Sophia el robot - una idea de mercadeo que se salió de las manos
Walter Montes walter@enhancesol.com | Jueves 09 noviembre, 2017
Para el día de hoy estoy seguro que usted lector ha visto a este famoso robot en medios durante los últimos meses.
Si no lo ha visto, le explico. Sophia es un robot creado por la compañía Hanson Robotics basada en Hong Kong. Es la suma de varias técnicas (avanzadas, no hay que quitar crédito) de robótica que le permite tener gestos, procesamiento de audio que le permite escuchar las preguntas, reconocimiento de imágenes y caras, y procesamiento de lenguaje natural.
Todo muy bien hasta ahí. El problema es como se ha salido de las manos el mercado que se le ha realizado. Sophia ha sido llevada a múltiples conferencias y hasta programas televisivos y ha sido mercadeado como si tuviera vida y conciencia. A pesar de esto, algunos medios han aterrizado el tema y dado a entender que solamente es código computacional como el del chatbot que le vende un tiquete de avión a uno (en algunos países) con más trabajo en la parte de "interface" para parecer humano, pero no deja de ser un dialogo predefinido, no una serie de pensamientos casi-humanos.
El show se ha salido de las manos al punto que Arabia Saudí le ha brindado la ciudadanía recientemente.
¿Dónde está el problema en esto?
Sophia es una cosa. No piensa, no siente. Es una forma creativa de utilizar la tecnología, pero hasta ahí. El problema número 1 es la interpretación de algunos medios y personas en creer que estamos frente a una crónica de muerte anunciada como en casos similares al de Yo, Robot, no es así.
Problema número 2, la ciudadanía es brindada a este robot antes de que las mujeres tengan los mismos derechos que los hombres, y de que el sistema de "kafala" sea abolido en el país. Darle derechos a un objeto tiene sentido, para evitar daños a propiedad de una persona, pero dar una ciudadanía, es casi un chiste de humor negro, muy negro.
El valor que los negocios están aprovechando hoy en día de los "robots" (dígase chatbots, por ejemplo) no es la búsqueda de la conciencia en ellos, o inteligencia igual a la humana (hay otras personas buscando eso), son los algoritmos avanzados detrás de estas soluciones que permitan automatizar ciertas tareas. Y el poner una "cara" (dígase interface) más amigables y responsiva, es una buena idea, que al ser implementada totalmente nos dará certeza en si tiene sentido o no desarrollarla de esta manera.
Conociendo el impacto que tienen las noticias ambiguas y alarmistas en el tráfico de un website, iniciativas como Sophia se pueden salir de las manos a nivel global muy rápido. Esperemos no tenga peores consecuencias en un futuro próximo.