Diseño, cultura urbana y buena mesa
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Viernes 07 mayo, 2010
Diseño, cultura urbana y buena mesa
Esos son algunos de los ingredientes que rodean a Kalú Café and Food Shop
Después de un periplo que la llevó hasta Santa Ana, Camille Ratton regresa con la bandera de Kalú al barrio que la vio nacer como chef.
Estos viajes en la maleta de una chef son siempre signo de madurez, y es que el tiquete lo ha valido en todos los sentidos, pues somos los clientes quienes al final nos beneficiamos de los resultados como lo es en este caso. Iniciemos por decir que si un restaurante no es solo comida sino una experiencia, el nuevo modelo de Kalú tiene que mucho que ofrecer, pues está enclavado en un proyecto simbiótico entre las artes que reúne cinco proyectos donde se combinan el arte contemporáneo con el diseño sostenible, la cultura urbana y la buena mesa, el cual se denomina 7/11 por estar en el cruce de las calles 7 y 11 del antiguo barrio Amón .
Kalú, el centro de nuestra nota, ofrece un espacio que se integra maravillosamente en la cotidianeidad de la urbe, ofreciendo inclusive una terraza casi independiente pero conectada con una vista de San José que no estamos acostumbrados a ver los que no crecimos en casas que superan la altura de los techos del conocido barrio, este nivel favorece las vistas de los atardeceres y las brisas y follaje del río que atraviesa San José.
Para llegar a la terraza se ha de cruzar por los caminos del arte plástico y contemporáneo, tienda, sala de exhibición de muebles creativos, bisutería y joyas, ropa de diseñadores locales y demás, incluyendo un rincón con mermeladas de autor y desde luego una cocina de la que salen las creaciones de Camille con una fuerza renovada, más segura y tranquila a medias, pues el cambio de local ha triplicado la actividad, lo que confirma su buena cuchara, la cual no describo para que la vayan a descubrir. Adelanto diciendo que se aumentó el menú, se incrementaron las ensaladas, platos sanos confeccionados artesanalmente y como ella misma se describe “comida de autor”, mezclas, procesos, sabores, ingredientes y creaciones meticulosas.
Esos son algunos de los ingredientes que rodean a Kalú Café and Food Shop
Después de un periplo que la llevó hasta Santa Ana, Camille Ratton regresa con la bandera de Kalú al barrio que la vio nacer como chef.
Estos viajes en la maleta de una chef son siempre signo de madurez, y es que el tiquete lo ha valido en todos los sentidos, pues somos los clientes quienes al final nos beneficiamos de los resultados como lo es en este caso. Iniciemos por decir que si un restaurante no es solo comida sino una experiencia, el nuevo modelo de Kalú tiene que mucho que ofrecer, pues está enclavado en un proyecto simbiótico entre las artes que reúne cinco proyectos donde se combinan el arte contemporáneo con el diseño sostenible, la cultura urbana y la buena mesa, el cual se denomina 7/11 por estar en el cruce de las calles 7 y 11 del antiguo barrio Amón .
Kalú, el centro de nuestra nota, ofrece un espacio que se integra maravillosamente en la cotidianeidad de la urbe, ofreciendo inclusive una terraza casi independiente pero conectada con una vista de San José que no estamos acostumbrados a ver los que no crecimos en casas que superan la altura de los techos del conocido barrio, este nivel favorece las vistas de los atardeceres y las brisas y follaje del río que atraviesa San José.
Para llegar a la terraza se ha de cruzar por los caminos del arte plástico y contemporáneo, tienda, sala de exhibición de muebles creativos, bisutería y joyas, ropa de diseñadores locales y demás, incluyendo un rincón con mermeladas de autor y desde luego una cocina de la que salen las creaciones de Camille con una fuerza renovada, más segura y tranquila a medias, pues el cambio de local ha triplicado la actividad, lo que confirma su buena cuchara, la cual no describo para que la vayan a descubrir. Adelanto diciendo que se aumentó el menú, se incrementaron las ensaladas, platos sanos confeccionados artesanalmente y como ella misma se describe “comida de autor”, mezclas, procesos, sabores, ingredientes y creaciones meticulosas.