Laura iría a China para celebrar aniversario
Natasha Cambronero redaccion@larepublica.net | Jueves 26 abril, 2012
Se cumplen cinco años de relaciones diplomáticas en junio
Laura iría a China para celebrar aniversario
Corea sería el otro destino de la Presidenta, en segundo semestre
Para conmemorar cinco años de relaciones diplomáticas, la presidenta Laura Chinchilla viajaría a China en junio.
Tras dos años de gestión y luego de postergar en varias ocasiones esa visita, la mandataria aprovecharía dicho aniversario para hacer maletas y dirigirse a Asia.
La visita de Chinchilla al gigante asiático tiene como objetivo abordar los acuerdos firmados entre ambas naciones, intensificar los lazos de amistad, explorar nuevas áreas de trabajo y captar más cooperación.
Sobre el último punto, se prevé que durante ese viaje se concrete una donación por parte del Gobierno chino para ampliar a cuatro carriles la carretera hacia Limón, proyecto que tiene un costo cercano a $380 millones.
La intención es que China done un monto menor a los $100 millones y que el resto sea financiado por dos bancos estatales de ese país.
Ello a través de un crédito a 20 años plazo, con una baja tasa de interés, que se pagará con emisión de bonos de deuda. El ICBC Bank y el Banco de Desarrollo Chino serían las entidades que prestarán los recursos.
La fecha estimada de la visita de la Presidenta a China se desprende del informe de cumplimiento de metas que la Cancillería presentó al Ministerio de Planificación a principios de año.
En dicho documento también se resalta una posible gira de Chinchilla a la República de Corea en el segundo semestre del año, propiamente en agosto próximo.
Al igual que China, la visita se daría en el marco de la celebración del aniversario número 50 del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos estados.
Con Corea el país pretende suscribir un Tratado de Libre Comercio. Con esa finalidad ya se realizaron los estudios de factibilidad y ya se determinaron las mercancías que tienen mayor potencial para ser intercambiadas.
De esa nación se pretende importar bienes industriales como aceites de petróleo, maquinaria, vehículos y productos de alta tecnología; mientras se prevé exportar productos agrícolas como café, piña, plantas y preparaciones alimenticias.
Este año, la agenda internacional de la mandataria está cargada, tras estar recientemente en Guatemala, Nueva York y Colombia. A finales del próximo mes irá a Europa durante ocho días.
En el Viejo Continente la primera nación que visitará será Francia para brindar un discurso en la Organización Económica para la Cooperación y el Desarrollo (OECD).
En esa entidad pretende posicionar al país entre las cadenas globales de valor, como un centro de negocios.
En medio de la visita a Francia, la Presidenta irá a Alemania durante tres días, para reunirse con su homólogo Joachim Gauck e inversionistas de este país.
Posteriormente se trasladará a Roma, Italia, para sostener un encuentro en el Vaticano con el papa Benedicto XVI.
Con el máximo representante de la Iglesia católica busca finiquitar el nuevo concordato que se negocia desde hace meses.
La presidenta Chinchilla pretende dejar reguladas las relaciones antes de que en el país se elimine el estado confesional y se convierta en uno laico, donde no existirá una religión oficial.
Natasha Cambronero
ncambronero@larepublica.net
Laura iría a China para celebrar aniversario
Corea sería el otro destino de la Presidenta, en segundo semestre
Tras dos años de gestión y luego de postergar en varias ocasiones esa visita, la mandataria aprovecharía dicho aniversario para hacer maletas y dirigirse a Asia.
La visita de Chinchilla al gigante asiático tiene como objetivo abordar los acuerdos firmados entre ambas naciones, intensificar los lazos de amistad, explorar nuevas áreas de trabajo y captar más cooperación.
Sobre el último punto, se prevé que durante ese viaje se concrete una donación por parte del Gobierno chino para ampliar a cuatro carriles la carretera hacia Limón, proyecto que tiene un costo cercano a $380 millones.
La intención es que China done un monto menor a los $100 millones y que el resto sea financiado por dos bancos estatales de ese país.
Ello a través de un crédito a 20 años plazo, con una baja tasa de interés, que se pagará con emisión de bonos de deuda. El ICBC Bank y el Banco de Desarrollo Chino serían las entidades que prestarán los recursos.
La fecha estimada de la visita de la Presidenta a China se desprende del informe de cumplimiento de metas que la Cancillería presentó al Ministerio de Planificación a principios de año.
En dicho documento también se resalta una posible gira de Chinchilla a la República de Corea en el segundo semestre del año, propiamente en agosto próximo.
Al igual que China, la visita se daría en el marco de la celebración del aniversario número 50 del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos estados.
Con Corea el país pretende suscribir un Tratado de Libre Comercio. Con esa finalidad ya se realizaron los estudios de factibilidad y ya se determinaron las mercancías que tienen mayor potencial para ser intercambiadas.
De esa nación se pretende importar bienes industriales como aceites de petróleo, maquinaria, vehículos y productos de alta tecnología; mientras se prevé exportar productos agrícolas como café, piña, plantas y preparaciones alimenticias.
Este año, la agenda internacional de la mandataria está cargada, tras estar recientemente en Guatemala, Nueva York y Colombia. A finales del próximo mes irá a Europa durante ocho días.
En el Viejo Continente la primera nación que visitará será Francia para brindar un discurso en la Organización Económica para la Cooperación y el Desarrollo (OECD).
En esa entidad pretende posicionar al país entre las cadenas globales de valor, como un centro de negocios.
En medio de la visita a Francia, la Presidenta irá a Alemania durante tres días, para reunirse con su homólogo Joachim Gauck e inversionistas de este país.
Posteriormente se trasladará a Roma, Italia, para sostener un encuentro en el Vaticano con el papa Benedicto XVI.
Con el máximo representante de la Iglesia católica busca finiquitar el nuevo concordato que se negocia desde hace meses.
La presidenta Chinchilla pretende dejar reguladas las relaciones antes de que en el país se elimine el estado confesional y se convierta en uno laico, donde no existirá una religión oficial.
Natasha Cambronero
ncambronero@larepublica.net