Hewitt cuelga la raqueta
Dinia Vargas dvargas@larepublica.net | Viernes 22 enero, 2016
Se acabó el Abierto de Australia para Lleyton Hewitt y por ende escribió su última página en el tenis profesional.
En una Rod Laver Arena abarrotada (14 mil espectadores) para estar junto al principal ídolo del tenis australiano moderno, Hewitt, de 34 años, luchó como es habitual en él, pero no pudo salir airoso de la batalla con David Ferrer.
Con un marcador en contra de 6-2, 6-4 y 6-4 se despidió de su público, y junto a sus tres hijos dio sus últimas palabras.
“Gracias a todos los que me han apoyado a lo largo de mi carrera”, dijo el tenista de Adelaida, quien ocupa el puesto 308 del ranking y llegó al torneo gracias a una invitación de la organización.
Hewitt se despide con 30 títulos en su palmarés, los más destacados el Abierto de Estados Unidos de 2001 y Wimbledon 2002, además de la Copa Masters de 1999 y 2003.
Mientras tanto, fue un día tranquilo para favoritos como Andy Murray y Stan Wawrinka.
El escocés, segundo sembrado del torneo y cuatro veces finalista en Melbourne, venció al local Sam Groth de buen servicio pero mayor irregularidad, por 6-0, 6-4 y 6-1.
Con el 82% de los puntos conseguidos con el primer saque, el escocés se las verá en tercera ronda con el portugués Joao Sousa.
“Es imposible establecer si este fue mi mejor inicio en un Grand Slam. Hubo algunas cosas que sin dudas podría haber hecho mejor en este partido. Con el saque, por ejemplo. No tuve muchos primeros servicios”, afirmó el inglés, quien busca su revancha en Australia donde nunca ha ganado.
Wawrinka, por su parte, se deshizo con facilidad de Radek Stepanek por 6-2, 6-3 y 6-4.
El suizo, campeón en Melbourne en 2014, no tuvo contemplaciones ante el checo, en poco más de dos horas firmó 15 aces y 43 tiros ganadores, con solo 23 errores no forzados. Su próximo desafío, el peligroso y agresivo Lukas Rosol.
Del lado femenino, no se dieron sorpresas. La española Garbiñe Muguruza, número tres del mundo, avanzó a tercera ronda, igual que Victoria Azarenka y Ana Ivanovic, dos exlíderes del ranking.
Muguruza derrotó a la belga Kirsten Flipkens (80), una jugadora de cuidado, con buenos antecedentes en algunos Grand Slam, por 6-4 y 6-2.
El caso de Azarenka es distinto, ya que la 16 del mundo (14 cabeza de serie) se coronó en Australia en 2012 y 2013 y está volviendo a tomar confianza, con la meta de poder llevarse su tercera corona de Grand Slam.
El segundo escollo de la bielorrusa fue sencillo: venció a la montenegrina Danka Kovinic (54ª), que jugó en Melbourne por primera vez, por 6-1 y 6-2.
Azarenka lleva un invicto de siete partidos en 2016 (título en Brisbane), con una tremenda marca de 84-20 en games y un nivel en progresivo acercamiento a sus mejores días en el circuito.
“Honestamente, que se hable de mí es irrelevante. Eso no gana los partidos. Lo que yo tengo que hacer es probarlo en la cancha. Lo demás son opiniones”, aclaró la bielorrusa.
Además, apareció Ivanovic, quien lucha por cortar su irregular juego, de momento camina firme y lo demostró en su doble 6-3 ante la letona Anastasija Sevastova.