Nuevo acueducto empieza a generarle potenciales negocios al cantón de Cañas

El nuevo acueducto que se construye en el cantón de Cañas empieza a generarle réditos a esa comunidad guanacasteca.

Justamente, el aumento de la oferta de agua que se dará en el corto plazo impulsó a seis empresas a interesarse en invertir en el cantón en proyectos de desarrollo inmobiliario.

El último desarrollo que se había construido en la comunidad data de hace 13 años, antes de la restricción a la que se vio forzado a realizar el gobierno local por la escasez y contaminación del agua. Dicha situación tiene sumido a este cantón en un rezago de 1.500 viviendas.

Cañas tenía una gran necesidad de buscar alternativas de generación de agua, toda vez que las fuentes actuales no son suficientes para atender la demanda por el crecimiento de la población y luego de que estudios encontraran altas concentraciones de arsénico que redujo aún más la oferta del líquido.

La solución a este problema es un acueducto que gestionó la Municipalidad de Cañas y el gobierno central, con el apoyo de la República Popular China. Beneficiará a 27 mil habitantes del cantón y comunidades aledañas.

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El gigante asiático no solo construye la obra, sino que además aportó los $16 millones para su financiamiento y los técnicos y algunos operarios para entregar la obra lo antes posible.

Actualmente, la construcción registra un avance del 60% y, de no suceder ningún imprevisto, se estará poniendo en operación en agosto de este año.

“La planta potabilizadora de agua es nuestra tabla de salvación; tenemos un fuerte obstáculos para el desarrollo y es no contar con suficiente agua para el consumo humano; con esa donación china vamos a tener suficiente agua para poder desarrollar vivienda, comercio, empresas y todo lo demás; así que con esa inversión queremos desarrollar Cañas”, destacó Luis Fernando Mendoza, alcalde del cantón.

La gestión para construir los nuevos residenciales se ajusta al plan promovido por el municipio para convertir a Cañas en un cómodo centro dormitorio de los trabajadores de varios de los cantones de Guanacaste que, por su mayor desarrollo, el costo de compra y renta se ha disparado.

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Es un plan ganar-ganar, ya que los ciudadanos tendrían residencias a menor costo, el gobierno local recibiría más por patentes y permisos y se estimularía el comercio al crecer la población.

El proyecto captará el agua del embalse Sandillal, propiedad del ICE, y mediante una nueva planta potabilizadora, una estación de bombeo y la instalación de nuevas tuberías, la distribuirá hacia los habitantes de las comunidades de Cañas, Palmira, San Miguel, Bebedero y Porozal.

“Esta obra marca la historia de Cañas y Bebedero, pues la disponibilidad del líquido garantizará la salud de la población y el desarrollo de estas ciudades en vivienda, comercio, industria y otros por los próximos 20 años”, resaltó Yamileth Astorga, presidenta Ejecutiva de Acueductos y Alcantarillados.