No más excusas...a construir vías
Danny Canales dannycanales.asesor@larepublica.net | Miércoles 25 abril, 2012
Fondo de más de $1.500 millones disponible para carreteras
No más excusas… a construir vías
Desempolvar añeja agenda vial, promete Ministro
Ya no existen excusas para no reparar y ampliar las carreteras nacionales.
Hay plata como hace tiempo no tenía el país para destinarla al mejoramiento de la infraestructura.
La falta de dinero es el principal pretexto usado históricamente para no actualizar las carreteras.
El éxito que tenga el programa de caminos, sin embargo, dependerá de cómo se engranen las nuevas autoridades de vialidad que iniciarán labores el 1° de mayo.
Las obras que promete desarrollar Francisco Jiménez, ministro de Obras Públicas, están empolvadas de tanto que se han venido posponiendo. Algunas se esperan desde hace tres décadas.
Para mejorar esa situación, actualmente se dispone de más de $1.500 millones.
El dinero proviene de bancos y de fondos de cooperación internacionales.
Con ese dinero desarrollaremos obras como el país no ha visto en 20 o 30 años, prometió la presidenta Laura Chinchilla.
Esa tarea le fue encomendada a Luis Llach, exministro de Obras Públicas, y José Luis Salas, ingeniero que laboraba para el ICE.
Ellos asumirán el 1° de mayo el Viceministerio de Infraestructura y la Dirección del Consejo Nacional de Vialidad en reemplazo de María Lorena López y Carlos Acosta.
El principal reto que tienen las nuevas figuras es el de concluir la ruta de Circunvalación, que lleva más de tres décadas a medio terminar.
Se dispone para ello de $115 millones de un crédito cedido por el Banco Centroamericano de Integración Económica.
Ese banco financiará además la construcción de pasos a desnivel en las rotondas que aún quedan en la Circunvalación y trabajos para descongestionar la Uruca.
Ampliar una parte de la carretera que lleva a Limón es otro añejo proyecto que ya tiene fuente de financiamiento.
La amistad con China permitirá que la obra salga avante, pues ese gobierno donará un 25% de los $380 millones que costará la obra y financiará el resto con un crédito blando.
Llave en mano será el mecanismo que se empleará para construir la vía; es decir que los asiáticos harán las obras y entregarán la carretera hasta demarcada.
La ampliación a cuatro carriles del tramo entre Cañas y Liberia, en Guanacaste, también está en la agenda de obras por desarrollar.
Son 50 kilómetros y costará cerca de $100 millones provenientes de un millonario crédito aportado por el Banco Interamericano de Desarrollo.
Incluye aceras, ciclovía, bahías para autobuses y dispositivos de seguridad.
Fue la española FCC la que ganó el concurso para realizar la ampliación. Las obras inician esta misma semana.
Otro proyecto que pronto iniciará es el corredor Noratlántico. Es una nueva carretera que acorta la distancia entre la Zona Norte y el Caribe a solo 27 kilómetros.
Con un costo cercano a los $55 millones —provenientes de un empréstito de la Corporación Andina de Fomento— los trabajos le fueron otorgados a la empresa Sánchez Carvajal.
Para la capital se tiene programada una inversión por el orden de los $85 millones para eliminar las rotondas y reducir las presas que se forman en la Uruca.
Lo que se hará será construir pasos a desnivel, ya sea elevados o subterráneos.
Danny Canales
dcanales@larepublica.net
No más excusas… a construir vías
Desempolvar añeja agenda vial, promete Ministro
Ya no existen excusas para no reparar y ampliar las carreteras nacionales.
Hay plata como hace tiempo no tenía el país para destinarla al mejoramiento de la infraestructura.
La falta de dinero es el principal pretexto usado históricamente para no actualizar las carreteras.
El éxito que tenga el programa de caminos, sin embargo, dependerá de cómo se engranen las nuevas autoridades de vialidad que iniciarán labores el 1° de mayo.
Las obras que promete desarrollar Francisco Jiménez, ministro de Obras Públicas, están empolvadas de tanto que se han venido posponiendo. Algunas se esperan desde hace tres décadas.
Para mejorar esa situación, actualmente se dispone de más de $1.500 millones.
El dinero proviene de bancos y de fondos de cooperación internacionales.
Con ese dinero desarrollaremos obras como el país no ha visto en 20 o 30 años, prometió la presidenta Laura Chinchilla.
Esa tarea le fue encomendada a Luis Llach, exministro de Obras Públicas, y José Luis Salas, ingeniero que laboraba para el ICE.
Ellos asumirán el 1° de mayo el Viceministerio de Infraestructura y la Dirección del Consejo Nacional de Vialidad en reemplazo de María Lorena López y Carlos Acosta.
El principal reto que tienen las nuevas figuras es el de concluir la ruta de Circunvalación, que lleva más de tres décadas a medio terminar.
Se dispone para ello de $115 millones de un crédito cedido por el Banco Centroamericano de Integración Económica.
Ese banco financiará además la construcción de pasos a desnivel en las rotondas que aún quedan en la Circunvalación y trabajos para descongestionar la Uruca.
Ampliar una parte de la carretera que lleva a Limón es otro añejo proyecto que ya tiene fuente de financiamiento.
La amistad con China permitirá que la obra salga avante, pues ese gobierno donará un 25% de los $380 millones que costará la obra y financiará el resto con un crédito blando.
Llave en mano será el mecanismo que se empleará para construir la vía; es decir que los asiáticos harán las obras y entregarán la carretera hasta demarcada.
La ampliación a cuatro carriles del tramo entre Cañas y Liberia, en Guanacaste, también está en la agenda de obras por desarrollar.
Son 50 kilómetros y costará cerca de $100 millones provenientes de un millonario crédito aportado por el Banco Interamericano de Desarrollo.
Incluye aceras, ciclovía, bahías para autobuses y dispositivos de seguridad.
Fue la española FCC la que ganó el concurso para realizar la ampliación. Las obras inician esta misma semana.
Otro proyecto que pronto iniciará es el corredor Noratlántico. Es una nueva carretera que acorta la distancia entre la Zona Norte y el Caribe a solo 27 kilómetros.
Con un costo cercano a los $55 millones —provenientes de un empréstito de la Corporación Andina de Fomento— los trabajos le fueron otorgados a la empresa Sánchez Carvajal.
Para la capital se tiene programada una inversión por el orden de los $85 millones para eliminar las rotondas y reducir las presas que se forman en la Uruca.
Lo que se hará será construir pasos a desnivel, ya sea elevados o subterráneos.
dcanales@larepublica.net