Empresas celulares tendrán libertad tarifaria
Luis Valverde lvalverde@larepublica.net | Viernes 16 septiembre, 2011
Firmas podrán definir precios de varios servicios ligados a telefonía
Empresas celulares tendrán libertad tarifaria
Una vez que haya competencia efectiva solo se regulará el precio en el mercado mayorista
Las empresas de telecomunicaciones tendrán libertad para definir sus propias tarifas en varios de los servicios que presten, catalogados como de valor agregado.
Esto formará parte de la nueva estructura de precios que se aplicará tanto para telefonía móvil como para Internet en los próximos meses.
No obstante, la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) se guardará el derecho de definir el costo que tendrán los servicios principales para el usuario, como el de llamadas, mensajes de texto y paquetes de descarga de Internet.
Esto quiere decir que si por ejemplo una empresa realiza un cobro por cambiar el chip, por descargar tonos para el teléfono o para suscribirse a algún tipo de servicio, los precios serán definidos por la firma y no estarían regulados por la Sutel.
“Lo que haremos es tratar de limpiar los elementos que no tienen sentido, como por ejemplo algunos servicios de valor agregado en los que se dice cuánto debe costar, eso quedaría por la libre porque limita al operador… lo que hará la Sutel es regular los servicios básicos con una fórmula más flexible”, confirmó Maryleana Méndez, presidenta de la Superintendencia.
Esta fórmula estará basada en un modelo de precios tope, con el cual las compañías podrán bajar sus tarifas de acuerdo con sus intereses.
Esto se hará en dos etapas. La primera incluirá los precios de la telefonía móvil e Internet, y posteriormente los servicios fijos.
El nuevo modelo podría estar listo en el transcurso de los próximos dos meses, mientras se realiza la audiencia pública requerida.
Sin embargo, la regulación por parte de la Superintendencia no sería para siempre.
La meta es que en el corto o mediano plazo los precios puedan ser liberalizados, de modo que la regulación se ejecute en el mercado mayorista y no a nivel de consumidor.
Esto quiere decir que la Sutel estipularía, por ejemplo, cuánto le cuesta a un operador comprar un minuto aire para revenderlo (como sucede con los operadores móviles virtuales), o bien cuánto debe pagar una firma por acarrear la señal de Internet.
A partir de allí, las empresas podrán definir su margen de ganancia y estipular el valor del servicio al consumidor.
Para esto será necesario que la Sutel efectúe antes una declaratoria de “mercado en competencia efectiva”. Esto aplica cuando se determine que las condiciones del país ya no son monopolísticas y que el usuario no se verá afectado.
“Se mide el número de actores que hay, que no haya barreras de entrada para nuevos operadores, que haya capacidad de los distribuidores para ofrecer los servicios, que exista un adecuado acceso a los recursos escasos (por ejemplo las frecuencias), que un operador no tenga todo el control… son muchas variables”, dijo Méndez.
En ese sentido, de hecho ya se hizo el primer estudio, para determinar si en el caso de Internet se podía declarar como un mercado en competencia efectiva, pero se determinó que todavía faltan algunas de estas variables por cumplir.
Luis Valverde
lvalverde@larepublica.net
Empresas celulares tendrán libertad tarifaria
Una vez que haya competencia efectiva solo se regulará el precio en el mercado mayorista
Esto formará parte de la nueva estructura de precios que se aplicará tanto para telefonía móvil como para Internet en los próximos meses.
No obstante, la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) se guardará el derecho de definir el costo que tendrán los servicios principales para el usuario, como el de llamadas, mensajes de texto y paquetes de descarga de Internet.
Esto quiere decir que si por ejemplo una empresa realiza un cobro por cambiar el chip, por descargar tonos para el teléfono o para suscribirse a algún tipo de servicio, los precios serán definidos por la firma y no estarían regulados por la Sutel.
“Lo que haremos es tratar de limpiar los elementos que no tienen sentido, como por ejemplo algunos servicios de valor agregado en los que se dice cuánto debe costar, eso quedaría por la libre porque limita al operador… lo que hará la Sutel es regular los servicios básicos con una fórmula más flexible”, confirmó Maryleana Méndez, presidenta de la Superintendencia.
Esta fórmula estará basada en un modelo de precios tope, con el cual las compañías podrán bajar sus tarifas de acuerdo con sus intereses.
Esto se hará en dos etapas. La primera incluirá los precios de la telefonía móvil e Internet, y posteriormente los servicios fijos.
El nuevo modelo podría estar listo en el transcurso de los próximos dos meses, mientras se realiza la audiencia pública requerida.
Sin embargo, la regulación por parte de la Superintendencia no sería para siempre.
La meta es que en el corto o mediano plazo los precios puedan ser liberalizados, de modo que la regulación se ejecute en el mercado mayorista y no a nivel de consumidor.
Esto quiere decir que la Sutel estipularía, por ejemplo, cuánto le cuesta a un operador comprar un minuto aire para revenderlo (como sucede con los operadores móviles virtuales), o bien cuánto debe pagar una firma por acarrear la señal de Internet.
A partir de allí, las empresas podrán definir su margen de ganancia y estipular el valor del servicio al consumidor.
Para esto será necesario que la Sutel efectúe antes una declaratoria de “mercado en competencia efectiva”. Esto aplica cuando se determine que las condiciones del país ya no son monopolísticas y que el usuario no se verá afectado.
“Se mide el número de actores que hay, que no haya barreras de entrada para nuevos operadores, que haya capacidad de los distribuidores para ofrecer los servicios, que exista un adecuado acceso a los recursos escasos (por ejemplo las frecuencias), que un operador no tenga todo el control… son muchas variables”, dijo Méndez.
En ese sentido, de hecho ya se hizo el primer estudio, para determinar si en el caso de Internet se podía declarar como un mercado en competencia efectiva, pero se determinó que todavía faltan algunas de estas variables por cumplir.
Luis Valverde
lvalverde@larepublica.net