Médicos recomiendan implantar solo un embrión en FIV
Grettel Prendas gprendas@larepublica.net | Viernes 06 noviembre, 2015
Transferir un único embrión, en lugar de dos o tres, podría traer beneficios a las mujeres que optan por la técnica de fertilización in vitro (FIV), ya que bajaría el riesgo implícito en los embarazos múltiples.
Los médicos transfieren dos o más embriones al útero de la madre para aumentar las probabilidades de lograr un embarazo, pero esto también incrementa la eventualidad de que el niño nazca con parálisis o con malformaciones, entre otros peligros.
“El riesgo de parálisis infantil es hasta siete veces más alto en gemelos que en nacimientos únicos y de hasta 18 veces más en trillizos. Utilizar solo un embrión reduce la posibilidad de partos múltiples y sus consecuencias”, dijo Jaime Lazo, doctor en neonatología.
La tasa de gestación gemelar natural es de un 2% en los embarazos, la cual aumenta casi un 35% con la trasferencia de más de un embrión. La posibilidad de malformaciones pasa de 2% en nacimientos naturales a un 4% con FIV.
El riesgo de prematuridad y bajo peso al nacer crece con la implantación de más de un embrión a la vez.
La tendencia en Europa es transferir un único embrión. De hecho, países como Suecia o Dinamarca ya están realizando la práctica y reportan un 26% de éxito por ciclo.
En caso de que el primer intento no funcione, se intentaría nuevamente con otro embrión, pues la probabilidad de éxito es mayor con cada ciclo, hasta alcanzar la tercera implantación, asegura Lazo.
Sin embargo, existe controversia con respecto a utilizar un único embrión solo en mujeres menores de 35 años.
“Para edades superiores es necesario aumentar la cantidad para tener éxito, ya que los pronósticos son mejores. Esto porque los óvulos tendrán siempre la misma edad de la mujer y en una mujer mayor el óvulo también será de mayor edad”, dijo Fiorella Bagnarello, especialista en medicina reproductiva.
Asimismo, dependerá de la calidad del embrión y si se cultivó durante cinco días en lugar de tres.
Este blastocisto, que es como se le llama al embrión que alcanza el quinto día, tiene mejor pronóstico porque ya superó posibles bloqueos de desarrollo que los que lograron llegar al día tres.
El ciclo del cultivo equivale al proceso desde que el óvulo es expulsado del folículo hasta que llega al útero para ser fecundado por el espermatozoide.
La técnica in vitro extrae el óvulo del folículo en casos en que el sistema reproductivo tenga algún impedimento. En un laboratorio, el óvulo se cultiva hasta que esté listo para ser fecundado y pueda implantarse en el cuerpo de la mujer.