Mirando hacia el futuro
Fabio Parreaguirre fparreaguirre@larepublica.net | Lunes 29 julio, 2013
Mirando hacia el futuro
Como una “lista del Niño” se podría definir lo que se necesita mejorar desde el punto de vista económico y financiero.
Pero como en toda lista, hay prioridades y en INVERSIONISTA detallamos algunos temas que consideramos vitales para que Costa Rica crezca próspero.
Déficit fiscal
“La madre de todo el despelote que tenemos en economía se llama déficit fiscal”, dijo de manera contundente Jimmy Hernández.
Costa Rica ya renunció a atacar ese problema el año pasado a través de la Asamblea Legislativa, cuando rechazo la reforma para pagar más impuestos. A pesar de que Edgar Ayales, ministro de Hacienda, ha realizado ajustes en el gasto y en la recaudación no ha sido suficiente y la deuda crece. Solucionar este problema debería ser prioritario ya.
Liberar el tipo de cambio
“Desde 2009 estábamos listos, hubo una época en la que estuvimos flotando. Ahora perdemos el 1,5% del PIB solo por mantener tan altas las reservas”, dijo Bernal Jiménez, exdirector del Banco Central en un foro del Instituto Ideas.
Según cálculos de este doctor en economía, mantener el sistema de bandas, donde hay un precio mínimo y máximo para el dólar cuesta cerca de ¢900 millones diarios, este año.
Liberalizar el tipo de cambio podría abaratar costos de todo lo que se importa, desde la gasolina hasta a los alimentos. En el mundo los sistemas de cambio flexibles permiten ajustarse a los shocks externos más rápidamente, Costa Rica asumió un sistema de bandas de manera temporal y está por cumplir siete años.
Desarrollo del mercado de valores
Desde hace más de una década se habla de la necesidad de desarrollo del mercado de valores y entre las soluciones propuestas está la creación de una bolsa regional, que abarque Costa Rica, Panamá y El Salvador.
Aunque para muchos la implementación de un solo libro de operaciones entre las Bolsas de Valores de El Salvador, Panamá y Costa Rica se ha convertido en un mito, pareciera que lo que hace unos diez años inició tiene fecha de arranque en 2016.
El modelo con que nació la Alianza de Mercados Centroamericanos (Amerca) busca que exista un único punto de entrada a la región, por lo que habría un libro de órdenes donde se negociarían los títulos que cobija el acuerdo —acciones y bonos, recompras no— y eso lo que hace es un mecanismo de ruteo para los mercados respectivos.
Así si un valor que se está negociando tiene como mercado de origen nuestro país, la orden viene acá, o si es una compra de acción salvadoreña, iría hacia allá. El modelo mantiene la operación de las tres bolsas —no es que se juntan, pero sí tienen un único punto de entrada.
“Lo que esto requiere es una serie de cambios regulatorios que es donde el proyecto ha fallado porque no se han logrado los cambios con la oportunidad que uno quiere”, expresa José Rafael Brenes, gerente de la Bolsa de Valores.
En todo este tiempo se ha trabajado en el modelo de negocio y la plataforma tecnológica, y aunque ambos ya están definidos, se necesita todavía la autorización de los reguladores de los países donde ellos han estado trabajando en un proceso de verificación de estándares y ejecución de la información que ha contado con la asesoría del Banco Interamericano de Desarrollo, con la Organización Mundial de Reguladores AIOSCO.
“Lo último que nos dieron hace algunos meses fue el diagnóstico del informe del plan de acción y ahora tenemos que implementar estándares comunes de implementación, ya que este es un requisito autopuesto para de alguna forma facilitar el acceso de otros participantes a Amerca y en eso estamos”, agregó Brenes.
Incluso como Amerca ha caminado tan lento lo que nosotros quisiéramos, una vez con el proyecto regulatorio resuelto que puede ser para antes de 2016, es de una vez pensar en hacer Amerca y entrar al Mercado Integrado Latinoamericano (Mila), con lo que a los inversionistas institucionales les estaríamos dando una serie de inversiones sobre todo en acciones que son de un perfil interesante entre riesgo y rendimiento.
Inversiones que desarrollen el país
En línea con lo anterior destaca que aún hacen falta mecanismos seguros para se puedan canalizar dineros de fondos de pensiones al desarrollo de obra pública.
A la fecha los bancos BCR y Nacional son los únicos que han participado con fideicomisos de desarrollo de obra pública, básicamente con proyectos del sector educativo (UCR) y de Gobierno central (edificio de la Asamblea Legislativa), pero infraestructura clave para el desarrollo como la carreteras entre San José y San Ramón, el nuevo aeropuerto, y la terminal de contenedores podrían ser construidas con recursos locales por empresas locales en alianzas público-privadas que generen además ganancias a todos los que cotizan para los fondos de pensiones.
Pensiones en problemas: Necesario plan voluntario
Esto de las pensiones más que una preocupación para usted, debe ser una voz de alerta para pensar en planes voluntarios para lograr tener los mismos ingresos al momento de su jubilación, ya que con lo que recibirá por el régimen obligatorio, no cubrirá ni el 50% de su último salario.
Así que empiece a ahorrar desde ya por los beneficios que esto significa, ejecutando el Plan B desde que comience a trabajar, así acumulará más dinero para su vejez, y si no lo ha hecho, como dice el dicho: “Nunca es tarde”.
La Caja admitió que enfrenta dificultades con los dineros para las pensiones de todos los costarricenses, problema que creyó iba a tener hasta en 30 años, hoy la realidad es que puede que esté a la vuelta de la esquina y las soluciones aunque deben ser inmediatas, no se ven próximas.
Una solución es tomar un plan voluntario de pensión, donde usted tiene que ahorrar una parte de su salario para equiparar lo poco que la Caja le podrá entregar como pensión.
“El tema fundamental acá es que la población sepa a qué puede aspirar, que no podamos permitir que la Caja dentro de 20 o 30 años nos diga: Perdonen pero se acabó la plata”, explica Édgar Robles, superintendente de pensiones.
Este será su “colchón” para no sentir tan fuerte la caída en sus ingresos en el momento de jubilarse, compensando así el monto menor a su último salario que le entregará la Caja como pensión.
Las soluciones tendrían que ser inmediatas, pero el problema es que no se ven cercanas, por lo menos no hasta 2018 en lo político y en lo social es que son más los que se están pensionando a lo que puede pagar el régimen.
La Supen indica que lo primero que debe realizar la Caja es conocer qué tan grande es el problema, ya que no lo sabe.
Luego, debe eliminar la posibilidad que tienen las personas de pensionarse antes de los 65 años, algo que afectaría en su mayoría a empleados públicos que logran tener sus cuotas para jubilarse con anterioridad por su estabilidad laboral.
Esto es algo que no afectaría a los maestros y empleados judiciales ya que ellos tienen otro régimen.
Otra solución es pasar la edad para retirarse por encima de los 65 años, esto porque desde un punto de vista técnico le da un respiro al régimen.
Además, utilizar el dinero de las utilidades de las entidades públicas que la ley de proyección al trabajador prevé para el régimen hasta en 15%. Algo que se empezará a cobrar este año, pero solo en un 5%.
Otras preocupaciones
Vale la pena destacar que para los próximos años la implementación de normativas de gestión de riesgo que blinden el sistema costarricense ante crisis y un programa de educación financiera que refuerce las habilidades de las personas y las incluyan de mejor manera en un sistema que genera bienestar son nobles objetivos que se pueden incluir en esta lista.
Fabio Parreaguirre
fparreaguirre@larepublica.net