El 4-5-1 no le funcionó a la Liga en Guadalupe
Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Jueves 25 julio, 2019
Cuando comentamos de las posibilidades del Alajuelense de ser campeón del Apertura, hicimos referencia a que en zona de ataque, el técnico Andrés Carevic tenía dos alternativas.
Jugar al 4-5-1, que en la pretemporada fue su planteamiento favorito, esquema que da prioridad en el ataque al ariete Jonathan Moya y “condena” a la reserva al tridente de Jonathan McDonald, Róger Rojas y Marco Ureña, todo un lujo para cualquier equipo centroamericano.
Lea más: Alajuelense y el síndrome de la caja fuerte
Un sistema táctico mucho más arriesgado en ofensiva, puede ser un 4-3-3, alineando a esta tripleta de una sola vez en el ataque y sacrificando piezas de la cintura, o jugar un 4-4-2 con Ureña en la medular y el binomio McDonald y Rojas en ofensiva.
Pareciera, o la lógica lo indica, que la Liga se presenta como un equipo más peligroso y agresivo en ataque cuando juegan hombres de mayor movilidad y más técnicos que Moya, un atacante de peso, potente físicamente, peligroso arriba, pero limitado técnicamente.
Contra Guadalupe, Carevic apostó por Moya, quien fue su delantero de confianza en la pretemporada, aparte que una cancha como la guadalupana, quizá se prestaba para jugar con un solo hombre en punta.
Superado tácticamente por Guadalupe, el León no presentó el menor peligro en ofensiva, y su único gol cayó gracias al genial y sorpresivo filtro largo de Henry Figueroa a Ariel Lássiter.
Esta escasa gestión ofensiva de la Liga no es responsabilidad de Moya; simplemente los cinco volantes no tuvieron capacidad de generar fútbol, y a Jonathan no le llegó nada.
Lea más: Junior Díaz no fue muy bien recibido por la feligresía del Alajuelense
Ahora, consideramos que el técnico Carevic se equivoca cuando trata de enderezar el rumbo de la barca perdida, metiendo en la cancha, con diez minutos de diferencia, a McDonald, Ureña y Rojas.
Lo hizo ante Guadalupe y en un juego de la Copa Premier, variantes tardías que más bien llevan confusión al ataque rojinegro.
Los jugadores entran presionados, enredados, no saben dónde ubicarse, e incluso “chocan” entre ellos.
Don Andrés debe buscar la fórmula para que McDonald, Rojas y Ureña sean titulares, ubicándolos estratégicamente en zonas donde puedan moverse con comodidad, buscando acciones colectivas y no cada uno corriendo por su lado sin una planificación previa.
Veremos hoy ante Limón qué equipo parará en la cancha este “desordenado” Alajuelense.
gpandolfo@larepublica.net
NOTAS ANTERIORES
Los Guardianes con el mánager del año
Viernes 22 noviembre, 2024
Stephen Vogt y su debut excepcional como piloto
Alajuelense puso un pie en la final por el título
Jueves 21 noviembre, 2024
El León alcanzó 43 puntos y ocupa solo una unidad más para asegurarse el primer lugar de la etapa de clasificación
El VAR, actor principal del empate que Costa Rica logró en Panamá
Miércoles 20 noviembre, 2024
Alejandro Bran y su golazo, figura de la Tricolor
La Catedral: escenario de un clásico crucial
Martes 19 noviembre, 2024
Alajuelense fue el primer equipo clasificado a las semifinales del Apertura, le restan tres partidos de la temporada regular y ocupa cuatro puntos para apoderar