados”, agregó Mackenzie Boubin, directora global del desarrollo de etanol de U.S. Grains Council.