INS da vida al Bosque del Bicentenario en Guanacaste para generar empleo y proteger biodiversidad

Un espacio público con 1.000 árboles, sitios recreativos y culturales, serán parte del Bosque del Bicentenario.

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Se trata de un proyecto del INS que pretende brindar servicios ambientales y de esparcimiento, así como empleo para las mujeres del cantón de La Cruz en Guanacaste.

La obra arrancó su construcción a finales del año pasado con la siembra de las primeras especies de árboles.

El sitio escogido representa una visión de cambio, ya que anteriormente se ubicó ahí un relleno sanitario.

El Bosque del Bicentenario se une a otras diez iniciativas del proyecto Huella del Futuro, mediante el cual la Primera Vicepresidencia ha agrupado diversos socios para reverdecer la zona norte del país y reactivar su economía.

El proyecto ayudaría a cumplir con las metas ambientales y celebrar los 200 años de independencia de Costa Rica.

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En un acto llevado a cabo en el antiguo relleno sanitario de La Cruz, Guanacaste, la primera vicepresidenta de la República, Epsy Campbell, el presidente ejecutivo del INS, Gabriel Pérez, el alcalde de La Cruz, Alonso Alan y otros funcionarios plantaron las primeras especies del Bosque del Bicentenario.

El proyecto traerá beneficios económicos para las personas de la zona, pues dará incentivos económicos a las mujeres de la comunidad a fin de encargarse del cuido y mantenimiento de cada uno de los árboles plantados por un periodo de cinco años.

“Agradezco al Grupo INS por la donación de estos 1.000 árboles que impactarán positivamente a los ecosistemas de la zona norte y traerán empleo para las mujeres de La Cruz. En el marco de los 200 años de vida independiente, este aporte representa el incansable compromiso de nuestro país con la protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático”, comentó Campbell.

Huella del Futuro fue creada en el marco de la celebración del bicentenario de independencia de Costa Rica y tiene por objetivo agrupar a socios de diversos ámbitos con miras a reverdecer la zona norte de Costa Rica, mediante la siembra de 200 mil árboles endémicos, florales, frutales y maderables, cifra que fue superada en octubre anterior, alcanzando los 254 mil árboles donados.

El proyecto pretende contribuir en aumentar la cobertura forestal a un 60% para el año 2030.

“Desde el INS estamos muy contentos pues, además de contribuir con la reforestación, permitiendo la protección del recurso hídrico, la conservación de la biodiversidad y el mejoramiento de la belleza escénica, aportamos a la reactivación económica de esta zona, generando empleos directos que propiciarán el empoderamiento social y económico de mujeres”, aseguró el presidente ejecutivo del INS, Gabriel Pérez.