El traje, revisión contemporánea
EFE | Martes 12 febrero, 2013
CODIGO OFICINA MARTES
El traje, revisión contemporánea
La sastrería sin formalidad aburrida es la propuesta de elegancia para esta temporada
El diseñador Tommy Hilfiger propuso una revisión contemporánea del traje masculino de los años 60.AFP/La República
Tommy Hilfiger propuso una revisión contemporánea del traje masculino de los años 60 en la presentación de su colección masculina otoño-invierno en la Semana de la Moda de Nueva York.
En otras ocasiones la parte de detrás de los trajes y pantalones era en un tejido liso y de color diferente, como el caqui, lo que creaba un fuerte contraste visual con los cuadros blancos y negros delanteros.
También había conjuntos con tradicionales abrigos de lana, americanas y pantalones en clásico azul marino, en los que unas líneas rojas marcaban el punto de modernidad.
La marca define el estilo de esta colección como “sastrería sin formalidad aburrida”.
Marfil o hueso eran otros colores destacados. Las bufandas de estilo universitario, las botas de cuero calado y los mocasines de suela gruesa terminaban de componer la combinación de clasicismo reinventado.
La firma española, Custo Barcelona combina materiales naturales como lana y algodón con otros “técnicos”, como el neopreno de algunas prendas deportivas, junto con plumas y apliques metálicos.
En colores, esos brillos metálicos (cobre, oro o plata vieja) toman el protagonismo al complementar prendas en negro, grises, marrones y beis.
La colección masculina es muy de sastre, incluso si no dejó el intenso mundo visual de la firma.
Diane von Fürstenberg mostró una colección más orientada a la mujer profesional, en la que no faltaron los vestidos cruzados característicos de la firma.
Los vestidos, ceñidos en la cintura y por debajo de la rodilla, venían en tonos ocres, granates y con estampados vegetales, junto a conjuntos más modernos de pantalones y faldas en tonos brillantes (dorado o plata).
También había conjuntos clásicos de largas blusas y pantalones con motivos geométricos, además de monos y vestidos de noche en tonos vivos (sobre todo rojos y granates, pero también azules).
Nueva York / EFE