No hay suficiente dinero para clínicas en 2012
Gabriela Masis gmasis@larepublica.net | Sábado 03 septiembre, 2011
Presupuesto para salud se reducirá en un 4%
No hay suficiente dinero para clínicas en 2012
Asegurados de las zonas con mayor población serían afectados por la restricción de horarios
Las clínicas de la Caja Costarricense de Seguro Social enfrentarán fuertes restricciones en 2012 por la falta de dinero.
Eso debido a que para el año entrante se proyecta una reducción cercana a un 4% en el presupuesto para el área de salud, lo que significaría unos ¢85 mil millones menos de lo proyectado para este año.
El objetivo es ajustar los gastos a los ingresos, ya que estos han crecido en los últimos años a un ritmo inferior al de los egresos.
Ante las limitaciones, el área de salud deberá ahorrar en emergencias, horas extraordinarias, nuevas contrataciones y pago de disponibilidad, entre otros gastos.
Este año la limitación en el gasto fue de un 4,5%, lo que significó una reducción en el gasto de ¢75 millones solo en el pago de tiempo extraordinario a especialistas.
También implicó una menor cantidad de recursos para la compra de maquinaria, equipos y mobiliario, y para nuevas construcciones.
Debido a la situación financiera que enfrenta la institución, los jerarcas de la Caja han solicitado a las distintas unidades replantearse los gastos y ahorrar.
“Hay un problema de liquidez. Y no se puede presupuestar más de lo que se gasta. Significa rebajar los gastos donde se requiera”, dijo Ileana Balmaceda, presidenta de la Caja.
El equilibrio de las finanzas se buscará en la gestión de las incapacidades, sustituciones, contrataciones y en los horarios extraordinarios de los médicos especialistas.
Ante tal situación las jefaturas de las clínicas periféricas están organizándose para ayudarse entre sí y gestionar la prestación de los servicios, a fin de no desmejorarlos.
Principalmente es una iniciativa de las clínicas del área metropolitana que tienen servicios de emergencia y que están ubicados en sitios con altos niveles de población.
A los organizadores les preocupa que las restricciones de horarios, las limitaciones en horas extraordinarias y las dificultades para adquirir insumos, afecten la calidad del servicio, entre ellos los de emergencias, que podrían sufrir por un ajuste en los horarios.
A criterio de los jerarcas hay áreas de emergencia con baja demanda.
Como ejemplo citan que en una de las clínicas metropolitanas trabajaban 12 horas y tal vez solo llegan dos personas que podrían ser atendidas en alguno de los hospitales.
Situaciones como la anterior son valoradas para determinar si es necesario hacer recortes.
Desde 2010 se ha venido aplicando una serie de directrices para reducir gastos a fin de garantizar la estabilidad financiera del sistema, sin embargo, en distintas oportunidades la Contraloría y la Auditoría Interna han señalado que los ingresos cada vez crecen menos, mientras los gastos se incrementan a mayor velocidad.
Gabriela Masís
gmasis@larepublica.net
No hay suficiente dinero para clínicas en 2012
Asegurados de las zonas con mayor población serían afectados por la restricción de horarios
Eso debido a que para el año entrante se proyecta una reducción cercana a un 4% en el presupuesto para el área de salud, lo que significaría unos ¢85 mil millones menos de lo proyectado para este año.
El objetivo es ajustar los gastos a los ingresos, ya que estos han crecido en los últimos años a un ritmo inferior al de los egresos.
Ante las limitaciones, el área de salud deberá ahorrar en emergencias, horas extraordinarias, nuevas contrataciones y pago de disponibilidad, entre otros gastos.
Este año la limitación en el gasto fue de un 4,5%, lo que significó una reducción en el gasto de ¢75 millones solo en el pago de tiempo extraordinario a especialistas.
También implicó una menor cantidad de recursos para la compra de maquinaria, equipos y mobiliario, y para nuevas construcciones.
Debido a la situación financiera que enfrenta la institución, los jerarcas de la Caja han solicitado a las distintas unidades replantearse los gastos y ahorrar.
“Hay un problema de liquidez. Y no se puede presupuestar más de lo que se gasta. Significa rebajar los gastos donde se requiera”, dijo Ileana Balmaceda, presidenta de la Caja.
El equilibrio de las finanzas se buscará en la gestión de las incapacidades, sustituciones, contrataciones y en los horarios extraordinarios de los médicos especialistas.
Ante tal situación las jefaturas de las clínicas periféricas están organizándose para ayudarse entre sí y gestionar la prestación de los servicios, a fin de no desmejorarlos.
Principalmente es una iniciativa de las clínicas del área metropolitana que tienen servicios de emergencia y que están ubicados en sitios con altos niveles de población.
A los organizadores les preocupa que las restricciones de horarios, las limitaciones en horas extraordinarias y las dificultades para adquirir insumos, afecten la calidad del servicio, entre ellos los de emergencias, que podrían sufrir por un ajuste en los horarios.
A criterio de los jerarcas hay áreas de emergencia con baja demanda.
Como ejemplo citan que en una de las clínicas metropolitanas trabajaban 12 horas y tal vez solo llegan dos personas que podrían ser atendidas en alguno de los hospitales.
Situaciones como la anterior son valoradas para determinar si es necesario hacer recortes.
Desde 2010 se ha venido aplicando una serie de directrices para reducir gastos a fin de garantizar la estabilidad financiera del sistema, sin embargo, en distintas oportunidades la Contraloría y la Auditoría Interna han señalado que los ingresos cada vez crecen menos, mientras los gastos se incrementan a mayor velocidad.
Gabriela Masís
gmasis@larepublica.net