Consumo de hogares sería muy similar a este año, según Banco Central
Familias ticas serían cautelosas con su dinero en 2025
Compra de bienes necesarios marcaría la pauta, de acuerdo con expertos
Tatiana Gutiérrez Wa-Chong tgutierrez@larepublica.net | Miércoles 27 noviembre, 2024
En 2025 las familias costarricenses serían más cautas con su dinero.
Y es que el consumo de los hogares que se estima en 3,8% apenas proyecta un leve aumento en relación con este año; el cual, cerrará en 3,7%, de acuerdo con las proyecciones del Banco Central.
Lea más: ¿En qué gastan los hogares ticos?
Las estimaciones se dan en un contexto de mayor inflación y reducción del crecimiento de la economía.
La estabilidad se debe a dos factores principales.
En primer lugar, los consumidores están siendo más precavidos en sus compras, priorizando bienes duraderos como carros, casas y productos de línea blanca, aprovechando la baja en el tipo de cambio, aseguró Alberto Trejos, economista.
También, se observa un aumento en el consumo de bienes semiduraderos, como prendas de vestir y calzado.
En segundo lugar, desde la pandemia, las personas consideran prioritario mantener un ahorro para suplir sus necesidades básicas, ya sea en dólares o en colones.
La baja inflación registrada durante este año, que incluso permaneció en cifras negativas durante 11 meses consecutivos, permitió que el consumo no se viera afectado.
Lea más: ¿Cómo se explica la baja en el consumo de los hogares?
Esto se atribuye a una política monetaria muy restrictiva y a la reducción en el
costo de los productos importados.
Sin embargo, el panorama cambiará en el 2025.
Se espera que el índice de precios al consumidor cierre en 2,4%, alineándose con la meta del Banco Central y alejándose del 0,5% reportado en el 2024.
Esto encarecerá los productos que este año se mantuvieron baratos, limitando su consumo.
“Lo que más favoreció a los consumidores este año fue la estabilidad en los precios de los combustibles y el tipo de cambio, que benefició el costo de bienes y servicios importados. La inflación general cerrará 2024 en 0,3%, pero para el próximo año alcanzará el rango meta del Banco Central en el tercer trimestre,
cerrando 2025 en 2,3%. Esto permitirá que el consumo se mantenga en niveles similares, principalmente favorecido por una baja inflación, que conserva el ingreso disponible con buenos crecimientos”, afirmó Pablo González, analista económico del Grupo Financiero Mercado de Valores.
Por otra parte, se proyecta una baja en el crecimiento económico.
La producción nacional pasará de 4,1% esperado para este año a 3,9% en el 2025.
Esta proyección no es alentadora para sectores como agricultura, manufactura, comercio, turismo y servicios empresariales, que disminuirán su participación en la economía.
No obstante, mucho dependerá de las decisiones que tome el Banco Central en cuanto a las tasas de interés y la rapidez con que estas se transmitan al sistema financiero.
Si las tasas disminuyen, esto podría aumentar la inversión privada, contrarrestando los pronósticos de menor producción.
“Es fundamental fomentar la inversión en todas las zonas del país para que Costa Rica alcance un mejor crecimiento económico en 2025, no solo en el Gran Área Metropolitana (GAM), sino también en cantones con mayor pobreza y menos oportunidades de empleo. Para ello, se requieren políticas públicas nacionales y regionales que resuelvan temas clave como suministro eléctrico (tarifas, calidad y estabilidad), conectividad, infraestructura vial, seguridad ciudadana y la calidad del talento humano que demandan las empresas para crecer”, destacó Shirley Saborío, vicepresidenta del Consejo de la Promoción de la Competitividad.
Otro factor que jugará un papel crucial en 2025 es la tendencia del tipo de cambio.
La caída en el valor del dólar, que abarata las materias primas importadas como combustibles, no solo beneficiará a los consumidores al reducir el costo de muchos bienes y servicios, sino que también aligerará la carga financiera para quienes tienen deudas en dólares.
No se esperan sobresaltos en el precio del dólar ni este, ni el próximo año, sin embargo, existen muchos riesgos geopolíticos y muchas decisiones que dependen de los bancos centrales internacionales para determinar un efecto de este indicador a largo plazo.
Precaución
Una serie de indicadores monetarios harán que el consumo aumente o disminuya durante el 2025.
Muchos ticos serán cautelosos con su dinero.
Luis Alvarado
Analista económico y bursátil
Acobo Puesto de Bolsa
Un aspecto importante es que la inflación no necesariamente mide la canasta de bienes y servicios que consume cada individuo, entonces, el efecto en el consumo dependerá de los patrones que tenga cada persona.
Lo cierto es que una inflación baja es conveniente para la economía, ya que permite el uso eficiente de los recursos, incentiva el consumo y el crecimiento económico, lo que a su vez facilita la creación de empleos.
Melvin Garita
Subgerente General de Estrategia
Banco Nacional
Cuando se presentan caídas moderadas en los productos de la canasta básica, estas caídas tienen un efecto positivo en el aumento en el gasto de los consumidores, ya que pueden realizar más compras porque les quedan recursos adicionales que pueden gastar en otras cosas, pero el efecto no es inmediato.
Greivin Salazar
Economista
Universidad Nacional
El consumo se mantendrá estable porque la inflación volverá al rango meta del Banco Central hasta mediados de 2025. Sin embargo, los precios post-Covid, impactados por la crisis de contenedores y la guerra entre Rusia y Ucrania, deterioraron el poder adquisitivo de los hogares, afectando especialmente a quienes destinan más recursos a alimentación.
Mónica Segnini
Exvicepresidenta
Cámara de Exportadores de Costa Rica
Para mejorar el consumo, el Banco Central debe garantizar bajas tasas de inflación, estabilidad monetaria y un crecimiento económico acelerado. Esto implica cambiar el enfoque de reducir el gasto a impulsar la producción, generando inversiones adicionales, mejorando la productividad y optimizando la asignación de capital.
Daniel Suchar
Analista financiero
Independiente
Las tasas de interés tan altas y la caída en el tipo de cambio, hacen que los bienes importados sean más baratos.
Las políticas económicas y monetarias no están alineadas con el objetivo de inflación.
Sin embargo, no todos los productos que bajaron de precio benefician por igual a todos los estratos sociales.
Por ejemplo, los boletos aéreos, autos nuevos, diésel y gasolina no son bienes de consumo común para personas de menor poder adquisitivo.
Riesgos
Existen una serie de aspectos que podrían cambiar la proyección de consumo para 2025.
- Reducción en el poder adquisitivo de las familias
- Aumento en el desempleo
- Devaluación de la moneda
- Altas tasas de interés
- Inestabilidad política
- Alza en los impuestos
- Una baja en la confianza del consumidor
- Volatilidad en precios internacionales o problemas logísticos pueden encarecer bienes y servicios básicos