"Estados Unidos está un poco retorcido y al revés": Willy Chavarria, el diseñador chicano que volteó las siglas USA en sus prendas
Santiago Vanegas - BBC News Mundo | Miércoles 30 octubre, 2024
Willy Chavarria es uno de los nombres más importantes de la industria de la moda en Estados Unidos.
Este martes recibió por segunda vez consecutiva el premio a Diseñador del Año en la categoría de ropa masculina, que entrega el Consejo de diseñadores de moda estadounidenses (CFDA).
Sus diseños se han convertido en la elección de celebridades como Billie Eilish, Kendrick Lamar y Justin Bieber, sus pasarelas son de las más esperadas de la Semana de la Moda de la Nueva York y ha colaborado con marcas como Adidas.
Todo eso lo logró en menos de una década —lanzó su marca en 2015—, y lo hizo poniendo en el centro de su trabajo a la cultura latina en EE.UU.
De origen mexicano, Chavarria nació y creció en un pueblo de California moldeado por la migración y ha encontrado su inspiración en los pachucos, los cholos y los chicanos, identidades que surgieron entre los mexicanos en Estados Unidos.
Chavarria usa sus prendas, además, para transmitir mensajes políticos, a veces tan explícitos como poner las siglas U.S.A. al revés.
Willy Chavarria habló con BBC Mundo desde su estudio en Nueva York.
La pared detrás de él resume un poco su inspiración: a la derecha, fotos de modelos y artistas como Nina Simone y Selena Quintanilla; a la izquierda, iconografía de sindicatos de trabajadores.
Su pasarela más reciente empezó con el grupo de música regional mexicana Yahritza y su Esencia tocando “Querida”, la icónica canción de Juan Gabriel, bajo una enorme bandera estadounidense. ¿Cuál es el significado de esa imagen para usted? ¿Por qué quiso empezar por ahí?
Es curioso. Normalmente, es en el último mes antes del desfile cuando todo empieza a encajar. Empiezas a ver la ropa puesta y todo empieza a suceder de verdad.
Pero fue antes de eso que supe que quería trabajar con Yahritza y sus hermanos. Soy muy fan. Son geniales e inspiradores, y siento que marcan la pauta para el latino moderno en Estados Unidos, porque nacieron aquí y cantan en español y son muy mexicanoamericanos. Creo que representan a este continente de una forma que es importante que se reconozca.
Verlos bajo esa bandera estadounidense gigante fue tan poderoso. Recuerdo que en el ensayo todo el mundo que estaba viendo se quedó sin aliento. Fue tan fuerte, tan impactante.
Yo sólo quería que se viera esa imagen, que se escuchara esa música delante de esa bandera estadounidense gigante con estas voces jóvenes y hermosas. Era casi que el futuro. Estábamos mirando hacia el futuro.
La colección se llama “América”, en español. ¿Qué resonó con usted esa palabra?
Sí. Esa es la forma en que mi familia y muchas otras familias y personas que viven en este país pronuncian America.
Quería que esa pronunciación fuera entendida como igualmente legítima, darle la legitimidad que se merece.
Varias prendas de la colección son una reinterpretación de uniformes de trabajo. ¿Por qué decidió trabajar con esa inspiración?
Siempre me he inspirado en la gente que me rodea y en la gente de la calle.
Quería mostrar un poco las diferentes clases económicas de los latinos en EE.UU.
Teníamos un grupo de cuello blanco, que usa trajes y tal vez trabaja en el banco. Luego otro que eran quizás los gerentes de AT&T (una empresa de telefonía) que abren la oficina por la mañana. Luego teníamos a los trabajadores de hoteles. Luego a los trabajadores agrícolas...
Quería mostrar todos estos diferentes tipos de personas y darle a lo que llevan puesto un nivel de dignidad para que, cuando los vemos, vemos la belleza en esos atuendos.
Su trabajo es muy político. Usted incluso ha hecho camisetas con el logo de la Unión Americana de Libertades Civiles. ¿Por qué siente la necesidad de incluir un mensaje político en sus diseños?
Creo que sería muy político incluso si no fuera diseñador.
Es importante que seamos conscientes de lo que está pasando, que no ignoremos la política que nos rodea porque controla nuestras vidas.
La necesidad de hacer esta colección en particular tuvo todo que ver con las elecciones presidenciales. Quería recordarnos a todos que pertenecemos aquí que tenemos un lugar aquí y también que tenemos la capacidad de tener poder aquí. Tenemos el poder de votar, que es muy importante. Quería que fuera un pequeño recordatorio de la importancia de nuestro voto.
Como usted dice, estamos muy cerca de las elecciones, y la migración ha sido uno de los temas principales. Usted ha abordado mucho este tema en su trabajo. ¿Qué le hacen pensar los discursos alrededor de la migración que estamos viendo en la campaña?
Creo que necesitamos más inmigrantes. Eso es lo que pienso. Creo que hay recursos de sobra para todos, y sé que económicamente este país necesita más inmigrantes para que paguen impuestos y el país se sostenga.
Por desgracia, hay muchas mentiras sobre por qué no permitimos que la gente entre a este país. No sé si ya nos ponemos demasiado políticos, pero es obvio que en este momento que se están utilizando historias ficticias sobre la inmigración para obtener votos, cosas que no tienen nada que ver con lo que realmente está sucediendo. Creo que eso es muy vergonzoso.
Eso me hace pensar en su infancia en California, un estado profundamente moldeado por la migración y la frontera. ¿Cómo fue su infancia allí y qué elementos de ese momento de su vida siguen siendo importantes para usted ahora?
Yo crecí en una zona agrícola en la mitad de California donde hay un montón de pueblitos que son pueblos de migrantes. Los mexicanos venían a recoger la lechuga, luego se iban a otro lado a recoger el ajo, etc.
Mis abuelos pudieron establecerse en uno de estos pueblitos llamado Huron donde había de todo creciendo todo el tiempo, había trabajo constante.
Crecer allí me ayudó a entender el trabajo duro. Heredé de mi familia esa ética de trabajo, esa creencia de que el trabajo duro vale la pena.
También, la Unión de Campesinos fue muy importante para mi familia. César Chávez y Dolores Huerta (sus fundadores) fueron grandes modelos a seguir para mi familia. Y luego también John F. Kennedy y Martin Luther King.
Los derechos civiles y los derechos humanos fueron algo de lo que crecí siendo muy, muy consciente. Por eso, cuando crecí y empecé a trabajar en la industria de la moda, se volvió prioritario para mí asegurarme de hacer cosas que no hicieran daño en el mundo, sino intentar tener algún tipo de efecto positivo.
Una de sus prendas más famosas es una camiseta con las siglas U.S.A. al revés. ¿Qué trataba decir con eso?
Bueno, hay tantas cosas en este país que están completamente al revés. Todos sabemos que el país en el que vivimos está un poco retorcido y al revés.
Usted también ha usado la palabra “chicano” en algunas de sus piezas. ¿Por qué ese término es importante para usted?
“Chicano” solía ser un término despectivo. Solía ser una mala palabra que se usaba para referirse a los mexicanoamericanos.
Esa es una de las razones por las que me encanta, porque los chicanos, gente como yo, de origen mexicano pero criados en Estados Unidos, reivindicaron esa palabra durante el movimiento por los derechos civiles. Y fue entonces cuando esa palabra se hizo muy popular.
Fue una palabra muy controversial durante mucho tiempo. Las diferentes generaciones no estaban de acuerdo con su uso, algo parecido a lo que pasa con el término “Latinx” ahora. Pero con el tiempo se convirtió en algo aceptable.
A veces los chicanos ni siquiera hablan español —mi español, por ejemplo, no es muy bueno lamentablemente—pero siguen siendo muy latinos. Me gusta pensar en ser chicano como algo de lo que estar orgulloso. Y es genial que usemos esta palabra, que solía ser despectiva hacia nosotros, como algo de lo que estar muy orgullosos.
¿Cuáles diría que son los símbolos esenciales de la identidad chicana?
Yo diría que la moda chicana comenzó con los pachucos en los años 30 y 40.
Los mexicanos en Texas, Colorado y California crearon una moda increíble, que fue incluso adoptada por la población negra también. Fue el surgimiento de la ropa holgada. Y en ese momento, esa ropa era ilegal. La policía te golpeaba y te mataba si llevabas esa ropa. Te metían en la cárcel.
De ahí surgieron luego los cholos, que eran una interpretación moderna de los pachucos y otra hermosa manifestación de moda. Y los cholos influyeron en casi todos los chicanos, que empezaron a vestirse con pantalones anchos. Es un estilo tan característico. Y es una reivindicación de la identidad cultural. Es hermoso.
La Virgen de Guadalupe también es muy chicana. Las rosas son muy chicanas. La Última Cena es muy chicana. El pelo peinado hacia atrás es muy chicano.
Para mí el atuendo más elegante del mundo es también el más chicano, que es simplemente una camiseta blanca y unos pantalones Dickies caqui planchados. Precioso.
Otra parte de su visión en la moda viene de ser queer. ¿Cómo alimenta esa identidad su trabajo como diseñador?
Como soy tan queer, no puedo pensar de otra manera, así que todo lo que hago es automáticamente queer. Y creo que ser queer también es político.
La forma en que eso encaja en mi trabajo es que realmente no pienso tanto en el género a la hora de diseñar los looks. La ropa no tiene género. Es sólo una cosa. Es cuando se la pone una persona que se vuelve femenina o masculina, de hombre o de mujer. Yo hago la ropa sin género y luego la adapto a la forma del cuerpo.
Si es un vestido, puede ir en un hombre. O si es un traje, puede ir en una mujer. No importa.
¿Y crees que ser latino y ser queer son categorías separadas, o hay algo especial en ser ambas?
Bueno, yo estoy muy, muy agradecido de ser ambas porque me encantan.
Sin duda, son categorías distintas. Son prejuicios diferentes: el racismo contra los latinos y la homofobia contra los homosexuales. Sí creo que, a la gente como yo, esas opresiones que experimentamos nos hacen más fuertes, más interesantes y más creativos.
Por último, ¿cuáles son sus ídolos en la moda, en el arte, en la vida?
Muchas de mis mayores influencias son personas cercanas a mí, como amigos que están en mi círculo más cercano. Billie Holiday fue una gran inspiración para mí. Me encanta la fuerza de su voz y su gracia. Nina Simone es otra. Me gusta la gente que ha pasado por dificultades.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro canal de WhatsApp.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.