Peso mexicano registró el mejor año desde 2012
Bloomberg | Martes 02 enero, 2018 02:50 p. m.
Bloomberg- Después de recuperarse de una marcada depreciación del tamaño de la victoria del presidente Donald Trump en Estados Unidos, el peso mexicano inició en julio del año anterior una trayectoria descendente, aunque no lo suficientemente inclinada como para borrar lo que resultó ser su primera ganancia anual en cinco años.
Más nerviosismo debido al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y una elección presidencial significan que el 2018 podría ser volátil.
La incertidumbre sobre el TLCAN, que cubre $1 billón (millón de millones) de comercio entre EE.UU., Canadá y México, ha ejercido presión sobre el peso desde que Trump llegó a la Casa Blanca.
Y julio trae una elección en la que el candidato izquierdista Andrés Manuel López Obrador aparece con buenas posibilidades de desbancar al gobernante Partido Revolucionario Institucional, que ha estado plagado de escándalos.
"Gran parte de la ganancia del peso fue una corrección del exceso de pesimismo en el pasado", dijo Danny Fang, analista de BBVA en Nueva York.
Para el primer trimestre de 2018, podemos esperar que el peso mexicano permanezca sensible a nuevas rondas de ruido político, con el proceso electoral y las negociaciones del TLCAN como los principales impulsores".
El peso cayó casi 14% inmediatamente después de la victoria en noviembre de 2016 de Trump, quien amenazó durante su campaña con retirarse del pacto comercial.
Pero luego subió rápidamente, registrando en el primer trimestre el mejor desempeño entre las monedas de mercados emergentes seguidas por Bloomberg.
Aunque el repunte decayó a mediados de año, el peso aún terminó 2017 con un alza del 5,4% y se ubicó en segundo lugar entre las monedas latinoamericanas solo por debajo del 8,9% del peso chileno.
Un banco central con una línea cada vez más dura podría ayudar a impulsar el peso este año.
Sin embargo, los inversionistas siguen siendo cautelosos. Los diferenciales de rendimiento entre los bonos locales y de divisas están en un máximo de seis años ya que los inversionistas se protegen contra el riesgo cambiario.
A medida que aumenta la presión antes de las elecciones, queda por ver si la moneda puede repetir el desempeño este año.