La sociedad ataca a la salud masculina
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Jueves 04 noviembre, 2010
La sociedad ataca a la salud masculina
La mala salud de los hombres se debe a factores socioculturales, pues quieren cumplir con las exigencias domésticas y, a la vez, alimentar a su familia
Un estudio, realizado por la fundación alemana Männergesundheit (Salud masculina), presenta a los hombres como el “sexo débil” en lo que a la salud se refiere, puesto que les llevan la delantera a las mujeres en materia de diabetes, gota, obesidad, cáncer de pulmón, infartos cardiacos y otras dolencias.
La culpa, según el estudio, no es necesariamente de los hombres sino de muchos factores, como el hecho de que las medidas preventivas pocas veces los alcanzan y de que los problemas específicamente masculinos no suelen ser suficientemente considerados.
“Los hombres no son unos idiotas en materia de salud como a veces se les presenta. La visión sobre la masculinidad tiene que cambiar, aunque en ello tengan que trabajar en primer lugar los hombres mismos”, dijo Mathias Stiehler, uno de los autores del estudio, durante su presentación en Berlín.
Los hombres se enfrentan muchas veces con el problema de querer cumplir con las exigencias domésticas derivadas de la nueva concepción de la paternidad y, a la vez, con las que le impone la necesidad de alimentar a su familia.
“Los hombres se ven con más frecuencia obligados a funcionar y a cumplir lo que se espera de ellos”, agregó Stiehler.
Todo ello, ha llevado desde los años 70 a un claro aumento de la disfunción eréctil, es decir de la impotencia, en Alemania. Otras consecuencias son las malas costumbres alimenticias debidas al estrés, problemas circulatorios y en ocasiones tabaquismo y alcoholismo.
Además, según una encuesta de la aseguradora médica DKV, los hombres tienden a querer solucionar sus problemas sin ayuda, por lo que pocas veces recurren a la asistencia psicológica.
Christina Schröder, ministra de Familia, comentó el estudio diciendo que “los hombres actualmente tienen una expectativa de vida cinco años menor que la de las mujeres, de los cuales cuatro años y medio se deben a factores socioculturales”.
“Podemos crear condiciones que ayuden a los hombres a vivir más saludablemente”, dijo Schröder.
El profesor Frank Sommer, el único catedrático de salud masculina de Alemania, que ejerce en el Hospital Universitario de Hamburgo-Eppendorf, dijo que uno de los problemas es la impaciencia de los hombres que tienden a querer ver resultados rápidos.
Berlín / EFE
La mala salud de los hombres se debe a factores socioculturales, pues quieren cumplir con las exigencias domésticas y, a la vez, alimentar a su familia
Un estudio, realizado por la fundación alemana Männergesundheit (Salud masculina), presenta a los hombres como el “sexo débil” en lo que a la salud se refiere, puesto que les llevan la delantera a las mujeres en materia de diabetes, gota, obesidad, cáncer de pulmón, infartos cardiacos y otras dolencias.
La culpa, según el estudio, no es necesariamente de los hombres sino de muchos factores, como el hecho de que las medidas preventivas pocas veces los alcanzan y de que los problemas específicamente masculinos no suelen ser suficientemente considerados.
“Los hombres no son unos idiotas en materia de salud como a veces se les presenta. La visión sobre la masculinidad tiene que cambiar, aunque en ello tengan que trabajar en primer lugar los hombres mismos”, dijo Mathias Stiehler, uno de los autores del estudio, durante su presentación en Berlín.
Los hombres se enfrentan muchas veces con el problema de querer cumplir con las exigencias domésticas derivadas de la nueva concepción de la paternidad y, a la vez, con las que le impone la necesidad de alimentar a su familia.
“Los hombres se ven con más frecuencia obligados a funcionar y a cumplir lo que se espera de ellos”, agregó Stiehler.
Todo ello, ha llevado desde los años 70 a un claro aumento de la disfunción eréctil, es decir de la impotencia, en Alemania. Otras consecuencias son las malas costumbres alimenticias debidas al estrés, problemas circulatorios y en ocasiones tabaquismo y alcoholismo.
Además, según una encuesta de la aseguradora médica DKV, los hombres tienden a querer solucionar sus problemas sin ayuda, por lo que pocas veces recurren a la asistencia psicológica.
Christina Schröder, ministra de Familia, comentó el estudio diciendo que “los hombres actualmente tienen una expectativa de vida cinco años menor que la de las mujeres, de los cuales cuatro años y medio se deben a factores socioculturales”.
“Podemos crear condiciones que ayuden a los hombres a vivir más saludablemente”, dijo Schröder.
El profesor Frank Sommer, el único catedrático de salud masculina de Alemania, que ejerce en el Hospital Universitario de Hamburgo-Eppendorf, dijo que uno de los problemas es la impaciencia de los hombres que tienden a querer ver resultados rápidos.
Berlín / EFE