Guardianes destrozan “bulpen” de Yankees
Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Jueves 22 agosto, 2024
Nueva York.
La pequeña delegación costarricense de cinco personas, mis nietos Daniel y Franco, Fabio Pérez Merino, compañero de colegio y Manuel Emilio Bolaños, compañero de escuela, más este fanático de los Guardianes, formamos parte de la multitud de 41.400 espectadores que casi llenan el Yankee Stadium la noche del miércoles.
Los Bombarderos del Bronx y los Guardianes, llegaron al inicio de esta Serie de tres juegos “contra las cuerdas”.
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Los Yankees venían de perder dos juegos seguidos en Detroit y tenían a los Orioles en la nuca y peor los Guardianes, barridos en Milwaukee con tres derrotas en fila, lo que ubicó a los Twins y a los Reales de Kansas a solo 2 juegos y medio debajo de la exTribu.
Los Yankees abrieron con el lanzador Luis Gil y los Guardianes con el veterano Mattew Boyd, quien fuera estrella de los Tigres pero estaba sin empleo. Cleveland lo firmó en julio y lo reactivó.
Apenas en el primer inning, los Bombarderos explotaron con jonrones consecutivos de sus cañoneros Juan Soto y Aaron Judge, lo que presagiaba tormenta para la visita.
Sin embargo el abridor Gil lució descontrolado, dio muchas bases por bolas, en solo tres episodios sumó 60 lanzamientos, permitió tres carreras de los Guardianes y tuvo que dar paso temprano al “bulpen” de los Yankees que no es lo mejor del equipo.
Los Yankees empataron 3-3, el lanzador Boyd no permitió más carreras, controló a Soto y Judge y todo lo contrario, Guardianes cuenta en promedio con el mejor cuerpo de relevistas de todas las Grandes Ligas, que dejaron en cero a los anfitriones y el dramático partido se fue a extrainnings.
El juego se prolongó a 12 entradas, los Guardianes dejaron 20 corredores en bases, dejando escapar el triunfo en cadena y los Yankees pudieron ganarlo a no ser por dos atrapadas suicidas del joven jardinero Daniel Scheneeman y una pésima corrida de bases de Trent Grishand, atrapado en el plato.
Fue en la apertura del episodio 12, cuando un doblete del emergente Lane Thomas, encendió la batería de los Guardianes, que destrozó a los relevistas locales con un racimo de seis carreras, que les dio el triunfo final 9-5.
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Esa misma noche, los Orioles derrotaron a los Mets y le pasaron a los Yankees medio juego arriba en el Este de la Liga Americana.
También cayeron los Twins y los Reales, de manera que los Guardianes hicieron mesa gallega y siguieron líderes de la Central ahora a 3 y medio juegos de su par de escoltas.
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