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Sábado, 23 de noviembre de 2024



COLUMNISTAS


El futuro político de Francia

Óscar Álvarez Araya oalvarezcocr@gmail.com | Jueves 04 julio, 2024


Independientemente del resultado electoral del próximo domingo esperemos que Francia continúe siendo pacífica, democrática y republicana.

Por primera vez en la historia de la Quinta República francesa, el pasado 30 de junio la derecha dura atrincherada en la Agrupación Nacional de Marine Le Pen se alzó con la victoria en la primera vuelta de las elecciones legislativas obteniendo aproximadamente un 33.15 % de los votos.

Sin embargo, la formación ganadora de la jornada deberá esperar hasta el próximo domingo 07 de julio para determinar si en la segunda vuelta obtiene la mayoría absoluta necesaria para que su presidente Jordan Bardella pueda acceder al gobierno como primer ministro de Francia.

En una primera vuelta caracterizada por una participación electoral de 66,71 %, es decir un 20% más elevada que en las anteriores elecciones, la opción Juntos del centrista Emmanuel Macron fue relegada a un distante tercer lugar con aproximadamente un 20.04 % de los votos mientras que las formaciones de izquierdas agrupadas en el Nuevo Frente Popular lograron apropiarse del segundo lugar de la jornada con aproximadamente un 27.99 % de la votación. Por su parte el partido Republicanos, de centro derecha, se quedó con aproximadamente un 10% de la votación.

De manera que la Agrupación Nacional ha vencido de manera inobjetable en la primera vuelta pero tiene el reto de ganar la mayoría absoluta del parlamento el próximo domingo.

Tanto el presidente Emmanuel Macron como el izquierdista Jean-Luc Melenchon han anunciado que harán lo posible para establecer un cordón sanitario que evite la victoria de la derecha radical. Macron ha llamado a formar una alianza democrática y republicana contra el partido de Le Pen y por su lado Melenchon ha pedido a sus partidarios que llegaron en tercer lugar que se retiren y apoyen candidatos centristas en la segunda vuelta.

La mayoría absoluta de la asamblea se logra con 289 escaños de un total de 577.

Para el próximo domingo se vislumbran tres escenarios posibles:

1. Victoria de Agrupación Nacional obteniendo la mayoría absoluta del parlamento y logrando la subida de su presidente Jordan Bardella como primer ministro de Francia.

2. Victoria del Nuevo Frente Popular obteniendo la mayoría absoluta y eligiendo en el seno de sus diputados al futuro primer ministro de Francia. Este podría ser un socialdemócrata del Partido Socialista o un radical como Melenchon.

3. Ninguna fuerza obtiene la mayoría absoluta y entonces se abriría un período de diálogos y negociaciones para formar un gobierno de conciliación nacional.

En los tres casos el próximo domingo se abriría una etapa de cohabitación entre el Presidente de la República Macron y un primer ministro que podrá ser de la Agrupación Nacional, del Nuevo Frente Popular o una figura de negociación.

En Francia ya existen varios antecedentes históricos de cohabitaciones entre el socialista Francois Mitterand y el conservador Jacques Chirac (1986-1988), así como Chirac y Lionel Jospin 1997-2002), entre otros. Es decir cohabitaciones entre presidente y primer ministro de diferente color político.

En cualquiera de los tres escenarios arriba mencionados el presidente Macron quedará muy debilitado y dependiendo de su habilidad para negociar y apenas poder sobrevivir con un primer ministro y un gobierno sea de Agrupación Nacional, del Nuevo Frente Popular o de negociación. Macron concluye su mandato hasta mayo del año 2027. No faltan quienes incluso mencionan la posibilidad de su renuncia antes de que concluya su mandato constitucional.

La opción que genera más expectativas:

La opción de que pueda ganar el domingo la derecha radical es la que genera más expectativas y nerviosismo en las bolsas y en los mercados. En ese caso aumentan los riesgos de actos terroristas, polarización y violencia en las calles y ataques a los establecimientos comerciales.

En tal escenario el primer ministro sería el joven líder de 28 años de edad Jordan Bardella, quien nació en Drancy, Isla de Francia, de familia italiana, el 13 de setiembre de 1995. Realizó estudios de Geografía en la Sorbona pero se retiró para dedicarse plenamente a la vida política. Se desempeña como presidente de su partido desde setiembre de 2019. Es diputado en el Parlamento europeo. Se muestra bastante accesible y se lleva bien con los medios de comunicación. Según analistas es un poco camaleónico, es decir que varía su discurso de acuerdo al público que tiene al frente. Ya ha dicho que de convertirse en el primer ministro de la nueva cohabitación respetaría a la constitución y al presidente pero que llevaría adelante una política intransigente con sus principios. Detrás del joven Bardella está como lideresa máxima del partido la señora Marine Le Pen, quien además es más explicita y radical en sus declaraciones sobre temas controversiales.

Entre los temas de un posible gobierno de Bardella se pueden mencionar:

Según sus adversarios, en cuanto a la guerra entre Rusia y Ucrania Bardella sería pro ruso, pero según sus propias declaraciones apoyaría más bien a Ucrania aunque sin enviar tropas francesas al frente de batalla. En ese punto se asemeja a la posición de Giorgia Meloni, primera ministra en Italia.

En cuanto al conflicto Israel-Hamas, desde los ataques del 07 de octubre pasado la Agrupación Nacional se ha manifestado a favor del estado de Israel, aunque dicho partido tiene antecedentes antijudíos. Por el contrario Melenchon del Nuevo Frente Popular es totalmente pro- Palestina y Macron es partidario de la solución de dos estados.

En cuanto a Europa, Bardella ha dicho que no es antieuropeo sino solamente crítico de la Unión Europea.

En cuanto a los temas sensibles de las migraciones promete políticas públicas de control de las mismas, así como erradicar las ideologías islámicas radicales.

Procuraría restablecer la autoridad en el sistema educativo.

Ofrece seguridad y línea dura contra los delincuentes.

En un gobierno de cohabitación entre Macron y Bardella se puede pronosticar que Francia continuará siendo un miembro crítico de la Unión Europea, así como un integrante del Grupo de los 7 y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Es decir que se mantendría dentro de la alianza de las democracias occidentales.

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