Poder Judicial, universidades públicas y municipios podrán definir sus remuneraciones al margen de salario global
Para cerrar portillos legales Rodrigo Chaves ya trabaja en versión 2.0 de empleo público
Ley que entra a regir en dos meses es un adefesio porque permite injusticia en remuneraciones
Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Jueves 02 febrero, 2023
Para cerrar varios portillos legales y acabar verdaderamente con las inequidades salariales, el presidente Rodrigo Chaves ya trabaja en una versión 2.0 de la ley de empleo público.
Para el mandatario, la normativa que entra a regir en dos meses no es otra cosa que un “adefesio”, ya que permitirá que algunas instituciones del Estado sigan trabajando como islas.
“La ley tiene un montón de portillos que buscaremos cerrar pronto, a la vez que mantiene la inequidad y la injusticia salarial entre los empleados del Estado y la población en general (…) Cómo puede ser que usted le paga menos a un ministro, que a una persona que trabaja en una universidad estatal solo porque dice que es autónoma en su funcionamiento, cómo se justifican salarios millonarios para conserjes. Por eso, yo digo que se trata de una ley que es un adefesio”, dijo Chaves.
Y es que, el Poder Judicial, las universidades públicas, las municipalidades, el TSE y la Caja Costarricense del Seguro Social, podrían actuar como “islas”, amparadas en una resolución de la Sala IV que las faculta para regularse en materia de empleo público.
“Para quién trabajan los empleados de la Corte, para el pueblo de Costa Rica o para el Poder Judicial, para quién trabajan las universidades, para los académicos o para el pueblo de Costa Rica. El patrono del Estado es solo uno y son los costarricenses (…) Este asunto nos demuestra que algunos grupos tuvieron más poder político que otros durante el debate del proyecto de ley”, dijo Chaves.
La iniciativa en cuestión fue aprobada por los diputados del anterior gobierno, con la intención de establecer un mismo salario por puesto laboral en el Estado y de esta forma, acabar con las diferencias salariales que han abierto un abismo en materia de remuneraciones; asimismo, se pretende racionalizar el gasto y lograr un ahorro para el Estado.
Solo para este año, los costarricenses pagarían -vía impuestos – más de ¢2,7 billones en salarios para los trabajadores del gobierno central.
“Los costarricenses sí pueden esperar un ahorro anual en el pago de remuneraciones, el cual, se dará de manera paulatina y con mayor incidencia en el mediano plazo. Recordando que las nuevas contrataciones de las instituciones públicas se realizarán bajo el nuevo esquema de salario global, y que en el caso de personas cuyo salario compuesto con pluses sea superior al salario global, les permanecerá sin crecimiento hasta que igualen el monto del salario global, así indicado por la ley de empleo público”, agregó Laura Fernández, ministra de Planificación.