Eli Feinzaig sobre plan para cerrar Recope: “Afecta competitividad país y encarece gasolina innecesariamente”

Para acabar con los abusos de la convención colectiva, reducir el precio de los hidrocarburos y mejorar la competitividad del país, Eli Feinzaig, diputado del Partido Liberal Progresista trabaja en un proyecto de ley para cerrar la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).

La iniciativa, permitiría la competencia en el mercado de la gasolina y se trata de una promesa de campaña que hiciera el político.

Lea más: Costo de gasolina ya no subvencionará fondo de ahorro y crédito de vivienda para empleados de Recope

En ese sentido, Feinzaig advierte que no se trata solo de cerrar Recope, sino que es necesario garantizar que los costarricenses no se queden sin el suministro del combustible; lo cual, es un tema complejo al considerar la necesidad de definir claramente los roles en el mercado, el mecanismo de importación, el uso de la infraestructura de trasiego y el poliducto, así como la instalación de tanques de almacenamiento, entre otros detalles, dijo el legislador.

“Nosotros dijimos en campaña que íbamos a buscar el cierre de la institución y tenemos ese compromiso incólume. De hecho, estamos trabajando en una propuesta de ley (…) Consideramos necesario hacer esto porque Recope es una institución que afecta la competitividad del país y aumenta los costos innecesariamente”, dijo Feinzaig.

Lea más: Rodrigo Chaves: “Costa Rica es un país rico, pero mal administrado que sigue los pasos de Venezuela”

Durante este año, el precio de las gasolinas alcanzó un precio récord de ¢1 mil por litro, debido a la presión del mercado internacional y otros costos internos.

Por otra parte, el esquema “se ha vuelto tan ridículo”, que en estos días la gasolina súper estuvo más barata que la regular.

“Esto es una evidencia más que clara que el sistema no está funcionando bien y por ello, requiere de una revisión”, agregó el diputado.

De momento, los detalles de la iniciativa no están claros, pero sí es una realidad dos cosas, que habría cierre de Recope y una competencia en el mercado.

Esto, en principio traería mejores precios para los consumidores.

“La apertura no provocaría una gran reducción de las gasolinas, pero sí habría ahorro. Hay unas eficiencias que se podrían ganar en un mercado abierto, pero no es ese el principal objetivo, sino eliminar los abusos históricos que se han cometido en esa institución. Lo que no queremos es que esos abusos se sigan trasladando a las tarifas, por ejemplo, algunos de los costos de la convención colectiva”, dijo Feinzaig.

En ese sentido, es muy difícil saber cuánto sería el ahorro por litro; sin embargo, los ticos ya no tendrían que pagar por beneficios de los empleados de Recope, como por ejemplo, almuerzos subsidiados o el fondeo de una estructura financiera dedicada al préstamo de dinero para vivienda.

Por otra parte, el cierre de Recope no sería tan fácil de lograr en el Congreso, según reconoce el propio Feinzaig.

No obstante, el diputado confía en convencer a otros legisladores de apoyar su idea.

“En cuanto a la viabilidad del proyecto, consideramos que es algo que se construye en el Congreso a lo largo del tiempo, primero hay que tener el proyecto, socializarlo con las demás fracciones y luego veremos. Es una lucha que vale la pena dar”, finalizó el diputado.

A pesar de que Recope es una refinadora tiene más de diez años de no refinar una sola gota de petróleo.

Sobre este tema, no fue posible obtener una opinión del gobierno.

Sin embargo, en campaña el presidente Rodrigo Chaves se mostró favorable a la apertura de la competencia y reducción de gastos.

“No se justifica que para bombear gasolina tengamos más de 1.700 empleados, además de una convención colectiva leonina. Hay que poner a Recope a producir como Dios manda, con márgenes más razonables al valor agregado que le da la institución a la sociedad y si eso pasa al final del día por levantar el monopolio, entonces se hará”, dijo Chaves en una entrevista con LA REPÚBLICA.