Edificio que compraría el Congreso no dará abasto
Vanessa Chaves redaccion@larepublica.net | Jueves 19 agosto, 2010
Unos 500 funcionarios deberán ser distribuidos en dos inmuebles adicionales
Edificio que compraría el Congreso no dará abasto
Para 2014 se tiene previsto construir un nuevo edificio en Zapote, junto al que se va a comprar
El nuevo edificio que pretenden adquirir las autoridades de la Asamblea Legislativa, por poco más de $25 millones, no dará abasto para alojar a todos los empleados de esa entidad.
Al menos 500 personas se quedarán por fuera, lo que obligará a emplear por lo menos dos inmuebles adicionales para albergarlos.
Una parte de los colaboradores legislativos no se moverá de Cuesta de Moras, pues se tiene pensado dejarlos trabajando en el viejo edificio central, donde actualmente se encuentra el Plenario. Este es una de los pocos edificios del Congreso que no presentan problemas estructurales.
La otra parte se trasladaría a la vieja sede de la Universidad Autónoma de Centro América, ubicada 200 metros al este de la Casa Italia.
En este sentido, los únicos funcionarios que se trasladarán a Zapote en abril próximo, son los de aquellos departamentos que tengan relación directa con las funciones que realizan los diputados.
Es decir, que la dirección ejecutiva, archivo, iniciativa popular, prensa y protocolo, los despachos de los legisladores, asesores, comisiones legislativas, jefaturas de fracción y servicios parlamentarios, estrenarán el inmueble.
Los departamentos administrativos, entre ellos recursos humanos, financiero y contabilidad se quedarán en la antigua sede.
De igual forma, el auditorio de la Asamblea se quedaría, en el mismo lugar, donde hoy se ubican las curules, pues la nueva edificación solo tiene espacio para crear uno para 200 personas y lo que se quiere es que sea para 500.
Esta situación no tiene arreglo, ya que el inmueble que se tiene contemplado comprar es el único que cumple con los requisitos para sustituir en un corto plazo el Edificio Sion y la Casa Rosada, que sirven de oficinas para varios diputados, así como el Castillo Azul, sede de la Presidencia del Congreso, y los archivos del edificio principal, como lo ordenó el Ministerio de Salud, expuso Antonio Ayales, director ejecutivo de la Asamblea.
No obstante, espera que en 2014 arranque la construcción de una segunda torre, a un costado de la nueva sede en Zapote, adonde se trasladaría temporalmente a los funcionarios administrativos, pues se espera que en un periodo no muy largo la ubicación permanente de la Asamblea sea en Cuesta de Moras, tras la construcción de nuevas edificaciones.
“Cuando el cambio de sede se realice y los departamentos administrativos estén en otros inmuebles vamos a tener que cambiar la cultura de los funcionarios para que estos dejen de utilizar tanto el papel e implementen más el uso del correo electrónico y otras herramientas tecnológicas. Todo con la finalidad de no tener problemas de logística ni ningún otro contratiempo”, manifestó Ayales.
La edificación que albergaría al Congreso está a un 70% de avance en obra gris y tiene espacio para unas 500 personas. Actualmente laboran más de 1.000 funcionarios en el Primer Poder de la República.
Una de las salidas a corto plazo para alojar a más personas en el edificio que se comprará es “construir un nivel adicional, ya que los técnicos afirman que estructuralmente el edificio soporta hasta dos pisos más”, señala un informe de la Comisión Construcción sede Asamblea Legislativa, que LA REPUBLICA tiene en su poder.
Si bien se ha establecido ya el valor del nuevo inmueble, aún es incierto con cuál entidad financiera se realizará la compra o si se hará mediante un arrendamiento.
“Aún no definimos si vamos a comprar el inmueble o si este será alquilado, ni tampoco si las negociaciones se harán con el Banco de Costa Rica o el Banco Centroamericano de Integración Económica, eso falta definirlo”, dijo Luis Gerardo Villanueva, presidente del Congreso.
El pasado 15 de junio, María Luisa Avila, ministra de Salud, envío al Congreso una orden de desalojo para 40 oficinas legislativas, por problemas estructurales que atentan contra la vida de los funcionarios que actualmente ocupan el Castillo Azul, el Sión y la Casa Rosada, entre otros.
La medida de Avila fue cuestionada por los diputados, quienes consideran que se extralimitó en sus funciones. Por ello hoy los legisladores votarán una moción de censura, con la que pretenden manifestar su disconformidad con el actuar de la Ministra.
Natasha Cambronero
ncambronero@larepublica.net
Edificio que compraría el Congreso no dará abasto
Para 2014 se tiene previsto construir un nuevo edificio en Zapote, junto al que se va a comprar
Al menos 500 personas se quedarán por fuera, lo que obligará a emplear por lo menos dos inmuebles adicionales para albergarlos.
Una parte de los colaboradores legislativos no se moverá de Cuesta de Moras, pues se tiene pensado dejarlos trabajando en el viejo edificio central, donde actualmente se encuentra el Plenario. Este es una de los pocos edificios del Congreso que no presentan problemas estructurales.
La otra parte se trasladaría a la vieja sede de la Universidad Autónoma de Centro América, ubicada 200 metros al este de la Casa Italia.
En este sentido, los únicos funcionarios que se trasladarán a Zapote en abril próximo, son los de aquellos departamentos que tengan relación directa con las funciones que realizan los diputados.
Es decir, que la dirección ejecutiva, archivo, iniciativa popular, prensa y protocolo, los despachos de los legisladores, asesores, comisiones legislativas, jefaturas de fracción y servicios parlamentarios, estrenarán el inmueble.
Los departamentos administrativos, entre ellos recursos humanos, financiero y contabilidad se quedarán en la antigua sede.
De igual forma, el auditorio de la Asamblea se quedaría, en el mismo lugar, donde hoy se ubican las curules, pues la nueva edificación solo tiene espacio para crear uno para 200 personas y lo que se quiere es que sea para 500.
Esta situación no tiene arreglo, ya que el inmueble que se tiene contemplado comprar es el único que cumple con los requisitos para sustituir en un corto plazo el Edificio Sion y la Casa Rosada, que sirven de oficinas para varios diputados, así como el Castillo Azul, sede de la Presidencia del Congreso, y los archivos del edificio principal, como lo ordenó el Ministerio de Salud, expuso Antonio Ayales, director ejecutivo de la Asamblea.
No obstante, espera que en 2014 arranque la construcción de una segunda torre, a un costado de la nueva sede en Zapote, adonde se trasladaría temporalmente a los funcionarios administrativos, pues se espera que en un periodo no muy largo la ubicación permanente de la Asamblea sea en Cuesta de Moras, tras la construcción de nuevas edificaciones.
“Cuando el cambio de sede se realice y los departamentos administrativos estén en otros inmuebles vamos a tener que cambiar la cultura de los funcionarios para que estos dejen de utilizar tanto el papel e implementen más el uso del correo electrónico y otras herramientas tecnológicas. Todo con la finalidad de no tener problemas de logística ni ningún otro contratiempo”, manifestó Ayales.
La edificación que albergaría al Congreso está a un 70% de avance en obra gris y tiene espacio para unas 500 personas. Actualmente laboran más de 1.000 funcionarios en el Primer Poder de la República.
Una de las salidas a corto plazo para alojar a más personas en el edificio que se comprará es “construir un nivel adicional, ya que los técnicos afirman que estructuralmente el edificio soporta hasta dos pisos más”, señala un informe de la Comisión Construcción sede Asamblea Legislativa, que LA REPUBLICA tiene en su poder.
Si bien se ha establecido ya el valor del nuevo inmueble, aún es incierto con cuál entidad financiera se realizará la compra o si se hará mediante un arrendamiento.
“Aún no definimos si vamos a comprar el inmueble o si este será alquilado, ni tampoco si las negociaciones se harán con el Banco de Costa Rica o el Banco Centroamericano de Integración Económica, eso falta definirlo”, dijo Luis Gerardo Villanueva, presidente del Congreso.
El pasado 15 de junio, María Luisa Avila, ministra de Salud, envío al Congreso una orden de desalojo para 40 oficinas legislativas, por problemas estructurales que atentan contra la vida de los funcionarios que actualmente ocupan el Castillo Azul, el Sión y la Casa Rosada, entre otros.
La medida de Avila fue cuestionada por los diputados, quienes consideran que se extralimitó en sus funciones. Por ello hoy los legisladores votarán una moción de censura, con la que pretenden manifestar su disconformidad con el actuar de la Ministra.
Natasha Cambronero
ncambronero@larepublica.net