Patrimonios históricos en riesgo por falta de atención
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 05 julio, 2008
Alrededor de 400 edificios deben ser vigilados solo por cinco profesionales
Patrimonios históricos en riesgo por falta de atención
• Ausencia de recursos pone en riesgo firmeza de estructuras, estética y la seguridad de quienes los utilizan
Pablo Mora
pmora@larepublica.net
En el país existen aproximadamente 400 edificios que fueron declarados Patrimonios Históricos Arquitectónicos por su estética y su significado en la vida nacional.
Pese a la relevancia de estos testigos de los anales costarricenses, la carencia de personal y de recursos suficientes que sufre el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural impide la vigilancia del buen estado de esas obras.
Solo cinco profesionales (cuatro arquitectos y un ingeniero) se encargan de velar por el buen estado de alrededor de 30 inmuebles antiguos por año. En otras palabras, las edificaciones reciben la visita de los expertos cada 13 años si se cumple con esa cuota anual.
Ese grado de descuido se achaca a la falta de dinero. Se necesitarían al menos 24 plazas más, entre ingenieros y arquitectos, para tener un mejor control sobre el estado de las estructuras antiguas, explicaron voceros del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural, el cual forma parte del Ministerio de Cultura y Juventud.
“Hemos pedido más recursos. Con una mayor cantidad de fondos podríamos hacer contratos para la restauración de los edificios. Por ahora es imposible por falta de presupuesto, y eso que hemos recibido un porcentaje un poco más alto de lo que nos corresponde para reparaciones”, comentó Sandra Quirós, directora del Centro.
En su mayoría estos monumentos carecen de buenas condiciones estructurales o de mantenimiento, reconocieron representantes del Ministerio. Otros tienen sus espacios interiores en buen estado, pero su fachada se observa muy deteriorada.
Esta situación se comprueba a través del tiempo. Incluso el edificio más emblemático de la historia nacional no logró escapar al descuido y al vandalismo: la Casona de Santa Rosa fue víctima de un incendio el 9 de marzo de 2001. El fuego consumió una buena parte, y aunque fue reparada, se dañó gran parte de su estructura original.
El 10 de mayo, otro inmueble antiguo resultó dañado por un incendio. Las brasas consumieron parcialmente el tercer piso del edificio La Alhambra, que data de finales del siglo XIX.
Finalmente, esta semana trascendieron los daños en el Edificio Metálico. Sus columnas, que funcionan también como bajantes de agua, se corroyeron tanto que se hicieron hoyos en su estructura, lo cual inició un debate sobre si es necesaria una evacuación para mejorar su estado.
Pero el cuidado de estos inmuebles no depende solo del Ministerio. De acuerdo con Quirós, el primer responsable del mantenimiento de este tipo de lugares es el dueño del local.
En el caso del Edificio Metálico, la obligación de mantener su infraestructura en buenas condiciones es del Ministerio de Educación Pública (MEP) y de los propios administradores de ese centro educativo.
“El MEP nos solicitó colaboración para vigilar los centros educativos que son patrimonios históricos debido a que ellos no pueden por falta de recursos. Y pese a nuestras limitaciones, tratamos de revisar cuatro escuelas por año”, aseveró Quirós.
Pese a las limitantes descritas, el Ministerio intenta atenuar la falta de personal y apoyo con planificación.
“Si el edificio está en buen estado no se analiza tan seguido. Damos prioridad a obras que se encuentran en mal estado. Esos son los que nos ocupan más”, señaló Quirós.
Patrimonios históricos en riesgo por falta de atención
• Ausencia de recursos pone en riesgo firmeza de estructuras, estética y la seguridad de quienes los utilizan
Pablo Mora
pmora@larepublica.net
En el país existen aproximadamente 400 edificios que fueron declarados Patrimonios Históricos Arquitectónicos por su estética y su significado en la vida nacional.
Pese a la relevancia de estos testigos de los anales costarricenses, la carencia de personal y de recursos suficientes que sufre el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural impide la vigilancia del buen estado de esas obras.
Solo cinco profesionales (cuatro arquitectos y un ingeniero) se encargan de velar por el buen estado de alrededor de 30 inmuebles antiguos por año. En otras palabras, las edificaciones reciben la visita de los expertos cada 13 años si se cumple con esa cuota anual.
Ese grado de descuido se achaca a la falta de dinero. Se necesitarían al menos 24 plazas más, entre ingenieros y arquitectos, para tener un mejor control sobre el estado de las estructuras antiguas, explicaron voceros del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural, el cual forma parte del Ministerio de Cultura y Juventud.
“Hemos pedido más recursos. Con una mayor cantidad de fondos podríamos hacer contratos para la restauración de los edificios. Por ahora es imposible por falta de presupuesto, y eso que hemos recibido un porcentaje un poco más alto de lo que nos corresponde para reparaciones”, comentó Sandra Quirós, directora del Centro.
En su mayoría estos monumentos carecen de buenas condiciones estructurales o de mantenimiento, reconocieron representantes del Ministerio. Otros tienen sus espacios interiores en buen estado, pero su fachada se observa muy deteriorada.
Esta situación se comprueba a través del tiempo. Incluso el edificio más emblemático de la historia nacional no logró escapar al descuido y al vandalismo: la Casona de Santa Rosa fue víctima de un incendio el 9 de marzo de 2001. El fuego consumió una buena parte, y aunque fue reparada, se dañó gran parte de su estructura original.
El 10 de mayo, otro inmueble antiguo resultó dañado por un incendio. Las brasas consumieron parcialmente el tercer piso del edificio La Alhambra, que data de finales del siglo XIX.
Finalmente, esta semana trascendieron los daños en el Edificio Metálico. Sus columnas, que funcionan también como bajantes de agua, se corroyeron tanto que se hicieron hoyos en su estructura, lo cual inició un debate sobre si es necesaria una evacuación para mejorar su estado.
Pero el cuidado de estos inmuebles no depende solo del Ministerio. De acuerdo con Quirós, el primer responsable del mantenimiento de este tipo de lugares es el dueño del local.
En el caso del Edificio Metálico, la obligación de mantener su infraestructura en buenas condiciones es del Ministerio de Educación Pública (MEP) y de los propios administradores de ese centro educativo.
“El MEP nos solicitó colaboración para vigilar los centros educativos que son patrimonios históricos debido a que ellos no pueden por falta de recursos. Y pese a nuestras limitaciones, tratamos de revisar cuatro escuelas por año”, aseveró Quirós.
Pese a las limitantes descritas, el Ministerio intenta atenuar la falta de personal y apoyo con planificación.
“Si el edificio está en buen estado no se analiza tan seguido. Damos prioridad a obras que se encuentran en mal estado. Esos son los que nos ocupan más”, señaló Quirós.