Informes de H&M y Zara revelan problemas de la moda instantánea
Bloomberg | Jueves 16 marzo, 2017
Inditex SA, la dueña de Zara, declaró ayer que la rentabilidad cayó al nivel más bajo en ocho años. Su rival principal, Hennes & Mauritz, informó la primera caída de las ventas mensuales en casi cuatro años. Bajaron las acciones de ambos minoristas.
Los informes ilustran las dificultades que enfrenta la industria de la moda en tanto los consumidores desvían gastos hacia actividades de ocio y le compran una mayor parte de su indumentaria a un grupo creciente de proveedores online.
La mayor competencia presiona los precios, y los costos de producción más altos también reducen la rentabilidad.
“En febrero, los datos de la industria presentaron un gran desafío”, dijo Richard Chamberlain, analista de RBC Capital. Retrocesos de las ventas de un 9% en Alemania y el 6% en Suecia reflejan “cierta rotación del gasto hacia otras categorías de consumo”.
Las acciones de H&M llegaron a caer un 5,1% en Estocolmo, el peor retroceso en tres meses. Una baja del 1% en las ventas de febrero se debió a que el mes tuvo un día menos que en el año bisiesto de 2016. Tras ajustar por efecto calendario, los ingresos crecieron un 3% en monedas locales, por debajo de las estimaciones.
Estos últimos años, H&M estuvo opacada por Inditex, su competidora que crece más rápido, aunque los resultados publicados este miércoles por la dueña de Zara sugieren que su situación también se ha complicado.
El margen bruto de Inditex disminuyó del 57,8% al 57% en los 12 meses hasta enero, con lo cual no alcanzó la meta del minorista español de mantener la medida dentro de 0,5 puntos porcentuales del año anterior.
Sus acciones llegaron a retroceder un 2,7%, la mayor caída desde diciembre, aunque compensaron parte de lo perdido después que su máximo ejecutivo, Pablo Isla, dijo que con las tasas de cambio actuales, el margen bruto no caerá este año.
Inditex declaró que la merma del margen bruto el año pasado se debió a oscilaciones cambiarias. Las monedas extranjeras le restaron tres puntos porcentuales al crecimiento de las ventas. Monedas debilitadas en Rusia, China y México disminuyen el valor de las ventas en esos mercados al pasárselas a euros.