Empleados de Fanal denuncian a jerarcas del CNP ante Contraloría
Natasha Cambronero redaccion@larepublica.net | Sábado 27 marzo, 2010
Problemas por distribución de guaro Cacique
Empleados de Fanal denuncian a jerarcas del CNP ante Contraloría
• Atrasos en el contrato ocasionarían una caída en el presupuesto para ayudar a los pequeños productores y la modernización de las plantas de almacenamiento
Natasha Cambronero / Carlos J. Mora
ncambronero@larepublica.net
cmorah@larepublica.net
El desplome en las ventas del guaro Cacique que sufre la Fábrica Nacional de Licores (Fanal), debido a divergencias en su distribución, dejó de ser un problema interno y ahora es caso de análisis por parte de la Contraloría General de la República.
Las dificultades para concretar un arreglo entre la Fábrica y la empresa repartidora Ciamesa, luego de casi tres meses de negociaciones y las pérdidas millonarias que enfrenta la entidad, calaron fuerte entre sus empleados quienes presentaron una denuncia para sentar responsabilidades.
Ante esta situación, los trabajadores del Consejo Nacional de la Producción (CNP) —entidad rectora de Fanal— solicitaron al ente contralor iniciar una investigación en contra de Carlos Manuel Vicente y Ricardo Zúñiga, presidente ejecutivo y gerente general de la institución estatal, respectivamente.
En la carta enviada a la Contraloría, de la que LA REPUBLICA obtuvo una copia, los empleados aducen que ambos jerarcas realizan funciones y participan en reuniones que no les corresponden.
Esto en razón de que Vicente es quien está mediando entre la junta directiva del CNP y Ciamesa para llegar a un acuerdo en la distribución y no Claudio Aguilar, el administrador de la Fábrica.
La medida de los trabajadores fue considerada como precipitada por los jerarcas del Consejo, quienes estiman que lo más conveniente era continuar con los diálogos mientras se llega a un acuerdo con Ciamesa.
“Jamás se debió llegar a esta instancia, me parece que la etapa de diálogo debe ser a lo interno y no salir de la institución, mi criterio personal es que se trata de un pleito de poderes, por ver quien tiene el poder”, afirmó Zúñiga.
Mientras el caso es elevado a la Contraloría, a lo interno continúan las negociaciones por definir quien tendrá a cargo la distribución del guaro Cacique.
De momento se estableció que se continuará con Ciamesa y no se buscarán nuevos repartidores.
No obstante, aún no se define cuál será la cantidad de cajas que se sacarán al mercado; por un lado Fanal pretende que sean 305 mil, mientras que la firma distribuidora estima que deben ser 240 mil pues aún tiene altos inventarios en bodega.
Ante estas discrepancias, el contrato no se podrá suscribir para el primer trimestre del año, que está cerca de finalizar; quedará para el segundo trimestre.
Este atraso implicará una reducción en el presupuesto del CNP, ya que estimaba que durante 2010 recibiría ¢3.200 millones, producto de las operaciones del Fanal, pero ahora espera solo ¢2.800 millones.
La merma en los ingresos del Consejo ocasionará una reducción en los fondos que se destinan para ayudar a los pequeños y medianos productores. Así mismo, los planes para modernizar las plantas de almacenamiento se deberán postergar.
“Vamos a tener que postergar los procesos de inversión que tiene el CNP, relacionadas con seguridad alimentaria y apoyo a las organizaciones”, añadió Zúñiga.
Un informe del departamento Financiero, al que este medio tuvo acceso, reveló que mientras entre enero y febrero de 2009 Fanal colocó 57.208 cajas de guaro Cacique en el mercado, en el mismo periodo de 2010 solo facturó 11.243, lo que representó una caída del 78% en sus ventas.
Para compensar estas pérdidas y cumplir una deuda que la Fábrica tiene con la Liga de la Caña (Laica) dos firmas: CISA y Almacén de Licores y Abarrotes San Ramón, distribuirán 20 mil cajas de guaro, a dicho acuerdo se llegó el viernes.
Empleados de Fanal denuncian a jerarcas del CNP ante Contraloría
• Atrasos en el contrato ocasionarían una caída en el presupuesto para ayudar a los pequeños productores y la modernización de las plantas de almacenamiento
Natasha Cambronero / Carlos J. Mora
ncambronero@larepublica.net
cmorah@larepublica.net
El desplome en las ventas del guaro Cacique que sufre la Fábrica Nacional de Licores (Fanal), debido a divergencias en su distribución, dejó de ser un problema interno y ahora es caso de análisis por parte de la Contraloría General de la República.
Las dificultades para concretar un arreglo entre la Fábrica y la empresa repartidora Ciamesa, luego de casi tres meses de negociaciones y las pérdidas millonarias que enfrenta la entidad, calaron fuerte entre sus empleados quienes presentaron una denuncia para sentar responsabilidades.
Ante esta situación, los trabajadores del Consejo Nacional de la Producción (CNP) —entidad rectora de Fanal— solicitaron al ente contralor iniciar una investigación en contra de Carlos Manuel Vicente y Ricardo Zúñiga, presidente ejecutivo y gerente general de la institución estatal, respectivamente.
En la carta enviada a la Contraloría, de la que LA REPUBLICA obtuvo una copia, los empleados aducen que ambos jerarcas realizan funciones y participan en reuniones que no les corresponden.
Esto en razón de que Vicente es quien está mediando entre la junta directiva del CNP y Ciamesa para llegar a un acuerdo en la distribución y no Claudio Aguilar, el administrador de la Fábrica.
La medida de los trabajadores fue considerada como precipitada por los jerarcas del Consejo, quienes estiman que lo más conveniente era continuar con los diálogos mientras se llega a un acuerdo con Ciamesa.
“Jamás se debió llegar a esta instancia, me parece que la etapa de diálogo debe ser a lo interno y no salir de la institución, mi criterio personal es que se trata de un pleito de poderes, por ver quien tiene el poder”, afirmó Zúñiga.
Mientras el caso es elevado a la Contraloría, a lo interno continúan las negociaciones por definir quien tendrá a cargo la distribución del guaro Cacique.
De momento se estableció que se continuará con Ciamesa y no se buscarán nuevos repartidores.
No obstante, aún no se define cuál será la cantidad de cajas que se sacarán al mercado; por un lado Fanal pretende que sean 305 mil, mientras que la firma distribuidora estima que deben ser 240 mil pues aún tiene altos inventarios en bodega.
Ante estas discrepancias, el contrato no se podrá suscribir para el primer trimestre del año, que está cerca de finalizar; quedará para el segundo trimestre.
Este atraso implicará una reducción en el presupuesto del CNP, ya que estimaba que durante 2010 recibiría ¢3.200 millones, producto de las operaciones del Fanal, pero ahora espera solo ¢2.800 millones.
La merma en los ingresos del Consejo ocasionará una reducción en los fondos que se destinan para ayudar a los pequeños y medianos productores. Así mismo, los planes para modernizar las plantas de almacenamiento se deberán postergar.
“Vamos a tener que postergar los procesos de inversión que tiene el CNP, relacionadas con seguridad alimentaria y apoyo a las organizaciones”, añadió Zúñiga.
Un informe del departamento Financiero, al que este medio tuvo acceso, reveló que mientras entre enero y febrero de 2009 Fanal colocó 57.208 cajas de guaro Cacique en el mercado, en el mismo periodo de 2010 solo facturó 11.243, lo que representó una caída del 78% en sus ventas.
Para compensar estas pérdidas y cumplir una deuda que la Fábrica tiene con la Liga de la Caña (Laica) dos firmas: CISA y Almacén de Licores y Abarrotes San Ramón, distribuirán 20 mil cajas de guaro, a dicho acuerdo se llegó el viernes.