Desde los ebais buscarán fumadores para instarlos a dejar el vicio

Si la próxima vez que acuda a un ebais le preguntan si fuma, no se extrañe.

Un lineamiento de la Gerencia Médica de la Caja pide a los profesionales en medicina, enfermería, odontología y auxiliares de enfermería del primer nivel de atención que pregunten en cada consulta si las personas fuman y, si lo hacen, hablen con ellos para favorecer la vida saludable sin tabaquismo.

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Las investigaciones internacionales han demostrado la importancia de que el personal de salud señale el daño al bienestar producido por el tabaquismo y ofrezcan acompañamiento adecuado a la población decidida a dejar de fumar para concretar su deseo.

El consejo del personal sanitario es tan importante que los estudios sugieren que la intervención breve es suficiente estímulo en buena parte de la población para dejar de fumar, pues solo necesita el refuerzo de una idea previamente asimilada.

Se trata de una charla de tres a cinco minutos donde se afianza el mensaje de salud.

El abordaje comienza con preguntas básicas como: ¿fuma?, ¿desde cuándo?, ¿cuántos cigarrillos consume por día?

Esta información se anota en el expediente de salud, incluyendo la fase en la actitud de cambio del paciente.

“Si la persona reconoce en él enfermedades susceptibles a empeorar con el fumado, y que ha pensado en dejarlo pronto, está en la etapa ideal para dar el paso del cese. Ese es momento oportuno para brindarle acompañamiento para dejarlo, pues él parte de una idea aceptada y así tiene más oportunidad de éxito”, dijo Wing Ching Chan Cheng, especialistas en Neumología.

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Esto puede animar al usuario a establecer un día “D” (llamado así por la acción de dejarlo) y luego darle apoyo, como ofrecerle material de autoayuda o recomendarle sitios en Internet de ayuda para dejar de fumar o líneas especiales de seguimiento en instituciones u organizaciones con operación en el país.

En casos de dependencias más acentuadas es necesario ampliar esa intervención con otros abordajes, como la participación en la “clínica de cesación de tabaco”, una metodología grupal de ocho sesiones, de una vez por semana, donde se aprende de manera muy integral el efecto negativo del tabaquismo y la manera de salir de él.