El precio social de la denuncia
Larissa Arroyo larissa@acceder.cr | Lunes 17 abril, 2017
Ella denuncia
Una chica es tocada por un tipo en el bus. ¿Les suena conocido? Ella sabe que en esta sociedad de la que van a dudar es de ella porque siempre es de las víctimas de las que dudan. ¿Ya saben cómo es la cosa, no? Eso de que las mujeres denunciamos por gusto, por venganza, por feminazis, por exageradas o por locas. En fin, ella se arma de valor y toma un video para pedirle al chofer que la ayude. Él, le dice que mejor se pase de campo y ya. ¿Qué más podría hacer él? Ella indignada denuncia en redes.
Los medios de comunicación y las redes sociales
Un medio de comunicación hace noticia del hecho. La aturden con comentarios. ¡De fijo, quiere 5 minutos de fama le dicen! ¿Quién se va a poner a filmar y denunciar? ¡Tiene que ser eso! ¿Quién va a gastar tiempo en algo así por gusto?
La compañía de buses grita: "¡Montaje!" Bueno, dice que hay que "presumir" montaje porque no hay denuncia. Con lo fácil que es poner la denuncia, ¿quién no la pondría? ¡Ya ven! Se los dije: las mujeres denunciamos por gusto, por venganza, por feminazis, por exageradas o por locas.
Entrevistan a un "experto en leyes" y él, por fin, explica todo: ella PODRÍA poner la denuncia. Aquí, ya la duda está sembrada. ¿Por qué será que no la puesto? Al tocarla sin su consentimiento, un despacho judicial, nos sigue comentando el experto, dependiendo de la INTENCIÓN del victimario y de la finalidad del acto, podría calificarlo como contravención o bien como tentativa de abuso. Es que, ya saben, hay una diferencia entre querer tocarle un seno o algo más. Lástima que no nos explica el ex-juez que es “algo más”. Lo que sí precisa es que podría ser un video para ganar popularidad porque se viralizó. Finaliza con una sentencia para las mujeres: "delito de simulación de delito". Y ojo, precisa él que la fiscalía puede investigar de oficio. Curioso, porque si vas y ponés tu denuncia por acoso sexual callejero, te dicen que tenés que llevar el nombre y apellidos así como otros datos porque ahí no pueden hacer investigación.
El medio de comunicación alega que le da la "oportunidad" a quien denuncia y la contacta pero ella nunca responde.
El resultado
Para este momento, el foco de atención ya no es el acosador. Es ella y su “conducta extraña de denunciar en redes”. Entonces, el mensaje es claro y contundente: el beneficio de la duda siempre se la daremos a quien denuncia y no al denunciado. Aún más grave, el hecho de que nos intentan enseñar una lección a todas a las que nos hemos concentrado en la importancia y urgencia de la denuncia. Nos hacen la advertencia de ser procesadas por simulación de delito antes de hablar de las barreras que tenemos para denunciar el acoso sexual callejero:
- No hay una figura penal de acoso sexual callejero. (aunque ya hemos presentado un proyecto de ley bajo el expediente n. 20299)
- Es procesada por el sistema de justicia como una contravención contra las buenas costumbres y pocas veces un delito sexual (abuso sexual).
- Nos piden los datos personales del agresor, los cuales pocas veces podemos proveer.
- Nos piden pruebas, cuando muchas veces estamos solas cuando ocurren los hechos o bien no sabemos los datos de quienes son testigos.
- No hay apoyo social en el momento del acoso ni siquiera de los choferes o de las autoridades.
- Dudan de nosotras con argumentos como que queremos fama.
- Nos acusan de que nosotras lo provocamos.
- Nos reclaman que por qué no lo detuvimos.
Y entre todo eso, la humillación, la vergüenza, la ira, el terror y un gigantesco cúmulo de emociones y sentimientos, nos quedamos a la intemperie en una sociedad que sigue creyendo que las mujeres denunciamos por gusto, por venganza, por feminazis, por exageradas o por locas.
Así que, mujer, no importa quién seas, la mujer del bus, la mujer del taxi, la mujer en la U o la mujer en el Mercado Central, siempre te voy a creer primero a vos. No voy a cuestionarte antes de ofrecerte mi apoyo, como mujer, como activista y como abogada. Hemos estado muy solas para seguirnos abandonando.
Lo pendiente
Las alianzas son necesarias. Diversos colectivos han desarrollado campañas para el empoderamiento y la denuncia. Las Peras del Olmo, colectivo de organizaciones, colectivos, activistas independientes, de la cual es parte ACCEDER, está desarrollando una aplicación para publicar las historias de acoso.
La sociedad entera tiene un papel en el cambio. Tanto para la aprobación de una ley que reconozca la gravedad del acoso sexual callejero en todos sus extremos como también la urgencia de inversión de recursos en campañas de concientización y sensibilización de esta problemática. Si buscan un buen ejemplo les dejo el implementado por la Oficina de la Igualdad y Equidad de Género de la Municipalidad de Heredia, el cual apunta a la distribución de tareas y un triple compromiso: respetar el espacio de las otras personas, señalar a quien no respete a otra persona y a brindar ayuda si esta es solicitada.
ACCEDER a la justicia: el proceso de denuncia
Primeramente, debemos definir como violencia toda práctica de connotación sexual ejercida en espacios públicos (centros comerciales, la calle o servicios de transporte como bus, taxi, tren, Uber). Estas acciones generan malestar en la víctima con independencia de la intención del agresor y son hechas sin el consentimiento de la víctima.
Aquí alguna orientación incluyendo links de utilidad:
● La denuncia puede ser hecha directamente ante la empresa en donde trabaja la persona, por ejemplo en caso de que el agresor sea trabajador en una construcción.
● También podés pedir apoyo por ejemplo al chofer del bus y si este no hace nada de manera posterior podemos interponer la denuncia ante la propia compañía de este transporte (TRACOPA, TRANTUSA, LUMACA, etc).
● Adicionalmente, en el mismo momento podemos llamar al 911 y pedir ayuda o bien contactar a la Fuerza Pública. Si estos no te apoyan también podés interponer una denuncia en contra de ésta por incumplimiento de sus deberes.
● Por último, si te animás, poné la denuncia ante el juzgado que corresponda (donde ocurrió el hecho) y si no te tratan bien, también podés poner la denuncia ante la Contraloría de Servicios.
No te puedo prometer que sea simple, pero si te puedo prometer que podés encontrar apoyo en diversos colectivos como las Peras del Olmo o encontrar asesoría jurídica en ACCEDER porque no me importa si al final resulta un montaje o experimento social. Me importa mucho más creerte a vos antes que nada. A vos y a todas las que vivimos cotidianamente la violencia sexual.
No estás sola.