Olvide la anestesia
Giuliana Llanes gllanes@larepublica.net | Martes 04 diciembre, 2012
Olvide la anestesia
Piel más clara y firme es posible con radiofrecuencia
¿Qué beneficios brinda a los pacientes?
El beneficio de esta nueva técnica, que utiliza la radiofrecuencia para calentar sin dolor la piel, recae en que podemos lograr buenos resultados sin el riesgo de la anestesia general. Además los resultados son visibles de inmediato.
Tampoco hay tiempo de recuperación, es decir se puede realizar el procedimiento e inmediatamente salir para asistir al trabajo o a una actividad social.
No es doloroso y tiene una duración aproximada de media hora en rostro y una hora para el tratamiento corporal.
¿Cuáles cuidados exige el tratamiento?
Se recomienda al paciente tomar al menos ocho vasos con agua diarios, ya que cuanto mejor hidratada esté la piel mejor serán el aspecto y el resultado del tratamiento.
Es recomendable también que en caso de tratar el abdomen, no se ingieran alimentos muy pesados las dos horas anteriores a la cita.
¿Qué padecimientos se pueden tratar?
La llamada RF se utiliza para eliminar celulitis y la flacidez, mejorar las bolsas bajo los ojos, eliminar arrugas alrededor de la boca, mejorar el aspecto de la papada, producir un lifting generalizado en rostro, dar claridad y mejorar la apariencia general de la piel.
Se puede utilizar en rostro, brazos, muslos, cuello, papada, abdomen, espalda, y “muffin tops”.
¿De qué manera es más eficiente o mejor que otros?
A la RF se le podría comparar con otro de nuestros tratamientos estrella, el famoso carboxiterapia. Sin embargo, la ventaja de la RF sigue siendo el hecho de no ser doloroso, no lleva agujas en el proceso por lo que no hay posibilidad de moretes.
La RF supera nuestras expectativas en cuanto a los resultados que pueden obtenerse con un método no invasivo. Y al ser una aparatología no combinada con otra tecnología, como otros que combinan varias terapias en una sola máquina, podemos obtener lo resultados específicos y una mejor aplicabilidad.
Giuliana Llanes
gllanes@larepublica.net