Economistas debaten el impacto del estímulo a las tasas de interés
¿Qué pesará más, el pesimismo o las mejores condiciones crediticias?
Reducción de la tasa de política y relajamiento de regulaciones facilitan el crédito
Christine Jenkins cjenkins@larepublica.net | Lunes 29 julio, 2019
Las mejores condiciones para tomar créditos, con menores tasas y más recursos disponibles ayudarán a reactivar el crecimiento; o al menos, eso piensan el Banco Central y algunos economistas.
Consecuentemente, el ente emisor ha recortado la tasa de política monetaria en cuatro ocasiones durante los últimos meses; asimismo, ha liberado más recursos mediante la reducción en el encaje mínimo legal.
Del otro lado están los que consideran que el alto endeudamiento de los consumidores y la falta de confianza de los empresarios impedirán el aprovechamiento de las mejores condiciones.
La desconfianza crea un círculo del cuál es difícil salirse; por un lado, los consumidores bajan su demanda ante la incertidumbre y, por el otro, los empresarios, en respuesta, invierten menos y dejan de crear empleo.
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Lo cierto es que el empuje al crédito es uno de los pocos factores positivos que se ve para el segundo semestre en un momento en que se identifican varios riesgos a la baja, como la amenaza de huelgas.
La duda es si es capaz de hacer una diferencia significativa, ya que hasta el Banco Central, en su revisión de los pronósticos macroeconómicos, consideró que el problema nace de la baja demanda de crédito y no del lado de la oferta.
Específicamente, se señaló el alto endeudamiento de los hogares, estimado en 60 % del ingreso disponible, como un factor que impacta el crédito.
Esto significa que el cambio tiene que venir por el lado de los empresarios, que podrán acceder más fácilmente al crédito y usar esos recursos para inversión, explicó Rodrigo Cubero, presidente del Banco Central.
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Otra ayuda para bajar las tasas de interés viene por los eurobonos que usará de financiamiento el Gobierno este año, lo que podría darle tranquilidad a las empresas y hogares que requieren financiarse localmente, al no tener que competir por los mismos recursos.
El crédito en colones creció 5 % a junio, mientras que el saldo en dólares se redujo 3 % contra el año anterior.
Debate
¿Pesará más el pesimismo o las mejores condiciones crediticias? Los analistas discrepan.
José Luis Arce
Director de análisis y estrategia
FCS Capital
Optimismo moderado de que el crédito crezca
El Banco Central ha cambiado la postura política; el Gobierno va a tener una cantidad enorme de fondos
externos, que va a significar que ejerza una presión muy baja en el mercado local; además, va a haber
monetización, es decir un aumento en la liquidez asociado a cómo el Banco va a comprar esas divisas.
Lo que pasa es que en esto no existe la bala de plata; no hay una sola medida que vaya a reactivar la
economía, pero sí creo que un conjunto de elementos que se han estado adoptando para mejorar las condiciones
crediticias, yo sí creo que eso va a tener impacto en el segundo semestre y en el 2020.
Rodrigo Cubero
Presidente
Banco Central
Mejores condiciones propiciarán créditos empresariales e
inversión
Lo que se necesita para que la mejora en las condiciones crediticias se manifieste en mayor actividad
económica es que se aprovechen por parte de los consumidores y sobretodo los inversionistas, para que
empiecen a tomar más crédito e invertir más.
Eso tiene que manifestarse, y cuando se empiece a traducir en una mayor reactivación, una mayor demanda
agregada y, eventualmente, en un cierre de la brecha del producto, el Banco Central estará en una posición
de cambiar la trayectoria de la tasa de política monetaria, pero no lo estamos viendo en el cortísimo
plazo.
El Banco Central de nuevo toma una postura de política monetaria, donde reconoce que existe el espacio para
hacer un relajamiento de las condiciones monetarias y crediticas, porque prevalecen, en estos momentos, los
riesgos a la baja en inflación.
Luis Mesalles
Economista
Ecoanálisis
Hay pocos factores a favor del crecimiento y muchos en contra
Sigue mucha incertidumbre, sigue habiendo desconfianza que ha hecho que ni el consumo se recupere ni la
inversión tampoco, y de ahí que la economía no se está reactivando y el crecimiento económico sigue cada vez
más lento.
Recursos disponibles ha habido algo, pero la gente no está tan dispuesta a endeudarse por la misma situación
económica y hasta los mismos bancos tampoco están muy dispuestos a prestar porque tampoco saben si al que le
van a prestar el dinero después va a tener capacidad de pago.
No estamos en la gran crisis todavía, pero sí estamos en una situación que hay que ocuparse para tratar de
corregir los problemas que hay.
Roxana Morales
Economista
Universidad Nacional
Será difícil salir del círculo negativo del pesimismo
Gran parte de la población está demasiado pesimista, y no se trata solo de expectativas de la gente, sino
que es una realidad, porque hay un nivel de desempleo elevadísimo y muchas personas se encuentran trabajando
en la informalidad.
Hay sectores de la población que vienen sintiendo la crisis desde hace rato por el sobre endeudamiento,
tanto en el sector formal como con los prestamistas del barrio y para electrodomésticos.
Respecto a los hogares, además que los ingresos, o el poder adquisitivo se ha venido reduciendo, también se
reduce la liquidez, y eso afecta en gran parte el consumo.
Si las empresas están viendo una reducción en la demanda de consumo, tanto interna como externa,
difícilmente van a decidir invertir más, por más bajas que estén las tasas de interés, es un círculo
negativo.