Motocross como estilo de vida

Johan Mora dice tener una “espinita” rumbo a una nueva temporada del torneo nacional

Con su sonrisa sencilla y su profunda mirada gris, un relajado Johan Mora llega a LA REPÚBLICA, vestido de jeans azul, tenis de un celeste medio chillón, camisa negra de la marca Fox y su inseparable gorra de atleta Red Bull.

El motocross es su “estilo de vida”, como el mismo lo define. Desde que se levanta hasta que se acuesta está pensando en eso, debe ser por su cuerpo corre gasolina en lugar de sangre y sus venas son cables.
La temporada 2014 está cada vez más cerca la muestra es que el piloto nacional luce ya en buena forma. “Todo lo que es físico lo estoy trabajando” y además, “estoy teniendo una buena dieta”, dice.
Hablar ante una cámara o una grabadora es bastante común para Johan, será qué algo lo pone nervioso. “Andar en motocicleta en la calle me da miedo”, comenta. “De hecho no tengo moto para circular en carretera. Las personas manejan muy estresadas y uno como piloto no le gusta andar muy despacio”, confiesa.
La temporada nacional comenzará a inicios de abril, “esa es mi realidad, compitiendo en mi país”, lo cual hace que Mora ya esté concentrado en eso, espera un año mucho más complicado que el vivido en 2013, que se definirá por pequeños detalles, por eso quiere tener todos los puntos bien afinados desde la primera fecha.
“2014 va hacer un año mucho más duro que el anterior. De mi parte yo estoy trabajando mucho más a conciencia, en la parte física y por otro lado la motocicleta, tanto que hemos solicitado a la fábrica que nos envíe unas partes para mejorarla”, explicó.
Johan quiere volver a lo alto, a figurar y liderar, es lo único que tienen en mente aquellos que son “luchadores”, como se define. “Quiero retomar un puesto en 2014, un lugar que ya he obtenido y que me han quitado. Tengo esa espinita y no me voy a conformar hasta sacarla y obviamente es hasta ganar el campeonato”, asegura.
Buscar un título, un campeonato es por satisfacción personal; forman un conjunto de los privilegios que da el motocross, además de tener “amigos” y “conocer lugares”.
Su eterno rival en la pistas ticas, así como los pilotos extranjeros que podría tener, es Roberto Castro, un duelo que esperan cada fecha los amantes de la MX1, pero que nació desde años atrás cuando eran niños y comenzaban en el deporte.
“Somos amigos, tenemos una bonita amistad, un bonito diálogo, nos repartimos consejos y tips. Nuestra rivalidad no es una rivalidad maldosa, es muy sana”, afirma.
La presión que cada uno ejerce sobre el otro es precisamente lo que los hace crecer y subir el nivel.
“Toda la vida prácticamente me ha tocado competir contra él y lo respeto mucho como corredor y persona. Pero siempre tratando de luchar para ser mejor. Nos exigimos mutuamente”, concluye.
Por el momento, Mora competirá en el torneo local, y también en algunas fechas en Colombia, mientras que Guatemala todavía es duda.

Dinia Vargas
dvargas@larepublica.net
@dvargasLR