La incomprensible estupidez de las empresas distribuidoras eléctricas
Ricardo Trujillo gerencia@fibrotel.cr | Miércoles 28 agosto, 2024
Ricardo Trujillo Molina MScEE
gerencia@fibrotel.cr
Costa Rica es un país energéticamente esclavo
Mientras aquí en Costa Rica el abonado eléctrico se ve obligado a continuar comprando energía eléctrica importada, sus empresas distribuidoras eléctricas se oponen rotundamente a que miles de sus propios asociados para el caso de las cooperativas, o de sus clientes, ayuden al país con sus propios recursos económicos a reducir esa dependencia energética del extranjero por medio de la generación solar distribuida, la cual se obtiene por medio de una inversión privada en paneles solares e inversores de potencia electrónicos.
Según las estadísticas que publica en el ente operador de la red regional del MER, las importaciones de electricidad de Costa Rica desde el primero de enero del 2023 a la fecha son de 537,000 megavatios hora que al precio anual actual vigente de US$ 221 por MWhora en dicho mercado equivalen a US$ 118 millones de dólares. En sumo contraste, las exportaciones del ICE en ese mismo periodo solamente han sido de 57 mil megavatios hora con precio actual de mercado de US$ 12,6 millones de dólares.
La generación térmica para generar electricidad también deberá considerarse como una importación de energía en bruto, y según un comunicado de prensa del 24 de mayo del 2024 la Aresep nos advierte que para el año en curso del 10% de la generación anual, o sea de 1,2 TWhora ( 1,200,000 MWh) para lo cual las tarifas eléctricas del 2025 tendrán que ser incrementadas en 193,000 millones de colones, los cuales son 368 millones de dólares al tipo de cambio de 525 colones por dólar.
El caso costarricense es insólito a nivel mundial
En ninguna otra parte del mundo ha ocurrido lo que aquí en Costa Rica estamos enfrentando para aprovechar al máximo la energía solar gratis que todos los días recibimos del sol y que sin lugar a equivocarnos recibiremos por los próximos 100 billones de años.
No se trata de una simple miopía económica, ni de falta de comprensión tecnológica, ni de defensa de intereses empresariales. Es un patetico caso de estupidez manifiesta de algunos dirigentes de las empresas de distribución eléctrica, y en especial de la ESPH.
No es posible comprender que esas empresas hayan manifestado su total y pertinaz oposición a un proyecto de tarifas más justas sencillas y apropiadas para la compra y venta de la generación eléctrico solar distribuida que ha propuesto la Aresep, ante el rechazo de las anteriores tarifas que resultaron ser un total desastre regulatorio.
Ventajas de la GSD para las empresas distribuidoras
Primero :
Se ha demostrado hasta la saciedad en todo el planeta que la generación solar distribuida es una moderna tecnología la cual ha sido una gran bendición de ayuda para las empresas distribuidoras de electricidad en todo el mundo, pues la tecnología les ha ayudado a reducir sustancialmente el trasiego de la energía proveniente de los generadores centralizados y de sus líneas de transmisión en alta tensión, a sus subestaciones, transformadores y redes de media y baja tensión con problemas de sobrecarga o al limite de ella, en especial a las horas del mediodía que son las de máxima demanda y corriente.
Con lo anterior, las empresas distribuidoras pueden extender la vida útil de sus redes de distribución sin verse obligados a enormes inversiones en los incrementos de potencia a sus subestaciones, transformadores de distribución y líneas de conducción a las zonas residenciales, comerciales e
industriales de rápido crecimiento. Al reducirse las sobrecargas en las horas de máxima demanda, también se reducen los caros cortes de energía y danos de gran cuantía en sus transformadores.
Y todas estas ventajas millonarias para las distribuidoras son prácticamente gratis, pues se obtienen sin que inviertan un cinco, ya que todo el costo de las inversiones corre por cuenta de la billetera de sus abonados.
Segundo:
Las distribuidoras eléctricas objetan las propuestas de nuevas tarifas para la generación solar distribuida argumentando sin probarlo, que sufrirán una severa afectación económica. Aducen de manera simplista que sufrirán fuertes recortes en sus ingresos sin mencionar que también disminuirán sus costos en compras de energía al mediodía. Estudiemos en suma profundidad la gran mentira y falaz pero muy bien elaborado argumento que se esfuerzan en sostener ante la Aresep.
No hay duda alguna que sus ingresos se verán disminuidos al reducirse la venta de energía en horas del mediodía, a causa del incremento de la generación solar distribuida para autoconsumo por un pequeño porcentaje de sus abonados. ¿Pero cuánto le pagan todas las distribuidoras al ICE por esa energía de alto costo marginal de las horas del mediodía?
De acuerdo a las tarifas vigentes T-CB, esa energía pagada al ICE le cuesta al sector de distribución del ICE y a la CNFL, el monto de 49,24 colones por kilovatio hora y a las demás cooperativas y empresas municipales 48.55 colones por KWh, un 20% más que la energía suplida en horas del periodo valle y un 44% más que la energía suplida en horas nocturnas.
De los precios anteriores podemos concluir sin temor a equivocarnos que el gran negocio de las distribuidoras, su máxima ganancia se obtiene al suplirle a sus abonados energía que le compran al ICE a tarifas de horas valle y nocturnas y no de las horas pico.
Si tomamos como ejemplo las tarifas comerciales vigentes de la ESPH, la cuales son de 57.12 colones por KWhora, el margen de utilidad bruto que obtienen en esas horas del mediodía es de solo ( 57,12 – 48,55 colones = 8,57 colones, el 15% de la tarifa ). Los abonados comerciales de la ESPH se han visto obligados a pagar un incremento del 12% con respecto a las tarifas de 50,92 que estuvieron vigentes el año anterior, a consecuencias del incremento en los costos de la generación térmica por el ICE.
El negociazo de la ESPH radica en revender la energía comprada al ICE a 34 colones por KWh en tarifa nocturna, al precio de 57,12/ KWh para abonados comerciales o de 69,48 hasta los 101 colones por KWh para los abonados residenciales de acuerdo a su nivel de consumo. Una ganancia bruta que va del 100% al 300%. ¿Porque en la ESPH sus jerarcas y asesores legales se quejan tanto de la afectación económica que tendrán las nuevas tarifas para la GSD cuando sus abonados estarán lógicamente acogiéndose a los beneficios de la ley # 10,086 para disminuir en alguna medida, el atraco tarifario a que son sometidos.
Conclusión
Es una sinvergüenzada extrema que las distribuidoras eléctricas se aprovechen de la legalidad que antecede la fijación de nuevas tarifas por la ARESEP, objetando la mayoría de las veces sin sentido o argumentos de verídicos de peso, la propuesta a consulta pública que presento desde el pasado mes de junio el ente regulador. No están trabajando en el bienestar de sus abonados sino en el empresarial propio o a lo mejor en el personal de sus jerarcas, acostumbrados a salarios estratosféricas a costa del bolsillo de sus abonados. Yo considero su actitud claramente anti-abonado como una estupidez y a la vez como una sinvergüenzada.