Edgar Marín, pudo jugar en cualquier equipo del mundo

¡Falleció Edgar Marín!

Gracias a la visión de don Guillermo Constenla, como presidente ocho años del Instituto Nacional de Seguros, organizamos un programa de charlas para los estudiantes de secundaria, de colegios de bajos recursos económicos.

El INS les regalaba mi libro testimonial “Para Nunca Olvidar”, personalmente les ofrecía mi testimonio de vida que me lanzó al infierno del alcoholismo y funcionarios del INS promovían los seguros estudiantiles.

Dios nos escogió como instrumentos para salvar muchas vidas. Lamentablemente, llegaron al INS nuevos funcionarios y una decisión del nuevo presidente ejecutivo, archivar el proyecto de don Guillermo.

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Por esta relación a menudo visitaba las oficinas del INS y era un placer encontrarnos en el “lobby” del edificio a Marco Antonio Rojas, Heriberto Rojas, Francisco “Chico” Hernández y Edgar Marín en amena conversación. Las cuatro estrellas del Deportivo Saprissa, eran también agentes de seguros del INS.

Entraba en la conversación y lógicamente nos remontábamos al ambiente deportivo, porque tuve la suerte de escribir decenas de crónicas y la columna “Así los Vimos” del Saprissa hexacampeón nacional, donde detallábamos las proezas en la cancha de estos cuatro campeones.

Aparte de futbolistas extraordinarios, los cuatro eran hombres cultos, inteligentes y de agradable conversación. “Chico” se nos fue muy temprano y ahora nos deja también “Guita” Marín, luto gigante no solo para el Deportivo Saprissa, sino para el fútbol nacional.

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La prensa deportiva joven, que por edad no pudo ver jugar a Edgar Marín, nos detalla sus impresionantes estadísticas: títulos, goles, historial en clubes y selecciones nacionales.

Tuvimos la dicha de verlo jugar, incluso en divisiones menores, cuando más de 400 chiquillos, uniformados de morado inundaban las canchas de La Sabana, orientados por don Ricardo Saprissa y Beto Fernández para que los escogieran a jugar con los “mosquitos”.

Desde ese momento vimos jugar a Edgar, al lado de otro “mocoso”, el “Chico” Hernández, ascendidos por don Alfredo Piedra al inicio de la década de 1960 a la primera división, para formar: “Guita” y “Chico”, el ala derecha más espectacular del fútbol costarricense de todos los tiempos.

Serán entonces los ángeles, los espectadores más cercanos que disfrutarán de las jugadas de pared de este par de fenómenos del fútbol costarricense.

¡Edgar Marín, descansa en paz!

gpandolfo@larepublica.net